Esta es la cancion que segun yo Joel cantaba :v. (Escúchala mientras lees si quieres)
Jooandri
19 y 19 años.
Luego de la larga pero productiva conversación que le hizo gastar a Zabdiel un poco mas de dinero por el pastel. Joel y el salieron en direcciones diferentes, ellos prácticamente Vivian en la casa de Erick pero aparte de eso tenían casas que ver, y en el cazo de Zabdiel una gata. Lola
Decidieron que se verían en la universidad para ellos ver que iban a hacer con el futuro amoroso de Joel. Cosa que por ahora Joel no quería discutir mucho.
Zabdiel decidió que por ahora no iría a su casa por que Lola se había ido de viaje con unos amigos, y la casa sin ella no es la misma. Así que decidió que seguiría donde Erick. Por el momento.
Por otra parte Joel si quería ir a casa, para ver a Yoandri, lo tenia un poco abandonado desde que se re–encontró con Erick. Quiso comprarle un trozo pastel de fresa ya que sabía que era su favorito. Y Yoandri nunca ah rechazado ningún pastel de los que Joel le regalaba, y se lo quería dar, como una especie de disculpa... Por la ausencia.
Caminaba por las cuadras tarareando una canción que escucho de auto que pasó por su lado, no tenia idea que era lo que cantaba pero, era muy pegadiza. Estaba feliz, era raro por que después de confesarle a Zabdiel lo que sentía por Erick, ¿se sentía así por que Zabdiel lo ayudaría a terminar con Yoandri? O ¿Por qué al final lograría estar con el amor de su vida después de tanto?.. Absolutamente no es por eso. Solo se siente así por que de sus hombros callo un enorme peso. Confesar un amor con esos años de antigüedad no era nada fácil, y nada mejor para disfrutar de esa libertad que; llevarle pastel a tu novio, que ya no amas, y tararear algo de música Argentina.
Al cabo de como nueve repeticiones de la misma parte, Joel ya estaba parado en frente de su casa buscando la llave que abre la puerta de su casa. Tenía un poco de prisa y al tratar de intentar una llave que no era la del cerrojo entrara las llaves se deslizaron por la puerta hasta el suelo. Joel maldijo por lo bajo y dejo el pastel en un pequeño muro, para que no tocara el suelo. Y se inclino para recoger las llaves, palmeaba por el pequeño espacio que había entre la puerta y el suelo, donde para su suerte fue donde la llave callo.
No estaba teniendo mucha suerte al obtener las llaves. Aunque sus dedos entraban con facilidad los anillos que traía en prácticamente todos los dedos le limitaban el alcance, decido quitárselos uno por uno mientras decía como los obtuvo.
–El que me regalo Yoandri–dijo sacándose el anillo de dedo medio– El que tengo con Erick –se saco el del anular–Y el que le robe a ese chino en el metro–dijo sacándose el del pulgar y colocándolo sobre el pastel–
Luego de colocar los anillos, Joel se inclino nuevamente para buscar las llaves. Palmeando de un lado a otro sin conseguir nada más que ensuciarse los dedos con el polvo que allí había.
–Solo son unas llaves ¿Por qué tanto alboroto Joel?-se pregunto a si mismo, al sacar los dedos de debajo de la puerta–
Un poco frustrado se levanta y gira un poco para ver si la llave, que aunque el vio que callo debajo de la puerta, simplemente quería estar seguro, y al darla encontró la llave en la esquina mas alejada de donde el se encontraba Joel. Sonrió mientras giraba los ojos, estaba feliz de encontrarlas, pero creía que estaba debajo de la puerta, por suerte ya la había encontrado así que ni importaba.
Volvió a colocarse cada anillo en donde iban, toma las llaves y se aseguro de tomarlas con mucha fuerza para que no volviera a pasar. Joel volvió a tararear aquella canción que hasta donde sabia solo decía "Rebota", en eso pasa un vecino que conocía.
-Hola, Joel– lo saludo con una sonrisa–
–Hola, Daniel ¿Cómo estas?- saludo de la misma forma–
–Bien gracias, oye ¿vas a salir?-pregunto, y Joel no entendía por que desde ayer en la mañana que no esta ahí–
–No, vengo llegando desde ayer en la mañana que no vengo–dijo y el chico frunció el seño, algo que a Joel no le terminaba de encajar. ¿Qué sabia este chico?- ¿por?
– ¿Enserio no estas aquí desde ayer en la mañana?-pregunto y Joel asintió repetitivas veces– Entonces de quien eran los ruidos de anoche O quien se los causaba a Yoandri...
-¿A Yoandri?-pregunto y el asintió– ¿Qué ruidos?
–Gemidos–dijo y Joel abrió los ojos como platos–
– ¿Gemidos?-pregunto y el chico asintió. Era obvio saber lo que pasaba– Creo saber de donde los causa, o mejor dicho quien los causa–dijo y inserto la llave en el cerrojo– Gracias Daniel, ten, te lo ganaste–dijo y le entrego el pastel que había comprado para Yoandri–
–Oh, gracias...-dijo y Joel asintió y entro a la casa tratando de hacer el menor ruido. Eran las 9:40, y si tuvieron la gran noche del mundo debería de estar cansando–
– ¡Yoandri!- llamo, pero no respondió– ¡Yoandri!-grito y luego de unos minutos salió Yoandri en nada más que bóxer. No le sorprendió, aunque era fanático de pijamas largos y holgadas. Esto respaldaba lo que dijo Daniel –
–Hola, cariño–saludo Yoandri desde lejos–
– ¿Por qué no traes tu pijama?-pregunto yendo directo al punto–
–Ah, hacia mucho calor–respondió un poco cansado–
– ¿Por qué estas cansado?, por lo que veo acabas de despertar–continuo con lo que parecía un interrogatorio–
–Tu llamado hizo que me despertara de golpe y sabes que no soy bueno para el ejercicio–dijo colocando un brazo en la pared para recuperar el aire–
–Claro, tengo hambre ¿quieres que te prepare algo?-pregunto ignorando la mentira–
–Por supuesto, solo deja que valla al baño– dijo y corrió adentro del cuarto y cerro la puerta... con llave–
–Ay Yoandri yo deje de chuparme el dedo a los 7–dijo un poco frustrado. El nunca le mintió a Yoandri y siempre hacia lo que el quería y no entendía por hizo eso– Y recuerda que el que quería que ambos tuviéramos una llave de cada puerta eras tu.
Joel dejo aquello que ni siquiera había empezado a ser, camino a donde colocaban las llaves y tomo la suya, le puso candado a la puerta del frente... solo por si pasaba lo que el temía. O mejor dicho, lo que esperaba.
Camino prácticamente arrastrando los pies para que Yoandri no lo escuchara. Se acerco lo más que pudo a la puerta para tratar de saber, si estaba con alguien o si estaba hablando con ese alguien, para su suerte escucho algo.
–Si, acaba de llegar, esta en la cocina–se escucho vagamente a través de la puerta. Parecía estar hablando con alguien–
–Ya me arte–dijo y abrió la puerta y hay estaba Yoandri– Yoandri ¿Qué haces?-pregunto molesto y Yoandri sabia que ¿Lo habían atrapado?-.
