-Siempre tengo el mismo problema si tuviera que darle el inicio a una historia, ¿cual sería el momento indicado para esta?... supongo que el inicio y el final son importantes, aunque lo que realmente le da forma es el desarrollo y ahí debe de estar lo más significativo-
-escribir es una forma de expresarse, quizá no todos los que escriben las publican, supongo que hay historias maravillosas, solo que el autor no se animara a compartirlas y es una pena. Nos debemos de estar perdiendo de cosas maravillosas... aunque a lo mejor... quien sabe, una reseña mala queda más grabada que las otras diez que felicitan tu esfuerzo... el ser humano es bastante masoquista no lo creen?-
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Si tuviera que darle inicio a mi historia... creo que la pondría en mi nacimiento, al fin y al cabo ahí todo inicio... veamos...
Naci un día de otoño, no creo que realmente importe cual... dicen que ese día llovió como ningún otro y que al nacer ni siquiera llore, en la habitación estaban... no creo que importe tampoco. La relevancia estaría en quien faltaba, mi padre estuvo ausente, nadie supo porque, y no creo que quisieren preguntarle. Creo que desde un inicio las cosas de la "familia" estaban mal, pero mi madre fingió no notarlo.
Creo que allí es donde parte de mi vida empezó a salir mal...
Al año y meses nació mi hermanita, una monada de ojos avellana y cabello azabache, al igual que en mi nacimiento nuestro padre no estuvo, el hombre era una bala perdida. Supongo que eso atraía los ojos de mi madre.
Luego de unos meses el desapareció, no sin antes darnos una paliza. Nunca más supe de el... para serles honesto, alguna que otra data escapo de los labios de mi madre, pero en realidad ella no parecía querer hablar de ello y yo no sentía curiosidad tampoco.
A lo largo de mi vida conocí a varios novios de mi madre, aunque ninguno duraba demasiado, cada uno de esos hombres, no servía ni para tirar palo al agua, no lo digo para ofender, sino para demostrar mi punto. Luego del quinto, ella nos echo la culpa a mí y a mi hermanita. Cabe resaltar que éramos niños, pero ella, prefería remarcar que era culpa nuestra que sus romances fallaran.
A medida que crecí, no obtuve lazos de unión realmente fuertes con mi madre, mi hermanita por su parte, de alguna forma los consiguió, y para serles franco, realmente lo envidie. Era algo que realmente llamaba mi atención ¿Qué podía ser que tuviera ella, que yo no?. Supongo que en esos momentos de la niñez comencé a realizar en mi mente, que mi hermanita era mi rival, aunque... la batalla había sido perdida hacia largo tiempo.
Para mi adolescencia el mundo del que apenas poseía control, había salido de mi alcance en un abrir y cerrar de ojos.
Creo que cabe desatacar que observando a mi yo pequeño, me arrepiento del pensamiento de haber querido crecer, supuse que al hacerlo, mi vida sería otra, que al igual que la gente de la televisión podría cambiar el mundo y que todo seria color de rosa o azul... amarillo y lo hacemos neutral?.
En mi imagen mental de niño me imaginaba como alguien fuerte, bueno en los deportes y en los estudios, con un millón de amigos. Pero a medida que crecí, todo salió al revés, como si yo viniera buscado oro y encontrara cobre. No resulte bueno en los deportes, los estudios no eran realmente lo mío, y amigos... a medida que crecí me di cuenta que mucha gente decía de ser tu amiga y te apuñalaban por la espalda, asique mis amigos, a los que considere y considero familia se pueden contar con los dedos de las manos.
Mmm... al parecer estoy quedando en un monologo, y a riesgo de que lo consideren una crítica a todo lo malo que salió en mi vida me voy a adelantar, no porque lo que pasara no fuera importante, sino para que no se aburran.
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Cuentos de Sueños Muertos
De TodoBueno, aquí están, una serie de cuentos, a los que voy a dejar el final, a la libre interpretación del lector. Espero los disfruten