Rainbow Factory

"Para un arcoíris poder crear

'Necesitas más que azúcar y felicidad"

A lo largo del tiempo han habido rumores de cómo, exactamente, se fabrican los arcoíris en Equestria. Pese a que hay una gran cantidad de ponis pegasos contratados para chambear en el Departamento Arcoíris de la fábrica del clima, casi todos ellos trabajan de mala gana. La capital está al tanto de las grandes corrientes de Spectra, y los colores individuales del arcoíris, fluyendo a través de las extensas grietas hacia unos vastos depósitos. A partir de ahí, los obreros surten de manera equitativa y cuidadosa el spectra en coaguladas piscinas de arcoíris que recorren la instalación y rodean toda la ciudad. Posteriormente, la mezcla es bombeada hacia la planta baja, donde otros empleados la atomizan y la guardan hasta que el Sistema Climatológico de los Pegasos despliega la sustancia en el campo.

Sin embargo, nadie sabe cómo se crea el Spectra de manera individual. Nunca se ha visto el traslado de algún tipo de suministro, lo cual permite a la imaginación inventar por su propia cuenta el posible contenido de un solo arcoíris. Los turistas, cuando visitan la Fábrica, son trasladados a regañadientes hacia una pared de metal extremadamente dura, sellada con puertas macizas y sólidas que sólo permiten la entrada de personal autorizado. Si bien la mayoría de las instalaciones están decoradas con diversos letreros y pinturas rupestres que irradian una alta sensación de conformidad a los visitantes, la planta superior de la Fábrica de Arcoíris se encuentra protegida con señales de peligro que advierten una gran cantidad de peligros potenciales y riesgos de muerte. Asimismo, las paredes de nubes no están pintadas con el hermoso color blanco del resto de la ciudad, sino de un tono negro que se asemeja a la coloración de un cielo nocturno sin estrellas.

Convertirse en un empleado de la planta superior de la Fábrica de Arcoíris significa sacrificar cualquier vida fuera de esas paredes negras. Los trabajadores juran guardar el secreto y se les prohíbe salir, así que tienen que ingeniárselas para vivir en de las instalaciones. Los pocos pegasos que han huido de ahí volvieron a ver la luz del sol estando dentro de bolsas para cadáveres, teniendo los cuerpos impregnados de productos químicos y con señales de haber perdido la cordura antes de morir. Se han propuesto muchas teorías al respecto: magia obscura de unicornios capturados, productos químicos que podrían significar una posible amenaza para la conservación del medio ambiente y la preservación de la raza poni, e incluso se ha esparcido un rumor acerca de una hermana desconocida de la Princesa Celestia siendo la creadora del Spectra.

Ninguna de estas suposiciones podría estar más lejos de la verdad.

— O —

"Pero crearlo es fácil, sólo necesitarás

'La ayuda de un dispositivo muy particular"

—¡Vamos, Orión! ¡Llegaremos tarde a nuestro examen final! —Scootaloo llamó a su amigo. Ahora se encontraba cursando su último año en la escuela de vuelo. Ella, como todos los otros pegasos del colegio, estaba muy nerviosa por el examen final. Los alumnos que pasaron la prueba fueron puestos en libertad, con la excusa de ayudarlos a conseguir sus cutie-marks si aún no lo habían hecho, y éstos se convertían en ponis de carga.

Se sabía muy poco, o al menos se hacía el intento de no pensar mucho en ello, acerca de qué sucedió con las potrancas que reprobaron el examen. Si bien no era algo muy común, uno o dos estudiantes de cada clase generalmente no tenían la capacidad que se requería para cumplir los ejercicios y realizar las rigurosas maniobras de gimnasia. Aquellos pegasos que reprobaron sus pruebas fueron despreciados de la peor manera, rechazados y odiados por la sociedad. Cloudsdale siempre se había enorgullecido por el espíritu nacionalista de sus ocupantes. Si uno no era el mejor, o no mostraba siquiera una pequeña cantidad de potencial para sobresalir, no se le permitía ser parte del "colectivo glorioso".