Capitulo 1

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-¡CORRE!- Gritaba mi padre desde el otro cuarto.

Me encontraba aturdida con todos los gritos y disparos, estaba encerrada en mi armario con mi rostro entre mis rodillas, con mis manos temblorosas, habían venido a secuestrarme, y a mis padres igual, siempre supe que algún día llegaría a pasar, pero no hoy.

Escuche pasos en m habitación, mis ojos empezaron a llorar, mi cuerpo empezó a temblar, tenía mucho miedo, en verdad, las puertas se abrieron, mire de reojo, era mi padre, el se tiro al suelo abrazándome, lo tome fuerte y rompí en un llanto enorme.

-Tranquila mi amor, todo estará bien-Dijo acariciando mi cabello.

-Pero papá...-Dije sollozando.

-Mírame a los ojos ____-Tomo mi rostro.

Lo mire a los ojos, el igual estaba llorando, y estaba algo golpeado, me miro fijo y supe que no sería bueno lo que me diría.

-Hija, es probable que no salga vivo de esta habitación, así que quiero que sepas que nosotros siempre te amamos, y siempre estarás bien económicamente...-Dijo llorando.

-¿De que hablas? ¡Ustedes no me pueden dejar!-Dije abrazándolo.

-Prométeme que serás fuerte, prométemelo...-Busco mi mirada.

Yo no quería prometer nada, sabía que él en pocas palabras me decía que el moriría, al igual que mi madre, tomo mi rostro, yo solo asentí ligeramente y lo volví abrazar, unos golpes horribles nos despertaron de ese abrazo.

-Hija, sal de aquí, rápido-Dijo levantándome.

-¿Y ustedes? ¿Qué pasara con ustedes?-Le dije saliendo del armario.

-Ya te dije...no te preocupes, solo sal de aquí, rápido-Me acerco a la ventana.

Sabía que quería que saliera por ahí, el volteaba con desesperación a mi puerta, que la estaban golpeando cuando la derribaron yo salí saltando de la ventana, caí contra el pasto verde de mi casa, mire a mi ventana, alcance a ver a mi padre, y me grito que corriera, empecé a correr con todas mis fuerzas, estaba lastimada, pero podía correr, mis mejillas estaban llenas de lagrimas, no sabía qué hacer, me sentía sola, completamente sola.

Necesitaba ayuda, ¿pero a quien acudir? No tengo familia acá, mis amigos viven a kilómetros, no tengo mi celular, no se a donde iré, ¿mis padres? Por más que me duele, ellos deben de estar muertos.

Fue ahí cuando ya no pude mas y caí de rodillas al cemento, pase mis manos por mi cabello, lo jalaba con desesperación, mi vida siempre había sido perfecta, desde mi familia y amigos, pero ahora es tiempo de admitir que mis padres deben de a haber muerto...

Un relámpago horrible se escucho, voltee a ver al cielo, se tornaba de un gris horrible, en unos segundos las gotas de lluvia empezaron a caer poco a poco, en un par de minutos estaba empapada, me levante y empecé a caminar por las calles de Los Ángeles, las personas corrían para refugiarse, mientras yo quería acabar con mi vida de una buena vez.

Me senté en una banca cercana a una cafetería, mire mis manos, que estaban cortadas, después de todo no fui la única lastimada, esos secuestradores si me lastimaron, cortaron mis muñecas, y me dieron algunos golpes, pero estoy con vida. Sentía que todo mi mundo está derrumbándose, y no tenía escapatoria.

-¿Qué te paso?-Una voz masculina me pregunto.

-No es nada- Dije escondiendo mis muñecas.

-Déjame ver...-Dijo frio.

-No, estoy bien-Dije limpiándome las lagrimas.

-¿Segura?-Dijo serio,

-Segura...-Suspire.

Sin escuchar mas su voz voltee a ver quién era ese chico, pero no lo encontré, regrese a mirar mis muñecas, estaban empezando a sangrar aun mas, las apreté con fuerza, mire al cielo en busca de alivio, pero solo empeoro las cosas.

Después de unos minutos me levante de esa banca y empecé a caminar.

-Espera -Dijo la voz del chico.

-¿Qué sucede?-Voltee a verlo.

Un chico con piel blanca, con algunos lunares, con lentes negros, cabello castaño claro, labios gruesos y un cuerpo deseable, se acerco a mí con un café en sus manos, quito sus lentes para dejar apreciar esos hermosos ojos café miel, tomo mi muñeca con la mano libre y hizo una mueca.

-Necesitas ver un doctor-Dijo mirandome

Never Let You Go~JustinBieber&TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora