Después de esa larga caminata pude ver una vieja cabaña, estaba mugrienta y llena de musgo, los cristales estaban empañados y rotos, alrededor de la cabaña la vegetación era extensa y una aura extraña la envolvía.
-Bueno ya hemos llegado, puede que parezca un poco vieja y sucia pero la verdad es que es bastante segura, bueno venga, segidme.
A medida que íbamos acercandonos a la cabaña más inquieto me sentía, tenía algo que no me gustaba pero no sabía el que. La madera de los escalones crujia cada paso que dábamos era como si se hundiera más.
- Venga pasad tened cuidado por donde pisais.
Smith le dio tres patadas a la puerta y la abrió despacio mientras soltaba un molesto chirrido
Cuando abrió la puerta vi una figura al final de ese largo pasillo oscuro intenté enfocar la vista pero no puede ver lo que era.
-Esperad un momento voy a encender unas velas-dijo mientras se metía dentro de la cabaña.
Empezamos a escuchar un montón de ruidos y quejidos como si se estuviera tropezando con un montón de trastos
-¿Estas bien? - pregunté mientras me asomaba dentro
De repente una luz iluminó el pasillo
Y ante mi una enorme cabeza de lo que sería un lobo gigante-¡Aaahhh! - grite mientras me caía al suelo del susto.
-¿Estas bien hijo? - preguntó mi padre mientras me ayudaba a levantarme.
-Si papá estoy bien-respondí.
-¡Que haces ahí en el suelo! Venga pasad - dijo mientras colocaba esa cabeza en la pared.
Mi padre y yo fuimos avanzado por el pasillo hasta que llegamos a una habitación, olía a humedad por todas partes, las paredes estaban desgastadas, en la habitación solo había un sofa que parecía que estaba hecho de pieles de animales muertos y una mesa de trabajo llena de papeles y libros además también había un reloj antiguo de pared y una pequeña mesa de comedor.
-Sentaos ahora vuelvo, esperad un momento.
Nos sentamos en aquel sofá y una nube de polvo nos hizo toser violentamente. Empeze a mirar a todos lados para ver si veía algo más pero no podía concentrarme debido a ese maldito ruido que hacía el reloj, estaba dentro de mi cabeza, me ponía nervioso. Entonces llegó Smith con lo que parecía un tarro lleno de cosas negras y viscosas.
-¿Quereis un poco?-pregunto amablemente.
-No gracias - respondí con cara de asco mientras apartaba el tarro
-Mejor, más para mi- y se metió una de esas cosas en la boca, casi me entraron ganas de vomitar.
- Perdone señor... digo Smith que es lo que quería contarnos es que ya se esta haciendo muy tarde - dijo preocupado mi padre.
-¡Es verdad! Casi se me olvida- se fue rápido a la mesa llena de papeles y se puso a buscar algo.
-¡Aqui está! Vino hacia nosotros y fuertemente coloco un foto borrosa encima de la mesa.
Sólo con ver esa imagen, pese a que estaba borrosa, mi mente se quedó paralizada, no habia solo un monstruo ¡si no varios!
Pero como era eso posible y como tenia esa foto pensaba que mi padre y yo eramos los únicos que vimos a unas de esas bestias.-Se que la imagen no está muy clara pero ¿se parecen a la bestia de vuestra descripción?
-Si-i-i si - dije con la voz temblorosa y entrecortada
-Mierda lo sabía esto se esta poniendo feo, y cada vez hay más debo hacer algo y rápido.
-¿¿¡¡Que pasa señor??!! - pregunte atacado
-¡Están cerca, todo el pueblo corre peligro!
-¿Pero quienes están cerca?
-Las bestias nos observan.
........
De repente una fuerte corriente de viento entró en la habitación y las velas se apagaron, la oscuridad inundó la habitación y un fuerte crujido se oyó a fuera...
Corriamos peligro.
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El Bosque De Los Males
Mistério / SuspenseEra un domingo cualquiera de 1843, ese día fue cuando empezo todo. Jackson Hawkins es un joven de 16 que tendrá que descubrir poco a poco que misterios se esconden en el pueblo de Damnedwood