Pov Bill
Al ver que mi amado Pino no me respondía, me dispuse a levantarme con pereza del sofá y caminar hasta la puerta de nuestra habitación, Toco la puerta. No hay respuesta. Otra vez. Nadie responde, empiezo a preocuparme y vuelvo a tocar.
-¡Déjame!.- Escucho a Pino gritarme desde el otro lado de la puerta.
-Pinetree, abreme por favor, ya dije que lo sentía.- Le respondí tratando de convencerlo para que me abriera.
Escucho como quita el seguro de puerta y se dirige hacia la cama con pasos apurados.
Abro la puerta y me encuentro con mi Pinetree tapado hasta las mejillas y mirándome con enojo. Tan lindo.-¿Que quieres?.- Lo escuche decir con un toque de enojo e irritacion en su voz.
Me acerco hasta él, sentandome en el borde de la cama, acariciando su hermosa cara la cual me enamora cada día.
-Perdóname bebé, no lo volveré a hacer.- No esperé a que contestara, me acerqué para unir nuestros labios en un tierno beso, el cual él correspondió casi inmediatamente.
Me coloque sobre él sin dejar caer mi cuerpo encima del suyo, pasé mi lengua por su labio inferior pidiendo permiso para introducir mi lengua en su boca, a lo cual él me respondió habriendo levemente la suya dejándome el camino libre.
Nuestras lenguas luchaban por tener el control del beso, siendo yo el ganador de esa pequeña batalla. Nos separamos por falta de aire, y al hacerlo pude visualizar un hilo de saliva que nos conectaba.
Lo volví a besar, pero esta vez el beso era más salvaje y húmedo. Comencé a bajar mis besos desde su mentón hasta detenerme en su cuello en donde sin pensarlo dos veces deje una marca logrando que mi Pinetree soltara un leve gemido exitandome más.
-Mmgh... Bill...- Gimio en mi oído provocando que mi miembro despertara cada vez más, no pare de repartir besos, bajando de su cuello a su hombro lamiendo y dejando marcas en el camino.
Quité lentamente su chaleco que empezaba a incomodar al igual que su camisa, hice un recorrido con mi mano de su cintura a uno de sus pezones, empezando a estimularlo hasta dejarlo rojo mientras mi Pino no dejaba de gemir.
-Ngh... B-bill... D-duele... Mmgh.- Entendí rápidamente a lo que se refería, ya que mi miembro también dolía en busca de atención.
Di vuelta a mi pequeño con suma delicadeza dejándolo en cuatro. Me decise de mi camiza, lansandola por algún lado de la habitación.
-Bebé, voy a prepararte, ¿recuerdas la palabra de seguridad?- Le dije mientras me deshacía de sus shorts junto con su ropa interior.
-S-si... es Dorito.- Dijo sonrojandose lo cual lo hace ver más tierno.
-Perfecto...-
Acerqué tres dedos a su boca provocando que su sonrojo creciera aún más. Introdujo los dedos en su boca, ensalibandolos de una forma muy provocativa, hasta que sentí que ya estaban bien lubricados. Dirigí mis dedos a su entrada, introduciendo el primero, provocando que mi bebé soltara un gritito.
-Ahh... D-duele.- Me informó mi pequeño Pino mientras apretaba sus ojos con fuerza.
-Tranquilo bebé, ya te acostumbraras.- Dije intentando relajarlo, acariciando su muslo con mi mano libre.
Comencé a hacer círculos en su interior hasta que se acostumbró e introduje el segundo dedo, el cual no le molestó mucho. Hice movimientos de tijeras mientras me deshacía de mi pantalón y mi ropa interior.
Introduje el último dedo mientras mi Pinetree no dejaba de gemir, logrando que mi autocontrol se valla a la mierda.
-Lo siento, ya no aguanto.- Introduje mi miembro lentamente tratando de no lastimarlo.
-Ahh... Bill!... Nngh.-
Espere unos segundos hasta que mi pequeño se acostumbrara.
Empezó a mover sus caderas para que me moviera, y así lo hice, comencé con embestidas lentas pero profundas, manteniendome de ese modo por unos minutos.
-Mmgh... Más... Más rápido...- Dijo mi pequeño.
-Como desees.- Lo di vuelta para ver su hermoso rostro suplicamdome por más, y empecé con las fuertes embestidas.
-Ahh!!... Mmmgh!! Bill!- Mi Pino casi no podía formar palabras.
Colocó sus brazos alrededor de mi cuello. Empecé a examinar su rostro mientras aumentaba la velocidad de mis movimientos. Su cabello alborotado en distintas direcciones, su frente con una fina capa de sudor y algunos cabellos pegados por esta, sus ojos entre cerrados, su respiración agitada igual que la mía, y sus labios ligeramente abiertos para dejar salir gemidos y algunos jadeos los cuales eran como una melodía para mis oídos.
Se sujetó a mi cuello con más fuerza, acercándose y clavando sus uñas en mi espalda. Sentí su respiracion agitada en mi cuello y sus gemidos no se quedaban atrás.
-M-me... me voy a..- Lo besé interrumpiendo lo que iba a decir, mientras él se corría manchando nuestros abdomenes, y ahogando un gemido en medio del beso.
Unas dos embestidas más bastaron para correrme en su interior.
Salí de dentro de él y me recoste a su lado, cubriéndonos con las sábanas y abrasandolo por su cintura.
-¿Ya no estás enojado?.- Dije luego de haber recuperado un poco la respiración, haciendo una sonrisa ladina.
-No...- Escondió su rostro en mi cuello para luego de unos minutos quedarse dormido.
Te amo Pinetree, pensé dejándome caer en los brazos de Morfeo.
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Y a todas las panqueques que siguen mi historia (Si pasivas ya les puse nombre :v,
PD: Les iba a poner Waffles pero recordé que Fabii Pufle llama así a sus subs :/)N~
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No Molestes! | ♡BillDip Chats♡
HumorEsto Es Shaoi (Yaoi) , BxB (BoyxBoy), Lenguaje vulgar (por parte de escritores) Derechos de autor Si no te gusta pues no leas bato no seas masoquista :v. (Incluye Tomco)