Save Me BTS (Namjoon y Tú)

Save Me | Capítulo 3

Ya es martes y no tenía ganas de ir a la escuela, pero debía si quiero tener una perfecta calificación para poder estudiar psicología. Carrera que seguro se me dificultara estudiar porque soy pésima estudiando y mi suerte del asco tampoco ayuda.

Me levanté de mi cama y me aliste para ir al instituto.

|Save Me|

Me tropecé con una roca de camino al instituto

— ¿Estás bien? — Escuche una voz, esa voz que la primera vez que la oí fue en mi casa. Me levanté y alce la vista para encontrarme con NamJoon — Deberías tener más cuidado.

Estaba herido, tenía el labio roto y el ojo izquierdo morado, más unos rasguños en su mejilla.

— La verdadera pregunta es ¿tú estás bien? — solté sin pensarlo, aunque no conocía del todo su estado era preocupante.

— ¡Ah!, sí —  respondió con una sonrisa, que rápidamente cambio a una mueca seguramente por el dolor de su labio. Mueca que también intento borrar rápidamente de su rostro pero que logre notar.

— será mejor que limpiemos eso — me levante del suelo y  tomé su muñeca. él no se negó y me siguió.

Llegamos a una farmacia cercana; me adentre y tomé alcohol, un paquete de curitas, algodón y un agua fría. En ningún momento hubo un intercambio de palabra y sentía como el chico me miraba tranquilamente en silencio.

— ___, no debes pagar eso — Finalmente hablo cuando estaba a punto de pagar — yo lo hago — Vi como sacaba su billetera

— Gracias, pero no — Interrumpí su acción entregando el dinero a la cajera antes que NamJoon dijera algo más o le diera su dinero a la chica que se encarga de cobrar.

— Gracias por su compra y tengan una linda mañana — se despidió la cajera con una sonrisa y bajando su cabeza en forma de reverencia entregándome la bolsa con lo objetos antes mencionados.

— Debes ir a clases, yo me encargó — NamJoon intentando quitarme la bolsa.

— No.

Sin escuchar camine a una pequeña cafetería que estaba al lado, como sentí que me seguía no me detuve hasta sentarme en una mesa del exterior que tenia el local. Nam Joon también se sentó.

— ¿Cómo no te duele? — pregunte observado mejor su herida — Sí fuera por mi estaría ya llorando como a una niña de cinco años.

Me di cuenta como él chico contuvo su risa por mi comentario; pero cuando el algodón con alcohol tocó su labio herido la pequeña sonrisa cambio a una mueca de dolor. Le entregue una botella de agua fría a Nam para que se la colocará en su hinchado ojo.

— Pareces experta — Comento y logre notar un tono de humor en sus palabras.

— Esto no es gran cosa — respondí apenada — Mi mejor amiga es la que sabe de esto. Ella quiere estudiar medicina y casi siempre se cae — explique — A veces parece una niña pequeña.

— ¿Tu qué deseas estudiar? — Pregunto con un tono que caracterizo como curiosidad.

— Si me hubieran preguntado eso de pequeña hubiera respondido agronomía, pero ahora estoy más que decidida, quiero estudiar Psicología — Sonreí — Pero será difícil y quizá imposible.

— Si luchas por eso lo lograras - Dijo intentando animarme.

Al terminar las cosas las guarde todas en la bolsa entregándoselas

— Gracias por motivarme, pero yo vivo en la realidad y mi promedio es bajo para poder estudiar esa carrera — Obviamente no pude ocultar la decepción de mis palabras — Lo siento puede que sea un poco pesimista.

— Umn... eso está mal — guardo silencio — Si luchas por tus sueños se harán realidad y para eso debes pensar un poco positivo; solo tu puedes llegar a eso. Puedes cumplir todo lo que deseas siempre cuando te esfuerces y des lo mejor.

— ¿Tuviste sueños? — Pregunté interrumpiendo su conmovedor discurso.

— Sí — Respondió.

— Yo nunca tuve uno, desde pequeña vivo en la realidad y no en fantasía.

— Tengo una idea — Lo observe esperando sus siguientes palabras. — ¿Qué tal sí te ayudó?

— ¿En clases? — Pregunté totalmente confundida.

— Sí. Fui el mejor de mi clase — sonrió, al parecer le gustaba recordar esos días.

Después de un rato comimos helado y hablamos. El me contó que su sueño de pequeño era ser rapero, pero su padre no estuvo de acuerdo y que estuvo cerca de entrar a una compañía con SeokJin, pero su padre se lo impidió y decidió huir de casa y vivió un tiempo con el antes mencionado, pero que ahora vive con YoonGi, me comento que es más cómodo por el trabajo que tienen.

— ¡Que suerte la tuya!

— ¿Por qué? — pregunto con una sonrisa.

— Porque pudiste huir de casa, mi mama tiene mimado a mi hermanito mayor y la responsabilidad siempre cae sobre mis hombros.

— Pero deberías estar agradecida de eso, pues en un futuro nada te será imposible — dijo el moreno viendo un lado positivo.

— Necesito que alguien me salve de este mundo — Solté sin pensar cuando vi el cielo; eso me relajaba cuando me sentía mal.

Sentí la mirada de Nam en mi, pero me daba igual, ya estaba la decaída ___, la que le valía madres sí hablaban mal de ella, la que sonríe falsamente, la que debía ser la responsable.

— Creo que me tengo que ir — Finalmente interrumpí el silencio.

— Lamento sí hice que te sintieras así — se disculpo y realizó una reverencia en señal de disculpa.

¿Sé disculpo?, ¿Por qué se disculpa por mi animo?

— No te disculpes, son sólo decaídas que vienen debes en cuando. Las caídas no son tan malas, a veces están bien — luego me despedí.

Volví a casa deprimida, y no pude dejar de pensar en ÉL, Kim Nam Joon.