Capítulo 2.

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Aquella noche, Harry no había podido dormir. Seguía aún acariciando sus labios y, aunque sólo hubiese sido por unos pocos segundos, sentía la presión de los finos labios de Louis sobre los suyos. 

Por otro lado, Louis tampoco durmió, pero su situación era distinta. Se movía sobre un chico moreno, dejando que sus penetraciones fuesen más duras y rápidas. Gruñía y gemía ansioso, casi con rabia. Se dejó caer al lado del chico moreno una vez había llegado a su límite, respirando aún de forma entrecortada.

-¿Qué te ha pasado hoy? –Murmuró el moreno, también con la respiración algo agitada.

-Nada. –Dijo y se giró, dándole la espalda.- Ya puedes irte, Zayn.

-No seas ridículo. Me mandas un mensaje a las tres de la mañana para que venga urgente y me presento aquí preocupado, me tiras en tu cama y follamos como si nada. Hasta ahí todo bien, pero no niegues que te ocurre algo. –Gruñó el moreno, alzándose un poco sobre el cuerpo de Louis. Éste suspiró y le dio un manotazo para que se apartase, cerrando sus ojos.

-Sólo quería sexo, ya vete.

Zayn suspiró y se apartó. Podría decirse que era el mejor amigo de Louis, al menos por su parte era así, y sabía que cuando éste se cerraba a todo, lo hacía de verdad. Se levantó y comenzó a vestirse, yéndose casi al momento, dejando a Louis solo en la habitación con una mueca de preocupación en su rostro.

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-¡Buenos días! –Gritó Niall con emoción al ver a Harry aparecer por la puerta de clase. El rizado nunca entendería de donde sacaba tanta energía por la mañana. Se dejó caer en su asiento y escondió su rostro entre sus brazos, echándose sobre la mesa.

-Ahórratelos, Niall. No he dormido nada…

-¿Por qué no? –Dijo mientras se sentaba a su lado.- ¿Es por Louis?

Harry alzó su rostro, mirando a Niall con algo de pánico. Era imposible que supiese sobre el beso. No podía saberlo. -¿Qué? ¿Por qué iba a ser por L-Louis…?

-Bueno, ya sabes, por lo de la discusión de ayer. –Suspiró aliviado y el rubio le miró confuso.- ¿Ha pasado algo más?

-¡No! –Se apresuró a contestar. Niall arrugó su frente, abriendo sus labios para decir algo más, pero tuvo que guardarse las palabras ya que el profesor acababa de entrar. Harry sabía que Niall iba a volver a preguntarle por esto, pero agradecía que no hubiese sido en ese momento.

Cuando acabó la clase, se apresuró a salir antes que Niall, excusándose en tener que comprar unas fotocopias para la siguiente hora. Llegó hasta su taquilla, abriéndola y guardando en ésta lo que no iba a necesitar más.

-Siempre estás en mi camino, Styles. –Harry se quedó quieto. Sabía de quién era esa voz y temía girarse. No sabía como reaccionar al verle, tampoco lo había pensado. “Mierda Harry, por qué no pensaste antes qué harías al verle. Sabías de sobra que ibas a encontrarte con él.” Maldijo en su mente, girándose cuando escuchó a Louis carraspear impaciente.

-Estoy en mi taquilla. –Murmuró Harry, clavando la mirada en el suelo. Louis reprimió una carcajada, agachándose un poco para entrar en el punto de vista del rizado.

-La mía está debajo.

Se giró para mirar las taquillas. Claramente la puerta de la de abajo estaba decorada con dibujos y pegatinas raras, pero nunca lo habría imaginado. Nunca se había encontrado con él antes.

-¿Estás de broma?

-No. La cosa es que normalmente no suelo hacer nada en las clases, así que no necesito acercarme a las taquillas. Pero hoy me… Apeteció.

-Te apeteció… Igual que besar… -Pero antes de que terminase de decirlo, Louis agarró su camiseta y tiró con brusquedad de él, arrugando su frente.

-Sí, igual que besarte. Y lo haré cuanto quiera, cuando quiera, dónde quiera, ¿entiendes? –Murmuró en voz baja, apretando su agarre en la camisera del rizado. Harry frunció el ceño, empujándole para apartarle de él, cerrando de un golpe su taquilla.

-¿Estás loco? Obvio que sí, debes estarlo para pensar así. –Soltó una carcajada completamente irónica, alzando la voz por la rabia.- Tú me odias, te doy asco y te desagrado, ¿por qué ibas a hacer eso? ¿Por qué mierda iba a dejarte que lo hagas? ¡Por supuesto que no!

Louis soltó una carcajada al ver cómo el rostro de Harry se había vuelto rojo de rabia, disfrutando de tener ahora toda la atención de los que estaban por ahí. Se habían amontonado al ver la escena y eso era justo lo que Louis quería.

-Veamos cómo eres realmente, Styles.- Se acercó de nuevo a Harry, agarrando sus muñecas y presionó sus labios en un brusco beso, pues el rizado se negaba a seguirlo.  A su alrededor todos exclamaron gritos de sorpresa y a gritar cosas como “¿Harry es maricón?” “¡Lo sabía, algo malo tenía oculto!” “¡Son unos jodidos maricones!”.

Harry cerró sus ojos al sentir cómo se humedecían, empujando a Louis para romper el beso. Louis se quedó quieto, mirando al rizado, esperando ver cómo este explotaba ante todos y mostraba su verdadera forma de ser, pero en cambio Harry soltó una carcajada. No era una para nada feliz, ni mucho menos divertida. Era un ronco y amargo sonido que le hizo quedarse sin palabras.

-Está claro que tú ya has demostrado cómo eres en verdad.- Se alejó sin hacer caso de los continuos insultos, simulando que no le importaba nada, incluso sonreía. Pero era una sonrisa forzada y apagada.

¿Qué acababa de hacer? ¿Por qué había actuado de aquella forma? No quería joderle, realmente. No quería volver a acercarse a él después de haberle besado, sin embargo ahí estaba. Parado viendo como Harry se alejaba claramente dolido. Dolido por su culpa. Porque un imbécil al que no conocía de nada ayer, que le había besado porque sí y lo había vuelto a hacer frente a todos cuando él mismo le había contado que actuaba de forma diferente. No conocía los motivos por lo que hacía eso, y sin embargo él había actuado así. ¿Realmente no quería joderle? Si hasta ayer le despreciaba.

-Así que esto era lo que te pasaba ayer.

Louis se giró, viendo como Zayn le miraba atento y de brazos cruzados. El resto había desaparecido casi al instante de que éste apareciese. Casi todos le temían. ¿El motivo? Muchas drogas y peleas te hacen volver un chico malo, como algunas chicas le llamaban.

-Cállate. –Contestó molesto el chico de ojos azules, suspirando. –Larguémonos de aquí.

-Como quieras. –Ambos se volvieron para dirigirse hacia la salida del instituto, aunque Louis no pudo evitar lanzar una última mirada al lugar donde Harry se había ido.

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-¡¿Hizo qué?! ¡¿Quién es ese?! –Liam gritó histérico cuando Harry les contó lo sucedido. Niall y él habían ido una cafetería aquella tarde, ya que ahí es donde trabajaba su otro mejor amigo, Liam Payne.

-No importa quién sea. –Suspiró Harry.- La cuestión es que lo ha jodido todo. No quiero volver allí.

 -Vamos, Harry… Míralo por el lado positivo.

-¡¿Qué lado positivo?! Ahora todos me llaman maricón y ugh… No sé a qué juega ese Tomlinson, pero yo no soy un juguete.

Liam y Niall se miraron y suspiraron, dejando que Harry se desahogase tranquilo. Finalmente Niall y Harry tuvieron que dejar a Liam seguir con su trabajo. Había conseguido desahogarse un poco, pero seguía con una horrible sensación.

 -Estaré a tu lado, ¿vale? No van a decirte nada, sigues teniendo superioridad ante ellos. –Dijo el rubio. Harry sonrió de lado, asintiendo ante lo que su amigo le había dicho. Mordió su labio inferior y suspiró, tratando de pensar en que quizás estaría bien no tener la atención de todos ahora. 

(PAUSADA) Las apariencias engañan. (Larry Stylinson / Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora