—Te gustó? Como puedes decir eso tan casualmente además acabas de conocerme hace un instante—
—no importa cuanto tiempo se conozca una persona si sólo con una mirada se rebelan los sentimientos— dijo es joven adentrándose a mi habitación
— no eh permitido que entres— le reclame mientras recogía algunas cosas que tenía tirada —perdón es que hubo un problema más temprano en esta habitación—
El joven entró y afuera de la puerta se quedó otro joven el cual traía una espada en su cintura, deje la puerta abierta y entre para saber que buscaba
—que es lo que quiere?por favor dígame y luego marcharse de mis aposentos— remarque muy sería
—quiero que vengas conmigo y te conviertas en mi mujer y bailes sólo para mi —mis ojos se abrieron al escuchar dicha propuesta y baje la mirada para responder muy elegante
—es muy apreciable y me apena que alguien como usted quiera a alguien como yo pero la verdad es que no tengo interés en ser mujer de alguien pues como ve ya tengo un interés por alguien mas—
—no me interesa si te gusta alguien mas sólo te quiero para mi...en un par de días mandaré por ti— mientras desia eso lo mire con mis ojos abiertos por lo sorprendida que esta
—pero no puede hacer eso ya le dije que no estaba dispuesta —el sólo asintió y salió de la habitación
A la mañana siguiente desperté y no quería pararme de la cama pero la jefe lui llegó con tal desenfreno que me levanté a habrirle no me había ni colocado una bata enzima de mi camisón y ella me jalo hasta la entrada de la casa
—mira el joven de ayer a mandado dos cajas con ropa muy fina y accesorios de oro y plata para ti— mire con descontento y di media vuelta
— no recojan nada de lo que hay y pidan que sean devuelto de inmediato— manifesté con ira
Regrese a mis aposentos y busque la mejor ropa que tenía que de color azul claro de mangas anchas bordes decorado en plata, me maquille y salí rumbo al palacio por que tenía que ver a chul tenía que hablar con el. Como siempre las miradas me invadía pero aún así camine con la frente en alto hasta la puerta del palacio
—por favor podría decirle al guardia real Kim Chul que necesito hablar con él —dije de manera sutil con una sonrisa en mi rostro
—lo siento señorita pero él guardia Kim no se encuentra en el palacio—
—ah que mal pero podría decirle que bine y entregarle esta carta—
—le aseguro que se la entregaremos —Me retire de la puerta y me senté en un pequeño negocio de pasteles de arroz para degustar y pensar un poco, al dar la vuelta vi como Chul salía del palacio y le entregaban mi carta luego se dirigió a las afueras de la ciudad y le seguí por que tenía que encontrar la manera de verle y hablarle pero lo perdí de vista en la entrada al bosque recogí un poco mi vestido a los lados ya que era incómodo cambiar es el bosque con esa ropa, de un momento a otro lo vi detrás de mi lo cual me asusto casi a muerte
—hay por dios casi me matas de un susto —dije mientras colocaba la mano en mi pecho
—por que me sigues no ves que es peligroso... yo soy peligroso para ti—

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Kisaeng la gran dama
Ficção Históricauna dama de una casa de kisaeng se convierte el la mujer con mas poder por encima de la reina después de ser una simple doncella fue capas de obtener tanto poder solo con el poder de su gran baile lee hae yon (amada flor de loto) es una kisaeng e...