Rosas Rojas (Vauseman)

Adiós

Piper se levanta. Tiene decidió que de hoy no pasa. Irá a ver a Álex y dejarán todo claro.
Sale de su casa y pone rumbo a la floristería de Álex.
- Ey, hola
- No, no te alegres de verme, no puedes, no quiero que te alegres por verme.
- Oye que tienes
- Estoy aquí por qué no se que me pasa...haces que sienta algo, algo que es imposible que yo sienta. Estoy casada, casada por dios, tengo un marido... Un hombre... Un tío encantador y no puedo hacerle esto...
- Hola, seguro que puede ayudarme quiero montar un jardín
En ese momento entra un señor y Piper se va a la trastienda
- Tome, se la regalo. Fuera
Álex cierra la puerta y va a la trastienda.
- ¿No te das cuenta? Tienes que darte cuenta. No puedo hacer esto, te aseguro que no puedo. Así que sea lo que sea esto tiene que acabar y tiene que acabar ya ... ¿Entiendes? ... Adiós
Piper sale por la puerta. Álex se apoya en la columna pensando en todo lo que quería hablar y no dijo cuando vuelve a oír la puerta. Piper vuelve a entrar y antes de que pueda reaccionar la besa. Se besan. Las manos de Álex rozan la cara de Piper con cuidado, y las de Piper descansan en su cuello. Poco a poco el beso va subiendo de intensidad y Piper tumba a Álex sobre un pequeño sofá que está lleno de flores. Se recuesta sobre ella y se siguen besando. Piper le quita la chaqueta a Álex. Álex se levanta y se posiciona ella encima de Piper, la sigue besando mientras con su mano toca todo su cuerpo, ese cuerpo que lleva tanto queriendo tocar. Le quita la chaqueta a Piper y contempla sus pechos.
- ¡Aauuu! ¡Auuuuu!!
- ¿Que? - Piper se preocupa
- Espinas, espinas en mi pompis
Piper intenta a levantar a Álex y se ríe
- jajajajaja, lo siento
Oye la puerta.
- Otro cliente
- ¿Hola? ¿Álex?
Reconocen esa voz y se le corta la risa a las dos.
- Si voy.
Álex sale de la tienda
- Hola Larry
- Hola, vengo a buscar un ramo de flores para mí mujer.
- Eh... Si, claro ¿Cuáles le gustan?
- Ya lo sabes, le gustan los lirios
- Oh sí claro.
Álex empieza a hacer el ramo para Piper.
- Oye... Piper te ha comentado algo de nosotros...
- No, ¿Por qué?
- Hace semanas que está rara... No sé lo que he echo... O lo que no he echo... No sé qué le pasa.
- Deberías preguntarle a ella
- ¿A Piper?... No
- ¿Por qué?
- Porque ¿Y si de verdad le pasa algo? No quiero perderla. Te quedó bonito el ramo, ¿cuánto es?
- No es nada
- Gracias... Y a ver si nos vemos.
Cuando ve que Larry sale, cierra y vuelve a por Piper. Pero Piper ya no está, había salido por la ventana. Álex corre y la encuentra unas calles más abajo
- Piper, espera
- No Álex, ya lo has oído. No ha echo nada, Larry no ha echo nada y aún así se siente culpable
- Por favor para
Piper se frena y mira a Álex
- Piper, si quieres que me vaya, que desaparezca de tu vida, solo tienes que pedirlo.
- ¿Eso es lo que tú quieres?
Álex se acerca y la abraza
- Te quiero a ti. Pero sobre todo, quiero que seas feliz, y si para eso tengo que alejarme de tu vida, lo haré.
Piper llora. No quiere que Álex se vaya. Pero sabe que es la única forma.
- No me olvides - Álex le da un beso en la frente y se aleja.
Piper se queda en el mismo lugar. No puede controlar las lágrimas. Sabe que está dejando ir a la única persona que le ha echo sentir mil cosas sin ni tan siquiera tocarla. Pero es lo mejor. Larry es demasiado bueno y no puede hacerle esto. Se limpia las lágrimas y vuelve a su casa
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Han pasado varias semanas desde la última vez que vio a Álex. Esa tarde había quedado con Lorna. Ella y Larry eran ahora lo único que tenía.
- Ey Piper tienes una cara horrible
- Gracias Lor, tú también estás guapísima
- ¿Qué tienes?
- Hablé con Álex...
- ¿Y...?
- Le pedí que se fuera de mi vida
Piper empieza a llorar.
- Ey, ey peque
- Es lo mejor Lorna, no puedo hacerle eso a Larry
- Piper... Ya se lo has echo. Quieras o no reconocerlo, ya el daño está echo. Seguir al lado de Larry por pena solo empeora la situación. Sé valiente, habla con Larry. Estoy segura que él prefiere verte feliz. No dejes escapar al amor de tu vida, ni condenes a Larry a conformarse con un matrimonio sin amor.
Piper se quedo pensando en lo que le acaba de decir su amiga. Quizás tenía razón y quedarse con Larry cuando no siente nada a su lado, más que amistad era de egoísta. Tenía que hablar con Larry.
Llegó a casa dispuesta a mantener una conversación con su marido. Pero aún no había llegado. Le pareció raro. Se dio un baño, se puso el pijama y se sentó a esperar a que Larry llegase.
- Por eso la llaman
- Larry donde te habías metido
- Era una muñequita llamada Piper
- Estás borracho
Piper va hacia su marido. Quien va a la cocina
- Nunca falla. Ocho vasos de agua antes de dormir y al día siguiente no tienes resaca. ¿Tú estás bien preciosa?
- Quiero hablar contigo
- Yo también quiero hablar contigo. Solo me faltan tres vasos más y soy todo oídos.
- Te espero
Piper va hacia la sala. Larry termina su ritual anti-resaca y se tira en el sillón.
- Te escucho. Dispara
- Quiero hablar contigo porque... Tenemos que hablar porque ha pasado algo. Yo no lo he buscado... Tan solo ha pasado y aunque... Se ha acabado debes saberlo - Piper coge aire - me he vuelto loca Larry... Me he vuelto loca por alguien y no eres tú. Lo siento, te seguro que lo siento cielo. Por favor, cree en mí... ¿ Larry? No, no, no, no. No te duermas Larry, no puedo decirlo más de una vez - Nota como se le escapa alguna lágrima- me quedo. Yo no puedo dejarte. Eres mi mejor amigo, con eso me basta, y me bastará así que... Te elijo a ti.
Piper besa a su marido, lo tapa con una manta y se va a la habitación.
Cuando Larry ve cerrar la puerta saca su móvil y llama a su mejor amigo. Sabía que algo pasaba, pero no esperaba que fuera eso.
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Álex está colocando mercancía en la floristería. Hace varias semanas que no sabe de Piper. Le prometió que se alejaría y piensa cumplir su promesa. Está en sus pensamientos cuando alguien entra en la floristería.
- ¿Eres tú, verdad?
- ¿Qué? No te entiendo Bennet
- El no lo sabe. Piper no le ha dicho quién es. Pero... Lo he imaginado
- ¿Qué te ha dicho?
- Dime que me equivoco, dímelo
Álex se queda callada. No sabe que contestarle.
- Maldita zorra
- No hagas eso Bennet.
- ¿Qué no lo haga? Su marido, su alucinado marido, me ha llamado en mitad de la noche ¿Quieres saber cómo estaba? Echo una mierda
- Es mejor que te vayas
- Que fue de aquello que dijiste ¿Cómo era? NUNCA ROMPAS OTRA PAREJA. Pero como puedes ser tan cínica.
Bennet se va. Álex se queda pensando. Tiene que irse. Irse de verdad. Irse lejos. Si se queda en la misma ciudad, o ella o Piper terminarán faltando a la promesa y viéndose. Y no quería el mismo numerito que acababa de vivir por parte de Larry.
Lo tiene decidido. Pondrá tierra de por medio y dejará a Piper hacer su vida.
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Gracias por leer y por los comentarios. Mañana el último.