Dante Alighieri se quedó corto

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—¡Hey!, ¡aqui estoy!¡VIVITA Y SANA COMO UNA LECHUGA!—No me hacen caso, me ignoran y solo se quedan allí, murmurando y mirando mi cuerpo—.¡YA DEJEN DE MIRARLO ASI!—grito enojada.

Todo comienza a darme vueltas, ya no veo personas si no manchas, las voces comienzan a escucharse cada vez menos y un silencio aturdidor toma ventaja del resto de los sonidos que ahora se desvanecen.

Comienzo a olvidar cosas.

A mi alrededor todo empieza a desaparecer y ese terror que antes me invadía vuelve con mas impetu. No quiero morir, señor no quiero morir. No quiero irme tan pronto, yo...necesito despedirme...¡necesito terminar cosas! ¡Disculparme con tanta gente! ¡aun no me puedo ir! ¡Necesito...

Me desvanesco.

°°°°°◇°°°°°

No recuerdo nada, solo recuerdo que iba a unas vacaciones de verano a grecia y luego ví mi cuerpo en el avión.

Pero, ¿Estoy muerta?, ¿acaso me asesinaron?.

Observo todo a mi alrededor, el lugar es hermoso ¿Cómo podría describirlo? .Es como esa químera con la que tanto sueña la humanidad. Parece ciudad utópica; tan perfecta y esplendorosa.

—¿Se encuentra bien?— me giro para ver el dueño de la armoniosa voz que pregunta por mi estado— . Parece desorientada.

Estoy muerta, lo sé, pero ese hombre es tan guapo que creo que mi corazón me siguió hasta el más allá porque no deja de latir, incluso...¿que iba a decir? No puedo concentrarme, no cuando ese adonis me mira de una manera que me dan ganas de violarlo.

—¿Dónde estoy?— por suerte recorde lo que iba a decir.

—¿Qué no lo sabe?.

—¿Si lo supiera le preguntara?.

—Buen punto— se acerca a mi duditativo—. Vera señorita, usted se encuentra en el Paradiso, es como un pequeño "país" que se encuentra antes del cielo ¿comprende?.

Lo miro estupefacta.

—¿Quiere decir que en verdad estoy muerta?—pregunto con horror. No es que no lo sospechara es que se escucha tan real cuando alguien lo dice en voz alta.

—No, al menos aun no, por los momentos solo se encuentra en coma o en una situación entre la vida y la muerte, no estoy muy seguro.

— ¿Y entonces que hago aqui?.

— Este lugar es como un limbo, en donde estará hasta que sepan que ocurrirá con usted.

—¿Esta diciendo que me quedaré aqui hasta que despierte o hasta que muera?— el chico guapo con mirada de anciano me sonríe y asiente—¡¿Está loco?!. No cononozco a nadie y ni siquiera se donde me encuentro ni a donde ir. ¡¿qué se supone que haga?¡.

—Vealo como esas vacaciones que se iba a tomar antes de llegar aquí— manifiesta sereno.

—¿Le parece gracioso esto?-bramo enojada—. ¿Estoy medio muerta y usted se burla de mi?. ¡Llevaba semanas planeando esas vacaciones y ¡se suponía que nada iba a salir mal! ¿y con que me encuentro? ¡Con que soy una zombie!

—Primero. ¿Acaso me ve cara de payaso?— no, te veo cara de dios mitológico con una mezcla de actor porno—, segundo, no es un zombie, si, está medio muerta, pero tu cuerpo no reacciona asi que técnicamente no lo es y tercero, le estoy aconsejando que lo vea de esa forma, no todas las personas vienen al paradiso y viven para contarlo.

Bajo mi cabeza turbada.

—Sigame— dudo un poco y el lo nota—. ¿Tiene otra opción?—niego y con un punto a su favor lo sigo—. Bien, puede confiar en mi, me llamo Lucas—le sonrío a boca cerrada sin decir nada más.

Francamente diría que Dante Alighieri se quedo muy corto describiendo este estrato conocido como el paradiso, ¿quién no?, este lugar es tan extraordinario como la sensación de felicidad. Es algo tan hermoso que no hay palabras para compararlo.

Hay una gran cascada de aguas celeste de tonos diferentes, pero que no se mezclan, las personas caminan luciendo muy felices mientras que otras tantas, entran y salen de un edificio.

De no ser por ese edificio—que se asimila mas a el castillo de la reina blanca de alicia en el país de las maravillas que a cualquier otra cosa— este lugar es el reflejo de unas buenas vaciones de verano.

Ese castillo era para este sitio, como recitar poesía en un concurso matemático.

Fuera de lugar, pero bello sin duda.

Lucas me guía y me explica que allí es donde reciben a las animarum—que en español significa "almas"—recién llegadas.

El recepcionista—que parece un humano ordinario—me explica todo lo que ha ocurrido y un poco mas tranquila y llena de esperanzas por volver, salgo de ese edificio tan arquitectónicamente sobrenatural y asombroso.

°°°°°◇°°°°°°
No se si han pasado segundos o décadas, la palabra tiempo aqui no existe y la gente se deja llevar por lo que les parece, no por las agujas del reloj.

Desde que llegué hay algo que no deja de inquietarme y que le manifesté a mi "guía turístico", ese hombre guapo que me ofreció su ayuda desde que llegué aqui y que ahora parece un chicle en el cabello porque no se despega de mi.

Pero no me quejo.

《Los superiores prefieren que las personas olviden su vida mientras están aqui, de esa manera no se mortifican y están más tranquilos》—era lo que me había dicho.

De todas maneras, aun no logro explicarme porque recuerdo que antes de que alguien intentara asesinarme yo estaba a punto de tomarme unas vacaciones.

—No le des más vueltas— me sobresalto al escucharlo—. Disfruta de lo que tienes frente a ti— me sonríe. Un gesto que hace que mi estómago, no sienta mariposas, si no que tome una motocicleta y haga una gran voltereta de la muerte.

Al final, hago lo que me dice, después de todo, no siempre se presenta una oportunidad asi.

He planeado al pie de la letra mis vacaciones y aunque no hubiesen salido como lo deseaba, no estoy dispuesta a desaprovechar este "verano".

Vacaciones CelestialesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora