1

180 5 0
                                    

"Juguemos a las escondidas"

"Expediente 2002/ 11

Nombre: Williams Estefanía

Fecha de nacimiento: 17 de noviembre del 2037

Edad: 18

Estatura: 1,60 cm

Estado: Saliendo con '2000'

Nivel/Profesión: Graduada del Gregory Orange

Nivel de riesgo: 4,5/5

Punto débil: Sus padres, '2000', '2003', (Posibles alucinaciones)"

El día estaba soleado y el clima templado, mi reloj marcó las 12:29 así que corrí lo más rápido que pude hacia la entrada. El instituto, al cual estaba llegando tarde, constaba de 3 edificios que rodeaban una pequeña plaza que era una cafetería, como una "U", y en frente de esta había un gimnasio que constaba de vestidores femeninos y masculinos, una cancha múltiple, con sus respectivas gradas, y un escenario al final. Este último se separaba de los demás edificios con un gran pasillo, gigantesco pasillo, por el cual ingresábamos.

El instituto Gregory Orange, ha sido el lugar donde he estudiado los seis o siete años, realmente no recuerdo muy bien.

Este lugar se especializa en hacer personas competentes, la siguiente generación de líderes capaces de todo, o como sea que diga el folleto, así que la presión y la competencia en este lugar es algo de lo que nos alimentamos a diario.

Todas las personas que estamos aquí, o por lo menos en su gran mayoría, somos vacas lecheras, o hijas de grandes vacas.

Al principio fue difícil para mí, me costó hacer amigos, la empresa de mis tíos apenas y era reconocida, por lo cual mi apellido tenía muy poca relevancia en ese lugar que estaba lleno de niños nacidos con una cuchara de oro en la boca. Pero para mi suerte conocí a Cameron, quien si tenía relevancia, por lo cual no tuvieron oportunidad de hacerme un blanco fácil, ya que él me defendía.

Poco a poco fui agarrando más confianza en mí, la empresa de mis tíos se fue al cielo, y con eso se me facilito hacer amigos y ser aún más expresiva en esta jungla que llaman instituto.

Pues si, después de que pude conocer más gente opte por empezar a hacerme conocer antes los directivos, hacer sentir mi presencia, por lo que me esforzaba aún más y entraba a concursos de literatura, me postule para presidenta de la clase, siendo promotora y rostro conocido entre los profesores y directivos, así que nadie más pudo meterse conmigo cuando escalé un poco más.

Y sé que dirán que mi vida es la mayor ventaja, padres ricos, familia renombrada y estudio en una prestigiosa academia junto a muy buenas notas, y es verdad, pero esos padres jamás están para mí, duermo sola por las noches y a veces los veo una vez cada dos semanas cuando nuestros horarios se cruzan, de esa familia adinerada solo conozco a mis tíos, a los demás los veo cada navidad para las fotos de revistas y noticiarios, y, en esta academia todo es tan falso como lo irreales que se ven ellos, además de la presión social y académica.

Mucha gente empezó a ingresar a este lugar con una beca especial, pero, como lo dije antes, se volvieron blancos fáciles. Por eso lo llamo jungla, porque es la ley de cazar o ser cazado.

A pesar de que nos movimos mucho en el tiempo el sistema jerárquico solo se hizo más fuerte, por lo cual respetamos, yo diría que hasta nos tiemblan las piernas, frente a alguien con más poder que nosotros y así es como todo ha sido, por eso esas viejas películas que pintan el futuro como un mundo tecnológicamente pacífico y diferente son pura mierda.

OutcomeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora