-Tía Marta!?- Gritaste con algo de dificultad
-Mi pequeño terrón de azúcar! Hace tanto que no te veía! Mírate!! Estás hermosa!- Te encontrabas atrapada en los brazos de tu tía mayor
-No puedo... respirar- alcanzaste a articular
-Oh! Lo siento cariño- La gran mujer te soltó
Ella era la mas alta de los 3 hermanos, en su habla se notaba un leve acento extranjero, producto de que pasó sus primeros años de vida en Alemania con tu abuela, poseía ojos verdes y un abundante cabello rojizo que habitualmente peinaba en dos trenzas dándole ese aspecto germánico tradicional tan característico de ella
Y si, tu abuela era una gran mujer Alemana y tu tía Marta era la viva imagen de ella.
La única ventaja que le encontrabas a esto de tener familia proveniente de Alemania, era el gran conocimiento que tenían las mujeres sobre la gastronomía del país
Raramente tu padre cocinaba algo que no eran sándwiches de mermelada o atún. De cierta forma te alegraba ver a tu tía para variar
-Que haces aquí? Creí que no volverían hasta el final del verano- Interrogaste a la mujer
-Tu tía Maribel olvidó un par de cosas, así que volvimos. Lamentablemente no nos quedaremos mas tiempo, nos iremos mañana a primera hora- musitó la mayor
-Que sucede aquí?- Tu padre entró a escena, un poco tarde, pero se agradece- Oh, Cariño... creo que olvidé decirte que tu tía vendría hoy- Tu padre se rascó la nuca de forma algo nerviosa ante tu mirada de reproche
-Si! Ya lo noté- intentaste disimular tu incomodidad, tu tía podía ser algo pesada a veces pero la realidad es que no era una mala mujer
Muchas veces te preguntabas por qué los vecinos le tenían tanto pavor, tal vez por su tamaño, si, eso debe ser
-Vamos a la cocina pastelito de crema, he estado toda la tarde horneando una tarta sólo para ti- La mujer se encaminó a la cocina y aprovechaste para escapar a tu cuarto
- Tráeme un pedazo de esa tarta por favor- Le susurraste lo último a tu padre al pasar a su lado
Él entendió el mensaje y fue tras su hermana para inventarle que te sentías cansada
Subiste las escaleras y al pasar por el pasillo una de las habitaciones extras estaba abierta, asomaste la cabeza y por poco te da un infarto al ver que la puerta se abría de golpe
Cuando recuperaste la compostura pudiste ver a tu tía Maribel mirarte con esos ojos oscuros y vacíos
-Y-y-y-yo... - tenías la sensación de haber tartamudeado mas que Bill en esa sola palabra, tu tía menor si que te provocaba miedo, y miedo del fuerte
Poseía la misma mirada de un cadáver, fría y siniestra, a diferencia de su hermana, ella poseía rasgos mas americanos como los de tu abuelo y tu padre. Cabello oscuro, piel pálida de tanto permanecer encerrada, era muy delgada, ojerosa y casi no le conocías la voz
Si no la conocieras dirías que está en un estado deplorable, incluso la podrías confundir con un zombie, de esos que aparecían en las películas de ciencia ficción que tanto te gustaban
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¡Ya No Molestes! [Patrick Hockstetter y tú]
FanficMe irrita... Me irrita él, sus amigotes y su actitud. Está completamente enfermo pero no lo juzgo, vivir en este lugar podría acabar con la razón de cualquiera... Espero no permanecer mucho tiempo más aquí [Esta novela se comenzó a escribir a media...