El rey cabeza de brócoli [One-Shot]

Haciendo un desmadre de un cuento infantil

Había una vez en un lejano reino, una pareja de reyes que habían sido bendecidos con una hermosa hija a quien trataron con toda la gentileza que se podía, la niña era la viva imagen de su madre y había heredado una poderosa singularidad similar a la de su padre.

La pequeña creció colmada de halagos ya que era una jovencita sobresaliente en todos los aspectos, inteligente, fuerte y bella, también era noble y se preocupaba por los demas a su manera, pero tenía un enorme defecto, la joven princesa era tan arrogante como hermosa, múltiples príncipes trataron de cortejarla, recibiendo crueles rechazos, la princesa tenía la mala costumbre de poner apodos ofensivos a sus pretendientes y humillarlos a base de eso.

En un último intento por hacer que su hija eligiera un esposo, decidieron organizar una gran fiesta, y llamar a todos los jóvenes en edad de casarse, el día de la fiesta, los jóvenes fueron colocados en filas de acuerdo a su rango y posición, primero iban los reyes, luego los grandes duques, después los príncipes, los condes, los barones y por último la clase alta pero no cortesana.

Uno a uno Katsuki se paró ante ellos, preguntandoles su nombre y singularidad.

—Soy Kirishima Eijiro y puedo endurecer todo mi cuerpo—Dijo alegremente un chico pelirrojo.

—Pareces un ladrillo, pelos de mierda—Fue la cruel contestación de Katsuki.

—Yo soy Uraraka Och...—El joven castaño no pudo terminar de hablar.

—Cara de globo—.

Y así, la joven princesa los hizo desfilar al azar frente a ella, insultandolos sin dejarlos hablar.

—Cara estupida... Cabeza de piedra... Enano de mierda con cara de pervertido... Pajarraco—.

Y de esa forma llegaron al último de los pretendientes, un joven Rey de ojos verdes y cabello alborotado del mismo color, apenas lo vio, la princesa rompió a reír.

—¿Que es ésto? ¿Dejaron al más patético para el final? ¡Mírate nada más, parece que tienes un brócoli por cabeza! ¡El rey cabeza de brócoli!— Y de esa manera al joven Rey, cuyo nombre era Izuku, se le quedó el sobrenombre.

La reina, al ver que su hija no hacía nada más que insultar y ofender a los presentes, monto en cólera y juro por su vida que casaría a su altanera hija con el primer mendigo que se apareciera en el palacio y de esa forma la fiesta llegó a su fin.

Unos días después, un músico sucio y andrajoso con un enorme sombrero cubriendo su cabeza y parte de su cara, se paró frente a las puertas del palacio y comenzó a cantar, siendo escuchado por los reyes los cuales le permitieron entrar para que tocase algo para ellos, al terminar, el mendigo pidió una pequeña retribución.

—¡Ah jovencito! Tu canción me ha gustado tanto, que voy a darte a mi hija como pago—Dijo alegremente la reina.

—¡¿Que!?—El rey y la princesa miraron en shock a la reina.

—Hice un juramento de darte en matrimonio al primer mendigo y lo mantengo—Dijo la reina como toda respuesta, logrando que el rey no hiciera más preguntas.

No obstante la princesa montó en cólera, gritó, maldijo e incluso amenazó con matar al mendigo, pero todo fue en vano, Mitsuki mandó llamar al obispo y amordazada y maniatada por el consejero real, Aizawa, Katsuki fue casada con el humilde músico, quien se fue con su nueva adquisición sobre el hombro, ya que ella seguía atada.

Cayó la tarde y la pareja había avanzado un largo camino adentrándose en un gran y frondoso bosque.

—¿En donde mierda estamos?—Dijo la princesa con fastidio.