El Círculo Está Completo

El Duelo

Vader sintió la presencia de su antiguo maestro, sabía que era el momento y se dirigió a buscarlo. Era el momento que tanto había esperado, después de 19 años al fin cobraría venganza por su derrota en Mustafar, pero había algo que lo detenía: el miedo. Durante todos esos años Vader guardó un rencor tremendo hacia Obi Wan, pero también un gran miedo, pues fue él quien le cortó tres extremidades y lo dejó al borde de la muerte.
Lo encontró. Ya no era el poderoso y temible Jedi de la era de la República, ahora era un anciano, un anciano al que no le quedaba mucho tiempo de vida, esto sin duda sería un punto a favor de Vader, pero él tampoco estaba en buenas condiciones para batirse en duelo.
Se vieron frente a frente, ambos con los sables encendidos.
—He estado esperándote Obi Wan, volvemos a encontrarnos— dijo Vader. El círculo está completo, cuando te dejé yo era el alumno, ahora soy el maestro.
—Eres maestro del mal, Darth— respondió Obi Wan.
Vader no sabía si eso era una burla o algo por el estilo que su antiguo maestro lo haya llamado por su rango Sith.
En eso momento, Obi Wan lanzó la primera estocada, solo con eso, Vader supo lo mucho que le habían afectado los años, pero aún así seguía sintiendo miedo y atacaba y defendía de la manera más discreta posible, aunque no dudó en lanzarle una estocada agresiva, que sería esquivada.
—Tu poder es débil anciano.
—No podrás ganar, si me abates me volveré más poderoso de lo que puedas imaginar.
—No debiste regresar.
Vader cambió de forma de combate y empezó a empujar a Obi Wan hasta el final del pasillo, donde intentó otra vez con estocadas agresivas, pero fueron detenidas. En ese momento llegaron stormtroopers a donde estaban, y misteriosamente, Obi Wan alzó su sable y se dejó vencer, pero lo único que cayó al suelo fueron su sable y su capa, ningún rastro de cuerpo.
—¡NO!— se escuchó al fondo. Era un chico de unos 19 años de edad, los stormtroopers le empezaron a disparar y él correspondió al fuego, unos segundos después abordó la nave en el hangar junto a otros seres y salió a velocidad de la luz.
Vader no alcanzó a identificar quienes eran aquellas personas, pero dedujo que Obi Wan se había sacrificado por ellas, así que llevaban algo crucial entre manos.