C I N C U E N T A Y C U A T R O

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Christopher.

La fuerte luz que se escabullia por la ventana causaba molestia en mi rostro.
Mis parpados se despegaron poco a poco mientras mis ojos se cegaban ante la potencia de dicha luz. Apenas pude aclarar mi vista note que a mi lado no había nadie, Emma no estaba.

Mi pulsación se acelero, los nervios se me pusieron de punta y mi corazon dio un vuelco. Me altere. Hoy era su cumpleaños, temia que, quiza, ya hubiese echo lo que me confeso ayer. De solo pensarlo un nudo imposible de tragar se formaba en mi garganta.

Me levante con desespero de la cama, fijando mis pensamientos de salir del cuarto. Pero cuando estaba a punto de abrir la dichosa puerta que me impedía la salida, note que estaba desnudo y obviamente no podría salir así. Busque mi ropa rapidamente, me la coloque y salí de la habitación. Mi respiración estaba agitada y mi corazón seguía latiendo frenéticamente.  

Baje las escaleras lo mas rápido que pude, saltando los dos últimos escalones. Llegue a la sala y me encontré con mi madre, el padre de Emma y Joel. Un susto horrible azotó mi cuerpo al no ver a Emma.

De mis labios se iban a escapar las palabras para preguntar si habían visto a Emma pero no fue asi, ya que la vi llegar de la cocina a la mesa con un jarrón de jugo y una sonrisa radiante en el rostro. Se veía muy hermosa, mas que antes, nunca le había prestado atención a la perfecta sonrisa que tiene y como sus ojos brillan cuando la muestra. Emma es realmente preociosa.

Me quede paralizado al verla, mis ojos solo se centraron en ella.

Yenny-¡Hijo!,.. ¡Al fin despiertas!- espetó mi madre sonriendo.

Yo aun seguía observando a Emma, como si hubiese visto un fantasma.

Yenny-Christopher,.. ¿estas bien?- las palabras de mi madre entraron por mis orejas y salieron como si nada, pues mi atencion estaba en Emma que ahora ya se habia sentado en la silla, junto a Joel.

Chris-¿Q-Que?- tratamudeé.

Yenny-¿Te sientes bien?-

Emma me observaba a los ojos, mientras bebía un sorbo de su jugo. En su rostro se revelaba una expresión relajada y una sonrisa simple mientras que yo seguía estupefacto con su presencia ahi. En el fondo mi corazon y alma brincaban por saber que aun tenia oportunidad de salvarla..porque eso haría, definitivamente, no la dejaría ir, jamas.

Chris-S-Si- volví a tartamudear.

Joel-¡Por fin despiertas! ¡Son las 12:30 del dia!-

Logre desviar mi mirada hacia mi hermano que era quien me hablaba.

Chris-Ire a tomar una ducha y bajare- avisé.

Gire sobre mis talones y subi por las escaleras nuevamente. Tome la ducha, cambie mi ropa y volvi a bajar.

Joel se encontraba en el sillón enfocado en su celular, nuestros padres no estaban y yo solo queria hayar a Emma. Fui a la cocina, di un brinco alegre y coloque una sonrisa en mis labios al ver que ella se encontraba ahi, lavando los trastes.

Me pare a unos pocos centímetros, no sabia que hacer o decirle, la timidez me ataco. Luego de unos segundos ella termino de lavar, seco sus manos y, tomándome de sorpresa, se volteo hacia mi.  

Emma-No lo hare ahora, no te preocupes- dijo con una sonrisa inocente.

Coloque una expresión neutra en mi cara, pues por un lado, el echo que de que no intente nada por ahora me daba algo de esperanza pero por otro me estaba afirmando que lo hara mas tarde.

Chris-¡Ya tienes dieciocho!- espeté, abrazando su cintura por detras.

Emma-Dieciocho..!- remarco, girandose hacia mi, colocando una sonrisa sobre sus apetecibles labios..Que de inmediato hizo bombear mi corazón.

Mis Hermanastros 『C.V || J.P』[Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora