"-¿Qu-qué hago aquí? -Me preguntó aquel chico nuevo, con su voz temblorosa, mientras tomaba asiento frente a mi. Que yo recuerde, no lo había invitado a sentarse. Se nota que no reconoce a la gente de la cual debe estar alejado.
-¿Acaso no lo entiendes? -Respondí, arqueando mi ceja mientras alzo la mirada y mis ojos instantáneamente hacen conexión con aquel par de gemas cafés que me miraban inseguros. Suspiré, mientras acababa meterme a la boca el último bocado de esa horrorosa comida.- Vamos amigo, no es tan difícil de comprender: esto es un manicomio, ¿Qué puedes estar haciendo aquí?
-Pero... yo no estoy loco... -Contesta, notablemente asustado. Mirando ahora hacia un punto fijo detrás de mi. Supongo que hacia algún medico o enfermera.
-¿Acaso crees que yo si lo estoy? No, no. -Negué con la cabeza.- Nadie en todo este maldito hospital esta verdaderamente loco, solo los médicos. -Respondí señalando con mi cabeza a los médicos que se encontraban hablando entre si a unos metros de nosotros.
-¿Entonces por qué estamos aquí?
-Porque nos creen una amenaza. Y a las amenazas que no puedes controlar... las debes eliminar. Una por una.
- Entonces ¿Es grave ser diferente? - Inmediatamente negué con mi cabeza.
-Para ellos si, lo es y mucho. -Hice una pausa, parándome de mi asiento y apoyando mis brazos extendidos sobre la mesa, quedando a centímetros del chico, y en un susurro, volví a hablar.- Pero lo que verdaderamente es grave, es forzarse a ser igual. -Sonreí y volví a sentarme.- A los diferentes nos meten aquí, y no nos dejan salir nunca mas.
-Osea que... no...no, no, no. -Me mira en shock mientras se agarra la cabeza con sus manos, enredando los dedos en su cabello. Se dio cuenta de lo que mis anteriores palabras significaban.
-Si, lo siento, pero morirás encerrado en este maldito manicomio, como el resto de nosotros. Este es el precio que hay que pagar por pensar y actuar distinto a los demás. Así que... espero que disfrutes tu estadía en este infierno, en la cocina hay cupcakes. -Le sonreí falsamente y caminé hasta el bote de basura mas cercano para desechar esa maldita comida que tenia sobre el plato y luego atravesar el gran, vacío y descuidado pasillo, directo a mi cuarto.
-¡Ja! -Reí sin gracia mientras meto la llave en la cerradura de mi puerta.- Nuevos... -Susurré, negando con mi cabeza e ingresé a la habitación; mi maldita habitación. El día solo acababa de comenzar. Al pobre chico lo traumarían con tantas drogas y medicamentos, igual que a mi me traumaron.
Ahora mi mente solo piensa en una cosa; que es escapar del manicomio."
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Madhouse. |Liam Payne| propuesta
Fanfiction❝ Abro mis ojos y me encuentro en la misma sala con paredes blancas de siempre. Estoy aturdida, el mundo me da vueltas. Tengo los ojos inyectados de sangre. Mis manos están atadas por la camisa de fuerza; es imposible escapar de aquí. Este es un jod...