Mi perfecto cuadrado amoroso || yoonkookmin

V

El contrato (ridículo que existiera uno ya que los había comprado por Internet y no había habido ningún tipo de abogado o escribano presente para certificar el mismo) detallaba claramente que no podía renunciar al esposo (en este caso tres) hasta trascurrido al menos el plazo de treinta días.

Había querido recurrir a mi abogada y pedirle que me libere de esto, pero era bastante vergonzoso explicarle la situación y además los muchachos me habían pedido una oportunidad.

Treinta días y podría dejarlos ir.

Necesitaban el dinero y yo necesitaba amor.

Treinta días y los cuatro seríamos libres.

Eran lo suficientemente guapos para hacer el intento.

Treinta días.