—Me estas mirando.
—No te estoy mirando.
— ¿Mh? ¿Enserio? — Cuestionó Charasuke no muy convencido acercando un poco más su rostro. El sonrojo tenue en sus mejillas blancas producto del alcohol le provocaba un cosquilleo incómodo en el estómago— A mí se me hace que me estás mirando, Menma.
El nombrado chasqueó la lengua. El vaso de cerveza sobre su mano nunca había sido tan interesante como en esos momentos.
—Hey, no te hagas. Sé que lo has estado haciendo todo este tiempo —Insistió el moreno arrebatándole el vaso para darle un sorbo—Y quiero saber porqué.
La música sonando a todo volumen impidiendo que se filtraran las conversaciones, las chicas semidesnudas sobre el escenario llamando la atención de todos los comensales y la luz baja dificultando la visión. Todo parecía incitarlo a perder el control esa noche.
—Menma... —Ah, esa voz masculina y atractiva— ¿Acaso estas escondiendo algo que no quieres que sepa?
"Si, es así" Respondió mentalmente a esa pregunta. Sus ojos ahora estaban sobre el bonito rostro de Charasuke admirando cada detalle de este. La espuma sobre labios delgados del moreno que se habían fruncido en un mohín disgustado era una prueba difícil de superar para él.
—Estas borracho —Le hizo notar Menma intentando desviar la mirada hacia otro lugar que no fuera su atractivo amigo pero las repentinas manos de este sobre su rostro arruinaron sus planes.
—Tienes razón —Dijo Charasuke sonriendo. Ese simple gesto generó un salto en su ritmo cardíaco— Pero ¿Acaso no dicen que los borrachos siempre dicen la verdad? O algo así me pareció escuchar...
—También dicen idioteces.
Charasuke pareció pensársela— Puede que tengas razón.
Menma creyó que estaba a salvo momentáneamente, pero Charasuke era un experto en arruinar su tranquilidad. No esperó que este apoyara la cabeza en su hombro adormilado. Instintivamente levantó la mano para remover con su pulgar la espuma de la cerveza sobre los labios de Charasuke que desde hace un rato le estaba fastidiando su auto control.
Joder, esos labios se sentían tan suaves al tacto.
Escuchó a Charasuke soltar una risita.
—Parece que sí tenia algo en la cara —Comentó este divertido antes de voltear a verlo de frente sin salir de la cómoda posición que había encontrado.
Estaban tan cerca el uno del otro que sus respiraciones chocaban mezclándose con el aliento a alcohol que ambos desprendían.
No podía contra eso.
Menma tenía un secreto, uno impactante que cada día le resultaba más difícil de esconder.
Sus labios acariciando los de su amigo al no ser capaz de mantener su auto control intacto eran un spoiler.
Por suerte, Charasuke estaba demasiado borracho para descubrirlo en ese instante.
Pero era cuestión de tiempo para que lo hiciera. Un día cualquiera en que su auto control decidiera jugarle una mala pasada frente a Charasuke con todos sus sentidos intactos.
—Tus labios se sienten bien —Gimoteó Charasuke al separarse soltando una risita divertida — Tan bien que me hace sentir mareado.
—No vayas a vomitar en el suelo.
El Uchiha le soltó un golpe algo torpe en el brazo — Que no es eso... —Aseguró volviendo a acomodarse en su hombro, sus párpados parecían pesarle— Es distinto.
