Capítulo 12: Shady Lady

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Youngjae abrió los ojos y encontró a Daehyun encima de él. En algún momento de la noche anterior, ambos se durmieron en el sofá. Daehyun tenía su cabeza en el pecho de Youngjae y una mano en el hombro de Youngjae como hacen las parejas. Youngjae quería gritar y saltar debido a la proximidad entre ellos, pero no quería despertar a Daehyun, así que agarró cautelosamente los hombros del hombre y lo apartó lentamente y luego se levantó del sofá y se dirigió hacia la puerta. Sin embargo, no pudo evitar mirar hacia atrás y mirar a Daehyun que aún estaba dormido, ahora abrazando un cojín en lugar de él.

Youngjae se inclinó hacia delante y cepilló suavemente el cabello de Daehyun antes de poner una mano en su frente. Daehyun ya no estaba ardiendo y eso hizo a Youngjae feliz.

Daehyun se despertó horas después; se sentó en el sofá y estiró los brazos perezosamente al mismo tiempo que buscaba a Youngjae. Pero no había signos de él. "¿Lo soñé todo?" Daehyun pensó, desconcertado, y luego vio dos vasos y dos platos en la mesa de café y comenzó a recordar que ordenaron comida japonesa y comieron mientras veían una película de terror. Sin embargo, Youngjae no terminó de ver la película; se quedó dormido en cuanto terminó la cena y Daehyun siguió viendo la película, pero terminó viendo dormir a Youngjae. El más joven se veía tan acogedor y cálido como una manta que Daehyun se acostó a su lado y se quedó dormido también.

       
              
         
         
       
        
         
         
Capítulo 12: Shady Lady.

Sintiéndose mejor que nunca, Daehyun cocinó una comida para Youngjae como agradecimiento por cuidar de él (aunque en realidad, Youngjae fue al apartamento, esperando cuidar de Dasom). Daehyun dejó escapar un profundo suspiro; No sabía cómo entregar las loncheras. Quería aparecer en la oficina de Youngjae como Daehyun, pero seguro que Youngjae quería ver a Dasom y, no a Daehyun. Entonces Daehyun se puso la peluca y entró a la oficina.

Youngjae no estaba a la vista.

Daehyun se acercó al escritorio y dejó las loncheras, en ese mismo momento; Youngjae salió del baño y se sobresaltó al ver a Dasom, de pie, de espaldas a él.

— ¡Diablos, Jooe, te dije que no permitieras que entrara gente!— el grito de Youngjae casi le dio un ataque al corazón a Dasom.

Ella giró para mirarlo, ella esperaba ver a una Youngjae enojado, ¡pero no esperaba ver a una Youngjae enojado, llevando solo una toalla alrededor de su cintura!

Youngjae se había duchado y ahora estaba de pie ante ella con gotas de agua corriendo por su cuerpo. Dasom, con la boca abierta, lo recorrió con los ojos, Youngjae no era excesivamente musculoso, estaba delgado y tenía los hombros anchos, no había six packs, pero podía ver que hacía ejercicio.  

—¡¡¿Qué demonios estás mirando?!!— gritó Youngjae, sacándola de sus pensamientos—¡Eres una pervertida!— Youngjae se cubrió el pecho con ambas manos —¡¡¿Qué clase de mujer eres?!! Las mujeres normales cierran los ojos, avergonzadas, cuando ven a hombres medio desnudos.

—¿Por qué? No es la primera vez que veo a un hombre usando solo una toalla —Dasom se encogió de hombros— Incluso he visto a hombres desnudos muchas veces.

—¿Qué dijiste?— Youngjae murmuró en shock.

—¡¡No pienses mal de mí, pervertido!!— Dasom dijo: —He visto a muchos hombres desnudos en casas de baños... quiero decir... he visto a muchas mujeres desnudas... porque soy una mujer... pero... todos los cuerpos son iguales... entonces, al ver que no me dejas...

—No voy a discutir contigo— dijo Youngjae— Solo tírame mi ropa.

Dasom vio la ropa de Youngjae en el escritorio; Ella tomó la ropa y se la tiró a Youngjae. Cada prenda voló por todas partes; Youngjae no atrapó uno solo.

She is a boyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora