Stars that Glow in the Dark (Creek) ||Traducción||

Único Capítulo

Stars that glow in the dark

Por Kivea

Traducción: Maya_0196 (Alyssa Selleugra)

Único capítulo

Su primer amigo en la universidad fue Stan Marsh. Era un agradable -y quizás un poco cínico- chico que venía por una beca deportiva y le recordaba a un amigo de su casa. Stan fue uno de los alumnos asignados a su piso en su primer año, y lo recibió con una amplia sonrisa y una oferta para ayudar a mover el resto de sus cosas a su habitación.

Su segundo amigo era alguien más de su apartamento; Kyle Broflovski, quien también era un amigo de la infancia de Stan. Ambos habían llegado a la universidad juntos, una decisión que le parecía un poco extraña a Tweek, pero se veían tan cercanos como si fueran familia que podía entenderlos. Una parte de él deseaba haber tenido un amigo para traerlo consigo a la universidad para hacer su experiencia más agradable.

En su segundo año, el trío consiguió un piso juntos, uno en el campus que la mayoría de los alumnos se trasladaban a vivir casi al final del primer año. Los apartamentos se encontraban en bloques apilados junto al otro, y su ventana daban directamente al edificio de al lado. Al principio estaba un poco molesto por eso; no quería que otra persona lo esté mirando a través de su ventana. O al menos eso fue al comienzo.

Su vecino era muy alto, moreno y guapo. La primera vez que lo vio, ya estaba viviendo allí por un par de días, y su vecino estaba moviendo unas cajas el día que echaba un ojo por la ventana por mera curiosidad.

El de oscuros cabellos tenía recogidas sus mangas donde en sus brazos se podía ver una serie de tatuajes que venían desde debajo de donde comenzaba la tela recogida hasta sus muñecas y un ceño fruncido en su rostro que podía derribar un trueno. Primero se apartó y estremeció -el otro estudiante era la clase de persona que sus padres siempre le habían advertido que se mantenga alejado, con tatuajes y una actitud desagradable-, pero el deseo de saber más del otro le ganó, y se sentía algo seguro en su habitación al mirar por su ventana y oculto entre sus cortinas al otro hombre.

—Hey, eh. ¿Tweek?

Él gritó y saltó en su lugar, girándose hacia la puerta con sus ojos abiertos por la sorpresa.

—¿Q-Qui-? ¡Stan! ¿Qué? ¿Qué deseas?

Los ojos azules de su amigo se posaron en la ventana detrás de él, de donde estaba muy obviamente de pie frente a ella.

—Uh... Kyle y yo estábamos pensando en pedir pizza. ¿Quieres algo?

—Oh-nng-Sí. Me-uh- Me gustaría... quizás una de queso.

—Claro, amigo. Podríamos pedir dos grandes y dividírnoslas, ¿te parece?

—¡Por supuesto!

El otro alzó un poco su mirada, tratando de ver a través de la maraña de cabello de Tweek.

—¿Qué estabas haciendo?

—¡N-Nada! ¡No estaba haciendo nada!

—Oye, ¿no es ese Tucker?

En un parpadeo, Stan ya había ingresado a su habitación antes que tuviera la oportunidad de detenerlo, viendo a través de ella en la posición que estaba Tweek hace unos instantes. Ambos pusieron su atención al hombre en el edificio de al lado, quien estaba hurgando en una caja sobre la mesa que había situado debajo de la ventana.

Sus penetrantes ojos miraron hacia arriba por un instante. Tweek sintió su aliento atraparse en su garganta.

—Oh sí —Stan le hizo un gesto al chico del otro edificio—. Craig Tucker.