Convergir

Confusión

Y de nuevo, tengo esa extraña sensación, esa en la que no tienes idea del porque la sientes, porque te preocupa sin necesidad de tener una razón lógica para hacerlo, un sentimiento irracional como el presentimiento de que algo no esta bien sin ni siquiera saber ¿Por qué ha de sentir esto?

- ¿Max, que le ha pasado a mamá? - pregunté con nerviosismo

- Si te soy sincero, no lo se - tomo una bocanada de aire y prosiguió - esta tarde cuando salí, intente llamarla y nada no contesto, llame a papá y tampoco me atendió la llamada ni siquiera la ha devuelto -

- ¿Y eso no quiere decir nada? Digo, ellos casi nunca atienden por estar ocupados o como dicen ellos "me quede sin señal" - respondí tratando darle una razón a su preocupación

- Ashley, no es como tu crees. Ellos tienen secretos, secretos que no nos cuentan, que no comparten con nosotros, no se cuales ni que tantos tienen pero uno de ellos es la causa de su desaparición. -

- ¿Secretos? ¿Max, acaso te estas escuchando? Como vas a pensar que nos estan ocultando algo y que esa sea la razón para ellos irse. - dije con asombro

- Porque así lo es hermanita, y deberías de creer en mi. Soy tu hermano y solo quiero lo mejor para ti, así que es mejor irnos también, debemos salir de aqui en cuanto antes mejor ten...- lo interrumpi antes de que terminara de hablar

- ¿Qué? ¿irnos? ¿Max estas loco? Como vamos a irnos, ellos en cualquier momento van a regresar, no entiendo tu loca idea de irnos. ¿Porque? -

Note que estaba empezando a ponerse nervioso y algo inquieto, él no solia ponerse así a menos que tuviera algo que lo preocupara mucho más.

- Sabes, ¡Se me esta acabando la paciencia! Dije, que vendrás conmigo ¡Te guste o no!. - alzo su vista hacia mi con una mirada desafiante

No podía creer que me mirara así, ¿Que le estaba pasando? No puede ser, él nunca me había tratado así.

Empezó a ponerse de pie delante de mi, mientras yo aun seguía sentada en el mueble; su mirada aún seguía clavada en mi, era fría no reflejaba ninguna clase de sentimiento.

- Entonces hermanita, ¿Vendrás o no conmigo? - preguntó con ironía

- Max, no iré a ningun lado contigo. Además ya es tarde, si no te importa quiero ir a descansar - conteste tratando sonar tranquila mientras me levantaba para ir a mi habitación, por ahora quería alejarme de él. No se que le pasaba.

Comencé a caminar hasta mi habitación dejando a Max en la sala, eran alrededor de las 3am no estaba segura, a penas y había visto de reojo el reloj que se encontraba en la pared; al llegar a mi cuarto antes de abrir la puerta voltee a ver a Max, al parecer aún seguía parado en la sala pero esta vez sostenía su teléfono, supongo que hará una llamada. No le di importancia y abri la puerta, al entrar note que estaba todo oscuro así que encendi la luz.

De pronto algo salto hacia a mi velozmente, fue casi que al instante de encender la luz, como si no quisiera ser visto; mi cuerpo comenzó a temblar y mi respiración agitarse al unisolo con mi corazón, sentía unas manos frías tapar mi boca evitando que gritara, mientras su cuerpo hacia prisionero al mio pegandolo junto a la pared evitando que yo realizara algún movimiento.

Automáticamente mi reacción fue quitarme sus manos de encima, pero cuando me fije en su rostro no supe que pensar, me encontraba aturdida, no era posible creer lo que estaba viendo, más bien a quien miraba.

Solo pensaba en que merecía una explicación racional a lo que estaba sucediendo, como era posible verlo ahí en mi cuarto, y sujetandome. No entendía que estaba pasado.