Noches de Luna Llena

NLL: Capítulo 8

Pareja: UsUk, LoboUsxUk, AlfredxArthur

Disclaimer: Los personajes son de Himaruya y espero que algún día me conceda un contrato para así no tener que secuestrar a sus personajes XD

Advertencia: Sí, Alfred narrando esta historia XDD

Notas de inicio:

Este capítulo debía ser uno desde el inicio así que acá lo pondré como uno solo~

No sé si necesité aclarar más cosas, espero que no XDD

One, Two, Three ¡Go!

~*~Noches de Luna Llena ~*~

"Cuando el final de la vida no significa la muerte"

Siempre me considere una persona normal, tan normal como se puede ser a los 11 años, estaba en la escuela como cualquier otro de mi edad, le temía a los fantasmas del bosque, me acostaba tarde jugando videojuegos y los fines de semana salía al cine o algún otro lado con mis padres.

Ya se acercaba el verano y con él las vacaciones, y como yo era total y completamente normal, aquello me emocionaba bastante.

Esos meses eran mis favoritos, no porque estuviera cada vez más cerca mi cumpleaños, no, te lo juro, no era por eso... Bueno, está bien, me atrapaste, sí, en parte era por eso y porque mis padres siempre hacían algo especial para esas fechas.

Las vacaciones en familia se convertían también en una fiesta de cumpleaños que duraba por lo menos dos semanas, y cada sitio para vacacionar era mejor que el anterior.

—¿Alfred, ya pensaste a dónde quieres que vayamos de vacaciones esta vez?— Y ahí estaba la pregunta que más me gustaba escuchar en todo el año.

—¡Sí! Quiero acampar~—

Mi madre ya se lo esperaba, llevaba diciéndolo cerca de tres o cuatro meses, su sonrisa llena de paciencia me lo dijo todo, estaba decidido entonces, ese año acamparíamos.

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El primer día de campamento fue una cosa terrible, los mosquitos no dejaban de picarme, mis tenis favoritos estaban llenos de lodo y tenía ramitas y hojas por todos lados, aquello jamás me lo habría esperado, pero por la noche todo se arregló, o más bien se volvieron detalles insignificantes.

Dormir bajo el cielo nocturno era una experiencia maravillosa, ahí a mitad del bosque no había luces que opacaran el brillo natural del cielo, incluso se veían más estrellas de lo normal, era difícil olvidar ese panorama tan bello, yo no lo hice, fue el mejor regalo por mi cumpleaños número 12.

Después de aquellas vacaciones seguí haciendo excursiones al bosque, al principio lo disfrace con un interés genuino por las astrología, pero después de un tiempo me rendí y decidí que solo se trataba de que el bosque era más como un segundo hogar para mí.

Me gustaba observar a los insectos que poblaban las ramas o las piedras, saltaba de emoción cada vez que lograba encontrarme con conejos o venados, a veces iba con amigos, a veces iba solo.

Mis padres me habían prohibido entrar solo al bosque y sobre todo de noche, pero aquella no era en la primera cosa en la que los desobedecía, había encontrado un truco para evitar que mis zapatos se llenaran de lodo y me delataran, además, mi mejor amigo siempre me cubría diciendo que iba a pasar la noche en su casa y así pase cerca de 4 meses escabulléndome al bosque cuando podía, durmiendo bajo todas las brillantes constelaciones de estrellas.