Acto único

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Kirishima estaba bastante cansado después de un largo día de práctica. Habían tenido un entrenamiento algo duro... Y eso terminó muy mal para él. El chico de cabello rojo había tenido una pequeña discusión con su mejor amigo Bakugou, quien estaba muy enojada con él por haber fallado a la hora de batallar contra Tsuyu y Ochako ese mismo día. Kirishima había estado muy distraído y no logró seguir las órdenes del chico de cabello rubio, lo que ocasionó que intentara hacerlo explotar literalmente.

Él entró a su habitación y cerró la puerta que se encontraba detrás de él, saltando salvajemente a su cama, que se encontraba muy desordenada ya que no la había hecho en los últimos tres días. Dejó salir un suspiro profundo.

Estaba bastante molesto, y no era por su pelea con Bakugou. Él sabía que aquello no importaba ya que su amigo siempre estaba enojado de todos modos, y no era algo de lo que debía preocuparse... Pero estaba molesto sobre lo que le había estado sucediendo por los últimos cuatro días.

No lograba sacarse a la chica de la cabeza. Ella siempre se encontraba allí, con su cara inexpresiva y sus tratos de rana, que sólo la hacían verse aún más hermosa. Ella era una de sus mejores amigas, por lo que se sentía normal el que ella le gustara. Tenían tanto en común, y se encontraban tan cómodos juntos.

O por lo menos, así era hasta que él descubrió lo que realmente sentía por ella.

Él ya no lograba soportar estar cerca de ella, tanto incluso que se cambió de asiento en clase; dejando de sentarse a su lado.

Se encontraba muy confundido y sentía que perdía la esperanza.

¿Qué estaba haciendo?, ¿Iba a simplemente seguir ignorandola, suprimiendo sus sentimientos haca ella?

Eso no era para nada varonil.

.

.

.

Escuchó un suave golpe en su puerta.

Otro.

-"Kirishima-chan, ¿Te encuentras allí?... Deberas necesito hablar contigo"-

Había reconocido la voz de su amiga la chica del quirk de rana.

Era el fin del mundo; de su mundo.

No se encontraba listo para eso, estaba siendo atacado de manera injusta... Y en el peor momento posible.

Sentía que iba a vomitar. Y así fue.

Iba a tener que limpiar eso, era un desastre.

¿Podría ir peor?

Sí.

.

.

.

Tsuyu creyó haber escuchado algo viniendo de la habitación de su amigo, y así fue. Pero creyó que si él realmente la quería ignorar, era porque tenía sus razones para ello; y ella se lo pondría más fácil... Se iba a distanciar de él.

Kiritsuyu- Una flor creciendo en nuestros corazones.Where stories live. Discover now