Sola por siempre - Puppet x Tu - Fnafhs. [EDITANDO]

Capítulo 14.

Al despertar me enteré de que Puppet ya no estaba en la cama, ni en la habitación. Preguntándome a dónde había podido ir, me levanté yo también pero di un brinco al sentir el piso helado. Para colmo andaba descalza. 

Luego de salir de la habitación me dirigí a la cocina pero antes de llegar ya sentía el aroma a desayuno. Huevos, panqueques, tocino, lo típico y justamente provenía de la cocina así que sigilosamente me asomé para encontrarme con el albino cocinando. Se me hizo muy extraño que el cocinara, nunca había visto a un chico cocinar. 

Pasé de largo por la cocina dándole la espalda para tomar agua. 

Puppet: ¿Cómo amaneció, señorita? - Lo escuché preguntar a lo que me volteé hacia él. 

____: Pues, ni siquiera estoy segura de si me acompañaste. Desperté y no estabas. 

Puppet: Acabo de llegar a la cocina y créeme que si lo hice... - Comenzó a narrarme sucesos de la noche que había pasado.

/Flash back/

Mientras dormías yo aún no consolaba el sueño... Andaba por las nubes pensando pero no pude evitar quedarme mirándote. Entonces tuve ganas de bajar a beber agua pero en el momento en el que me moví sólo un poco me tomaste del brazo con el que te estaba abrazando... Digo, asegurando y no me soltaste más. 

/Fin del falsh back/

Mientras narraba mi vergüenza se acumulaba en mis mejillas como un rojo carmesí. 

____: ¡Lo siento, lo siento, lo siento! - No pude evitar disculparme apenada volviendo a actuar como la vulnerable joven en la que me había convertido. 

Puppet: No te reconozco. - Comentó carcajeándose de forma agradable pero sus palabras se habían clavado en mi pecho. 

Estaba segura de que la que era entonces no era la yo de antes y tan sólo pensar en el largo camino que faltaba para volver a encontrarme con ella se me hacía frustrante.

____: Ya lo sé - Murmuré algo decepcionada y me retiré de la cocina. 

Caminé hasta mi habitación pero aquella habitación seguía haciéndome sentir un extraño malestar así que me retiré a la habitación de Puppet. 

____: ¿Puedo utilizar tu baño albino? - Le pregunté desde arriba. 

Puppet: ¿Cómo me llamaste? - Al no obtener respuesta le hizo pasar por alto. - De acuerdo. 

Luego de agradecerle me dispuse a ducharme. Tras terminar me percaté de que mi ropa continuaba en la maleta que se encontraba en mi habitación, así que me dirigí a la puerta para salir a buscar mi maleta, pero en el momento de abrirla escuché que me llamaban desde el otro lado, lamentablemente ya era tarde y por alguna razón maliciosa del destino resbalé gracias a mis pies mojados sobre Puppet. 

____: ¡No veas! - Rogué avergonzada a lo que él desvió su mirada rápidamente. 

¡Maldición, mi toalla! Me dije desde mis adentros al no saber dónde carajos había caído la toalla. Para el colmo ponerme de pie se me era casi imposible con lo empapada que estaba y lo resbaloso del piso. 

____: ¡Marionette! - Sólo se me ocurrió llamarla. 

Puppet: ¿Aún no te das cuenta que no hay nadie más que tú y yo en casa? - Me preguntó volviendo sus ojos a los míos. 

____: Te dije que no me mirarás. - Le recordé avergonzada a lo que él regresó su mirada al unisono. 

Puppet: Debo volver a admitir que tus pechos son perfectos - Me comentó con un leve rubor y una sonrisa traviesa asomándose por sus labios. 

Miré hacia mis pechos apresiándolos. Tenían un gran espacio entre ellos y no era que tuviese mucho busto tampoco. 

____: ¿Qué quieres de..., cir? - Me pausé cuando por delante de mis ojos comenzaron a pasar rápidamente imágenes como recuerdos. Por un momento vi al albino en mis recuerdos sobre mí pronunciando las mismas palabras. 

Puppet: Son perfectos. 

Yo aún no me lograba incorporar pero en esos instantes todo dejó de importar. 

____: ¿Tú... Los has visto antes, cierto? - Le pregunté teniéndolo casi por seguro cuando lo vi asentir. 

Puppet: ¿Cómo lo sabes? - Me encogí de hombros y logré ponerme de pie mientras él no miraba. 

____: Lo supuse. - Contesté algo seria colocándome la toalla para luego ayudarlo a levantarse.

Puppet: Sólo quería avisarte que el desayuno está listo. - Me informó intentando mantener una sonrisa serena a lo que le di la espalda y suspiré. 

____: Bajo en un momento - Le dije de forma amable dirigiéndome a mi habitación. 

Luego de cambiarme me tome unas cuantas pastillas que en Londres mi doctor me había indicado para cuando llegasen los recuerdos y dolores de cabeza. Desconocía su fin pero me calmaban y por eso las tomaba. 

Después bajé a desayunar en un plácido silencio con Puppet pero en medio del sueño comencé a sentirme cada vez más y más cansada. 

Puppet: ¿Te sucede algo linda? - En ese momento yo ya me encontraba en un punto del limbo y la inconsciencia muy profundo, no distinguía bien las formas y mis labios hablaban por sí solos. 

____: No me llames así albino... Ni siquiera te conozco... - Dije aquello entre tartamudeos cuando sentí mi cuerpo pesar demasiado. - Atrápame - Fue lo último que dije antes de que mi vista se nublara por completo. 

...

Abrí mis parpados lentamente vislumbrando una figura masculina vestida de bata blanca mientras parecía tomarme la presión. Entendí que se trataba de un doctor al instante. 

Aquel hombre comenzó a explicarle en términos profesionales que yo no entendía hasta que se dio a la tarea de decirlo en palabras que yo pudiese comprender. 

Doctor: Estos adormecedores impiden la recuperación de su memoria a largo plazo. Si las sigue tomando no logrará recordar. 

Cerré mis ojos nuevamente, sabía que si quedaba despierta por más tiempo las dudas me inundarían y yo sólo necesitaba paz en aquel momento. 

Aunque no pude evitar pensar... ¿Por qué?