Capítulo.1

910 79 4
                                    

OPV T/N

«Rinrin-Rinrin-Rinrin-Rinrin» sonaba la alarma del reloj.

Estiré mi mano hacia el reloj para apagarlo, pero mis intentos fueron fallidos.

—Me pregunto ¿por qué la vida tiene que ser tan injusta? — dije entre sollozos — Es mucho pedir ¡5 minutos más! — apreté la almohada contra mi cara.

Rendida ante mis intentos de apagarla, seguí a levantarme de la manera más digna que pude, que no se notara la inmensa flojera que traía el día de hoy.
Luego de unos 15 minutos, bajé rápidamente las escaleras para comer algo y partir hacia la escuela.
Como siempre mi madre preparaba el desayuno, unos ricos huevos revueltos y mi padre se hallaba sentado en la mesa leyendo su periódico.

— ¡Buen día! — dije sentándome rápido en la mesa.

— ¡Buen día T/N! El desayuno está servido — dijo mi madre, mientras secaba los platos.

— Recuerda que hoy tienes clases de violín, no puedes faltar a más clases — Alcé mis ojos para encontrame con la estricta mirada de mi padre.

— Ya te he dicho ciento de veces que no me interesa aprender a tocar el violín — dije con tono de disgusto.

Mis padres siempre me han obligado a  hacer cientos de cosas contra mi voluntad, tienen el estereotipo de "hija perfecta", siempre he sacado buenas notas y he hecho todo lo que han pedido. Pero eso nunca ha sido suficiente para hacerlos feliz.

— No me hables en ese tono jovencita, la hija de los Smith ya aprendió a tocar el violín, tú tienes que hacer lo mismo, que pensarán los demás.

— ¡Ya basta! — levanté la voz — ¡Estoy harta que me compares con ella! ¡Estoy harta que me obliguen hacer cosas que no me gustan! — dije furiosa — A nadie le interesa que es lo que hacemos papá, deja de pensar que todo el mundo gira hacia a ti.

— Te he dicho que no me hables en ese tono — alza su mano para golpearme fuerte en la mejilla.

Estaba en un estado de shock por lo ocurrido recientemente, al igual que mi madre, sin embargo no hizo nada frente a la situación, como siempre.

— Ya te sientes mejor ¿no? O ¿Quieres seguir pegándome? — mis ojos se empezaron a cristalizar — Claro como es lo único que sabes hacer bien — me paré de la mesa — quiero que les quede bien claro esto, ¡Yo no soy el muñeco de nadie! ¿Entendieron?, si tu quieres ser algo o alguien que no eres y obligar al resto a hacer los mismo es cosa tuya — miré a mi padre con una mirada fría, para luego voltearme a mi madre — Y tú si vas a quedarte mirando cada vez que mi padre me levanta la mano, no te hagas llamar madre ¿bien? — con eso dicho terminé mi conversación con ellos.

Tomé mi bolso y salí hacia la escuela. Peleas como estas ya eran cotidianas en las mañanas, para todo el mundo somos un familia adinerada y perfecta, pero la realidad era otra. Es una familia opresora y que vive de la envidia, en donde el padre sólo sabe maltatrar y la madre sólo cede antes los lujos y su gran avaricia.

                                                                 11.00 AM.

La clase avanzó como de costumbre, el profesor Alejandro llegó haciendo sus bromas algo discriminatorias. Este era un profesor no muy alto, robusto, se caracterizaba por su gran calva y sus chistes que iban con el fin de soltar algún insulto.

Sonó el timbre para el recreo y como siempre mis amigos y yo nos íbamos al tercer piso de la escuela en donde había un balcón, en el cual podías apreciar todo lo que pasaba a su alrededor.

— ¡Ya estamos sólo a unas semanas para la vacaciones! — dijo Jin.

— ¡Si, será genial! Con mi familia viajaremos al Caribe, ¡será lo máximo! — dijo Elizabeth entusiasmada.

Solté una risa por la alegría de Elizabeth — Tranquila mujer, a poco te da algo.

— Esta entusiasmada por que conocerá a su amor de Internet — dijo Jimin poniendo sus manos en sus bolsillos.

— No es por eso Jimin — mostró una expresión de duda en su rostro — bueno quizás también es una razón — bajó la voz avergonzada.

— Bueno T/N — dio un pequeño paso hacia mí — ¿Harás algo en tus vacaciones? — dijo Jimin con una voz algo ronca y fijando su mirada en la mía.

Su mirada siempre era tan intensa, esos ojos castaños tenían un tono tan profundo que me perdía en ellos cada vez que me los cruzaba. Hace un tiempo me di cuenta que sentía cosas por él, por lo que cada vez que me hablaba mi corazón daba un vuelco. Mi amiga Elizabeth me contó que él también estaba interesado, aunque tengo entendido que no se lo ha dicho directamente, pero aún así era "obvio" según ella.

— Bueno no tengo nada planeado, pero no estaría mal ir a acampar y quedarme un tiempo fuera de casa — dije en un tono triste, recordando las peleas diarias que tengo en casa.

— ¡Es una buena idea! Entonces dormiremos juntos, yo tengo una carpa pequeña en casa — dijo Jimin con una sonrisa coqueta entre sus labios.

— ¡Yo me incluyo! — alzó la mano Jin entusiasmado por la idea — Oh ¿Tienes algún problema Jimin? — dijo en un tono malicioso, mientras que Jimin lo fulminaba con la mirada.

Solté otra risa a causa de la situación
— Bien lo veremos más adelante ¡Tranquilos!

Pasamos todo el recreo hablando de lo que haríamos en vacaciones hasta que sonó el timbre para regresar a clases.

En ese instante tuve un mal presentimiento, me quedé observando fijamente hacia la calle que da frente a la escuela. Tenía una sensación extraña, no podía describir tal sentimiento, era una mezcla de miedo y angustia...

| Un Mundo Con Caminantes | Jimin Y Tú | #PremiosCreatividadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora