༒ 2. Voz de la razón ༒

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El camino fue largo y tortuoso para todos, ni Reaper ni Geno podían hacerlos callar y cuando lo lograba ese silencio solo duraba dos o tres minutos como máximo. El solo ya se había ocultado y les faltaban al menos dos horas para llegar, si Reaper no hubiese tardado tanto aun tendrían algo de luz durante el camino, pero ahora solo había oscuridad y en medio de la carretera eso era espantoso.

Por un instante, Geno pensó que con esto y lo había visto todo, no había nada peor que estar atrapado en un autobús con un montón de estúpidos niños en medio de la carretera. Sí, el autobús se había tenido. Se había quedado sin combustible y poco a poco ese se fue deteniendo dejándolos la deriva

Geno quería morirse en ese momento.

— ¿Por qué nos paramos aquí? — Cuestionó Epic mirando hacia fuera confundido al ver solo árboles y más árboles.

— ¿Por qué estamos aquí? — Apoyó Fresh indignado con lo solitario y aterrador que se veía el exterior. Por ningún motivo planeaba bajar del autobús.

—Es donde los voy a dejar si no se callan. — Gruñó Geno levantándose de su lugar para ir directo hacia el conductor y discutir las opciones disponibles.

— ¿Que va a pasarnos?

— ¡No tengo señal!

— ¡¿Vamos a morir?!

— ¡Está oscuro afuera!

— ¡Estamos muertos!

— ¡¿Como llamaremos a alguien?!

— ¡Voy a vomitar!

— ¡Quiero hacer pis!

— ¡Ahh!

Ink dio un último sorbo y dio por terminada su bebida, si no mal recordaba había visto una estación de gas unos cuantos metros atrás, no creía que estuviera muy lejos, se puso de pie con su mochila en el hombro y caminó hacia la puerta para bajar del vehículo sin que Geno o cualquier otro lo notara.

A excepción de Error que lo siguió con los ojos a través de la ventana, no iba a decir nada, pero si a Ink le pasaba algo y él no lo impidió entonces no obtendría ese certificado de "buena persona" y lo echarían. Por supuesto que no podía permitirlo así que tuvo que seguirlo.

—Ink, ¿a dónde vas? — Afuera se amortiguaban un poco los gritos de los demás, eran más fuerte el sonido del viento y los grillos que hacían a Error sentirse incómodo.

No había hablado con Ink en mucho tiempo, por un momento creyó que ya no asistía a la escuela, por eso le sorprendió mucho verlo ahí. Quizá también estaba por el exceso de faltas que tenía.

Error sabía que Ink lo escuchó, pero al parecer lo estaba ignorando. —Ink, vuelve aquí. Nos van a atropellar a los dos. —Volvió a ignorarlo y Error suspiró. —...Así nunca obtendré mi certificado.

Tenía que ser racional, la última vez que fue impulsivo las cosas no salieron muy bien. Lo cierto es que ni siquiera debería estar hablando con Ink así que regresó a buscar a Reaper.

—Ink acaba de irse.

—Olvídenlo, hay que dejarlo aquí. — Soltó Nightmare bajando del vehículo. —Pidamos un aventón al próximo coche que pase. — El resto lo siguió afuera con las linternas de sus celulares encendidas.

—Alguien debería ir a buscar a ink, no puede andar solo por la autopista.

—Si es inteligente conseguirá un aventón antes que nosotros. 



Aun cuando estaba bastante alejado del autobús podía escuchar el eco de los gritos de los muchachos y algunos golpes a laminas o algo parecido pero prefería concentrarse en ver si podía escuchar algún auto cerca o música que le indicara que estaba cerca de la estación, con la linterna se daba paso al camino, pero estaba alumbrando el suelo más que el camino.

De la nada una luz detrás de él alumbro su camino en un solo parpadeo, se volteó indiferente mirando al moreno de lentes con su celular en la mano. Al final se había decidido por acompañarlo. No sonrió, aun que sentía ganas de agradecerle por su ¿apoyo?

— ¿Sabes a dónde vamos? — Preguntó, Ink asintió con la cabeza. — ¿Cuanto falta? Odio las caminatas largas. —Ink alumbro con la lampara de su teléfono una señal que indicaba que había una gasolinera a unos metros.

—Bien, más vale que esté en servicio o me muero.



Error hablaba con uno de los empleados de la tienda mientras Ink esperaba afuera en la banqueta tomando café, sabía amargo, asumía que debía ser un café viejo. Como mucha gente no suele pasar por aquí seguramente no cambiaban el café seguido, aún así había rellenado su termo.

Cuando se giró vio a Error hablando por teléfono, lo más probable es que estuviera tratando de encontrar una forma de contactar a alguien que ayudara a sus amigos varados. ¿Y qué mejor que la policía?

No pasó mucho tiempo para que los coches policiales y una grúa llegaran a la estación remolcando el camión para poder recargarlo de gasolina.

Ink hubiera preferido que el motor se hubiera dañado o algo peor, así no tendrían que emprender camino de nuevo. No quería estar ahí, pero Geno no perdonaba, no tenía preferencias por nadie y todos sufrirían por igual mientras estuvieran bajo su supervisión. 


Tonight ↠ SanscestDonde viven las historias. Descúbrelo ahora