Un amor prohibido (One Shoot-Donaldwise)

Un amor prohibido

Era una tarde aburrida en la casa blanca, como cualquier otra, así que decidí volver a ver mi película favorita, "It".

Mi familia me dijo en repetidas ocasiones que tenía una obsesión con esa película, pero yo no lo veía así. Llevar el gobierno de Estados Unidos era muy aburrido, y al ver a Pennywise olvidaba lo patética que era mi vida, me transportaba a un mundo de fantasía irreal donde era feliz con mi payasito favorito.
Tras acabar la peli, fui a echar un ojo a las cuentas de fans de Pennywise y encontré un fanfic llamado "Peniguais y tú", de una autora española llamada karma_j. A pesar de ser una parodia y tener millones de faltas de ortografía, el argumento me cautivó y estuve toda la semana soñando con Pennywise y sus hijos dándome "amor". Hasta que llegó un día en el que esos sueños se sentían demasiado reales.

Acudí al psicólogo, y me dijo lo mismo que mi familia, que estaba obsesionado. No podía tolerar que la gente me tomase por loco, mis sentimientos por Pennywise eran reales, había días en los que no podía ni concentrarme en hacer mi trabajo como presidente, y ahí fue cuando le pedí ayuda a mi exnovio, Obama. Le pedí que volviese a presidir en mi lugar, y él aceptó de inmediato.

Me mudé a mi humilde mansión de 6 plantas en la playa con mis 24 lamborghinis, ferraris y bugattis. Pero a mi mujer la dejé, y a mis hijos también. Solo podía pensar en Pennywise, en cómo sería nuestra vida juntos...Despertarme junto a él, bajar a hacerle el desayuno y decirle "Penny, cariño, el desayuno está listo. He hecho tu favorito, piernas de bebé bañadas en sangre de adolescente". Entonces el bajaría con su enorme y bastante dentada sonrisa, me daría un besito en la frente y se sentaría a devorar la comida que le preparé con todo mi corazón. Luego iríamos a la playa juntos, de la mano, con las olas mojando nuestros pies mientras admiramos la belleza del amanecer. Y el diría "Mira Donny, el Sol está tan naranja como tú, pero no llega a ser tan bonito". Yo le besaría, él me devolvería el beso con sus labios llenos de babas, y años más tarde, después de casarnos, tendríamos un hijo...

Tras imaginar todo aquello, volvía a la realidad, y lo pasaba muy mal, lloraba y me secaba las lágrimas con billetes de 100, porque mi vida era muy dura sin tener a mi payasito a mi lado... Todo el día llorando en el jacuzzi, en el Ferrari, en mi apartamento de Dubái... Que difícil era mi vida...

Decidí plasmar estos pensamientos en una historia, y subirla a una plataforma llamada Wattpad (donde leí los maravillosos fanfics de karma_j).

Mis fanfics recibieron mucha aceptación, se volvieron famosos en wattpad y salieron hasta en las noticias, a pesar de que los escribí con un perfil falso.

Un día (el mejor día de mi vida) estaba revisando los e-mails de mis fans cuando encontré uno que llamó mi atención. El mismísimo Pennywise me había escrito. Al principio no sabía qué hacer, ¿y si era fake? ¿Un impostor o algo por el estilo? Investigué y resultó ser él, el amor de mi vida. Le invité a mi humilde mansión, y ahí comenzó nuestra historia de amor.

Escuché el timbre, y corrí lleno de emoción esperando que la persona que se encontrase tras la puerta fuese mi amado Penny.

Abrí. Ahí estaba él, babeando (seguramente por verme) y sonriendo, y solo quería saborear esa saliva que corría desde sus labios hasta su barbilla.

Intenté no excitarme mucho, lo cual me costó bastante, pero no podía evitar relamerme los labios cada vez que el payaso hacía algún gesto provocador (como por ejemplo: existir).

Se hizo tarde y oscureció, así que le invité a pasar la noche. Él aceptó sin pensárselo dos veces, cosa que me llegó al corazón. Le dejé elegir la habitación en la que dormiría, no quería precipitarme a dormir con él tan rápido. Pero en mitad de la noche, noté algo viscoso y húmedo en mi dedo gordo de pie izquierdo. Me desperté sobresaltado y pude ver entre la oscuridad a Pennywise arrodillado junto a la cama lamiéndome el dedo.

-¿Te he asustado?- preguntó mientras se alejaba de mi pie.
-No, no. En absoluto. Continua, por favor. He de admitir que me hacías cosquillas, jeje.

El payaso continuó lo que ya había empezado, pero empezó a clavar sus dientes en mi dedo. Dolía, pero me gustaba.

-¡Más fuerte, Penny!- grité mientras él hincaba más sus colmillos- ¡Ahh, Penny, arráncame el dedo!

Él era obediente, hizo todo lo que le ordené. Me arrancó el dedo y succionó la sangre que brotaba de éste.

-Penny, duérmete a mi lado, por favor.- le susurré haciendo un puchero.

Él sonrió de oreja a oreja, literalmente, y volvió a obedecer. Más tarde volví a notar su lengua, pero esta vez en el interior de mi oreja. Era extrañamente satisfactorio, no quería que acabase nunca. Era un sueño hecho realidad.

-Pennywise, chúpame el firulais- canturreé mientras lamía mi oreja.
-Firu...¿lais?- preguntó algo confuso.
-El pene, hostia, el pene.

La expresión de Pennywise me confudía, ¿tal vez no sabía qué es un pene?

-Penny, tú...¿tienes pene?
-...- miró todo su cuerpo intentando deducir qué es un pene- No sé...- tartamudeó mientras se encogía de hombros.

Procedí a bajarme los pantalones para enseñarle qué era un pene, pero en menos de un segundo me lo arrancó y se lo tragó.

-Mi...Mi pene...

Pennywise se disculpó repetidas veces, asegurando que lo confundió con un cacahuete (donde vive él los cacahuetes deben ser grandes), le perdoné, y nos casamos. Le contrataron como modelo de calzoncillos de Calvin Klein y nos seguimos amando a pesar de no tener pene.

Actualmente llevamos 7 años casados y hemos tenido 3 hijos, los cuales han crecido muy rápido y se han casado con nosotros también. Nuestra familia es muy abierta de mente, no creemos que el incesto o la poligamia sean un problema siempre y cuando te hagan felices.

No me quedan dedos de los pies, Penny y nuestros hijos se los han comido todos, pero nuestra familia se basa en compartir, y eso incluye las partes del cuerpo :3