La verdad es que no me esperaba encontrarmelo ahí, no se ve de la clase de chicos que sale junto a su hermano.
Llevaba unos jeans oscuros, zapatillas anchas y una chaqueta roja. Iba peinado de la misma forma que las dos veces que lo habia visto, con su pelo tirado hacia atrás y parado. En ese momento me percate que tenía aros en las orejas, uno en cada una. Crei que eran pequeños expansores. Yo no le encuentro ningun parecido con su hermano, no se parecen en nada.
- Esto de verte siempre, me esta cansando – dije – Van tres veces en el dia.
Hizo como si no hubiera hablado – ¿Saliste a despejarte con tu otro novio? – pregunto divertido – Que yo me acuerde el chico del balcón no tenia rulos – dijo señalando hacia donde se encontraba Harry.
- Algo me decía que no tenia que venir a este lugar, tienden a venir la gente estúpida – le conteste.
- Tenes razón, es por eso que viniste aca, para juntarte con los de tu especie – dijo mientras comenzaba a jugar a los bolos. ¿Por que seguía hablando con el? Estaba por irme pero continuo hablando – Veo que tu noviecito ruliento conocio al idiota de Louis – que observador - Ese si es de tu clase, bien estúpido.
- Si te crees tan superior a el, ¿por que estas aca? - pregunte.
Se encongio de hombros – Yo dije que viene gente estúpida, pero debo admitir que los juegos son muy buenos – dicho esto hizo una chuza.
- ¡¡Chuzaaaaaaaaaaa!!! – exclamo, alzando los brazos con aire triunfante – Te la hubiera dedicado pero solo lo hago con las chicas rubias.
- Es decir que te gustan las chicas sin cerebro…
- Lamento decirte que no me gustas – insinuo – Sos un claro ejemplo de morena sin cerebro.
- Otra vez opinando sobre mi sin saber nada – dije – A propósito, eso no fue realmente una chuza. Se supone que debe hacerse de un solo tiro, y vos lo hiciste en dos
- Vamos a ver como lo hace una profesional entonces – me reto, entregándome una bola.
La tome muy firmemente y la arroje a los pinos con decisión, haciendo la chuza de un solo tiro.
- ¡Sii! ¡¡Eso si es una chuzaaaa!! – dije triunfalmente. Mire a Zayn, que miraba atonito los pinos caidos.
- Seguramente tenia algo la bola, debe ser mas pesada que las demas – se excuso – Una pregunta, zorrita, ¿como es tu nombre?
- ¡Deja de llamarme asi! ¡No soy ninguna zorra! – le grite en la cara. El, sin embargo, se limito a rodar los ojos – Me llamo Zoey.
- ¿Zoey? No podía haber un nombre mas de zo… - se detuvo cuando vio mi expresión – Perdon.
- ¡No puede ser! – exclame, haciendo que se sobresalte.
- ¿Que?
- ¡Dijiste perdón!
- Muy graciosa. Yo soy Zayn.
- Ya lo sabia – dicho esto me arrepentí totalmente, ¡no tendría porque saberlo! Se pensara que lo estuve espiando o algo asi.
Alzo las cejas – ¿Como que ya sabias? Nunca te lo había dicho.
- Cuando llegaron hoy al barrio estaba en la ventana y escuche que tu padre te llamaba asi…
- ¿Asi que espias por la ventana eh? Como las viejitas chusmas del barrio, ya veo porque sos tan amargada – dijo – Por cierto, lindo peluche – señalo al perro que yo sostenia.
