Único capítulo

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Día 1.

Todo acabó. Fumé un poco de marihuana encerrada en mi habitación, como era de esperarse, primero eran las risas, seguido pasó por mi cabeza la mejor forma de matarme... No importaba cuantas veces respirara, no entraba oxígeno a mis pulmones, traté de tranquilizarme, y dejé la marihuana a un lado.

Día 2.

Hoy se cumplen dos semanas desde que solo hago una o dos comidas al día, en ocasiones, solo comida ligera, mi cuerpo no aguanta ni siquiera la segunda comida y se rehúsa a comer hasta el día siguiente en la tarde.

Día 3.

Nunca me había sentido tan sola, hoy son tres semanas las que paso encerrada en mi habitación, y nadie lo ha notado.
No le tengo miedo a la soledad, es incómoda.

Día 4.

Sigo encerrada en la habitación, veo parejas, veo familias y veo amigos pasar a través de mi ventana, es increíble como en un momento toda mi vida se fue a la mierda.

Día 5.

Ha pasado un mes, me voy del país, los planes que teníamos para antes de este día se fueron a la basura, mi familia viene a despedirme, y él, no está, subo al avión, empieza a despegar, me aterran los viajes en avión, pero jamás pude hablarlo, así que entierro las uñas en el asiento y cierro los ojos para no ver por la ventana como se eleva el avión.
Una vez en el aire, empiezo a sentir lo que creo que son... ¿Turbulencias? Miro a la ventana y veo que los motores del ala están en llamas, se me sale una lágrima de tristeza, entierro las uñas en el asiento, ya que el alá se desprende del avión, arrancando así mi ventana, lloro, no por el momento, sino porque nunca más volveré a ver el rostro que amo.
Mi asiento es arrancado por la presión, disfruto una última vista al avión, personas llorando, rezando, asustadas... Es algo que probablemente le gustaría pintar a él.
Veo el paisaje que me espera mientras caigo.
Cierro los ojos, y solo pienso, que al fin se pondrá fin al dolor, que mi vida se fue a la mierda y este es el último escalón de días horribles, que pondrán fin a mi vida.
Hubiera deseado más días con él, una mejor vida, una familia que no se deshiciera, un último beso, una última caricia, un último te amo, una vida en la que las cosas no se deshicieran tan fácilmente.

H, te amo.

Sentí mi última respiración y mi última lágrima.

Todo estaba obscuro y así se quedaría para siempre.

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⏰ Última actualización: Sep 10, 2018 ⏰

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