[35] El lugar de los hechos

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Usagi Bon, se encontraba de camino nuevamente junto a personas de la presidencia del lugar, hacia el anteriormente psiquiátrico, habían pasado ya meses desde que el lugar quedo abandona, en totales ruinas, lo unico que quedaba era el yeso entre el aire, una especie de construcción dañada, de la cual las plantas habían tomado posesión, y no solo estas, pequeños animales, la habían acogido como un hogar para evitar pasar frío, revisaban cuidadosamente los restos, y registraban en notas los daños, y los costos.

X: Nosotros nos encargaremos de la recuperación total del lugar -acomodo sus lentes dirigiendo la vista a Usagi-

U: Me parece bien... -le miro-

Usagi no estaba segura del todo, de si eso era lo correcto, estaba agobiada de escuchar gritos de personas enloqueciendo, el agobiante Holor del medicamento inundando los pasillos, y escuchart el "pit" de las cerraduras a código,abriéndose, pero era aun mas agobiante el que a veces inclusive se usaran a los pacientes, para experimentar sobre ellos y las consecuencias que traía consigo la enfermedad padecida, por años al fin parecía que ese lugar considerado un "hospital" había llegado a su fin, pero eso de

"Hay una solución para todo"

Al fin le parecía verídico.
Una vez terminada la cita para emprender el proyecto de la reconstrucción del psiquiátrico, Usagi regreso nuevamente a casa, caminando por el bosque, mientras que los trabajadores para el gobierno se fueron, para ellos era conveniente recuperar el establecimiento, puesto que pagarle a los encargados del lugar sin siquiera cumplir con las horas de trabajo establecidas, solo generaban bajas en sus asuntos.

Al llegar a casa, Usagi se desplomo sobre su cama, agotada y agobiada por el papeleo intenso, la proxima visita sería, para calcular el gasto en la reconstrucción, sus esfuerzos por que la construcción no volviera a levantarse los veía en vano, nada de lo que anteriormente hizo hasta ahora hubiera rendido un solo fruto, la reconstrucción se realizaría de cualquier forma, y el gobierno cubriría totalmente los gastos, agotada cerro de a poco sus ojos hasta quedar dormida.


                         ~☆~
Una vez que Springtrap y Meg terminaron de desayunar, Springtrap fue al estudió, se podría quedar horas enteras sumido en esas cuatro paredes con nada mas y nada menos que una liviana hoja de papel y un lápiz, soltando la mano cada vez que escribiera un verso, cada vez que dejaba que su imaginación coordinara con su corazón, apagando su cerebro, intentando calmar las continúas tormentas que dentro de él aún seguían cayendo, como si las gotas no cesarán su caída y los pequeños focos de luz, perdieran su arduo brilló, tal como la flor pierde su belleza pero no las espinas
Sentía que la musica era su única salvación, su única medicina ante la verdad que se alzaba con furor día a día, o al menos así era a través de sus ojos, antes de que ella llegará a su vida, por que cuando su luz fue apagada por la desgracia, llego ella para encenderle nuevamente

"En este mundo solo hay alguien capaz de devolverte la fé"

Las palabras sonaban como un tintineo alrededor de todo su desorden mental, pero extrañamente era lo único que amaba que deambulara por éste, amaba recordar la vez que conoció a Meg, y la primera vez que volvió a sentir la dulzura y el calor, esos ojos color miel, hacían que su corazón diera un vuelco, que instantáneamente quisiera tenerla en sus brazos, acariciando su sedoso cabello albino, todo de ella lo hacía querer seguir adelanté, inclusive si significara dar su vida por la de ella, para él nada importaba más...que aquella chica...
Sin darse cuenta, en la pequeña hoja que tenía ya había redactado varios versos, aquellos que el chico no lograba expresar, esbozando una sonrisa, abrió la ventana que se encontraba frente a él, dejando entrar una pequeña brisa de aire que sacudió levemente su cabello con tranquilidad

Sostuvo la hoja unos momentos y posteriormente, abrió un cajón donde la guardo con sumo cuidado, lo que tenía planeado finalmente se pondría en marcha
La puerta se abrió con sumo cuidado, deslizándose sobre el piso, una chica se asomó intentando mantener el ambiente pacifista que en el estudió se encontraba, sabía lo que significaba para su novio el escribir canciones y lo que ese lugar le hacía sentir, avanzó sonriendo, hacía el contrario, quien se alegró de inmediato

-- Lo siento, Springy... ¿Te interrumpí?

-- Para nada Hermosa -- Sonrió

Meg se acerco a él, sentándose sobre el regazo del contrario

-- Es un lindo día -- la albina miró por la ventana

-- Tu presencia hace que mejore -- respondió Springtrap abrazandola

-- Idiota -- la de ojos color miel río por el comentario, pero no negaba que le gustarán

Springtrap hizo que Meg le mirará, los ojos de él eran fríos y profundos, los de ella eran cálidos y dulces... poco a poco se acercaron el uno al otro, hasta unir sus labios en un beso, la sensación era prácticamente difícil de explicar, por una parte, ella era una tarde en un día de verano, y el una brisa de viento, en un día lluvioso

De eso se trata el amor, de una voz en el silencio

De que tenemos que temer?...[Springle] [#SickFNAFHS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora