Pasan los días... Y todo a mi alrededor se convierte en un juego, dije siempre que iba a hacerlo, desde que el ya no está, ahora esta planeado para que todos vean que yo soy ese guerrero que prometí que sería y que haría feliz, pero en este juego del que soy parte no tomo prisioneros, sé que todo iba a cambiar, incluso los amigos que conocía antes de que todo esto me sucediera.
Comenze creyendo que era el más grande y fui estupido sabiendo que soy uno mas el cual sintió desprecio. Mi vida nunca va a ser igual, porque con los sucesos vino un estatus diferente.
Ahí es cuando las cosas cambian, estoy comenzando a perder mi integridad.
A veces en vida sientes que la pelea ha terminado,y parece como los garabatos en la pared que resplandecían con esas firmas anónimas que decoraban los edificios o puentes, pero una vez que tu pintura se corrompa, es lo que llaman, la subida y la caída. Ahí es cuando subo cada escalón que quedó en ruinas tras la devastación que dejé de mis lamentos y pasaron los años y todo volvía hacerme sonreír. Mis amigos entre los cuales puedo escribir en tinta permanente sabiendo que no se irán... Y tras encontrar esa alma que a día de hoy hace latir mi corazón roto. Yo no pedí enamorarme después de tanto desamor. Pero mis ojos no hacían más que mirarla una y otra vez. Su belleza era una locura. La miraba desde la multitud y no paraba de hablar de lo que me hacía sentir. Su voz es tan increíble. Traté de enviar sus flores, Pero ella no tiene dirección. Traté de escribirla:
- Hola... no pensé que daría contigo que me harías sonrojar como un loco, pero dejame preguntarte... Tu solo dime si llegarás a la escena del crimen.
Eres el color que estoy sangrando y el que no quiero limpiar.
He tenido sabores, pero ninguno como el tuyo.
A dia de hoy sigues sacandome lo mejor de mi con tu sonrisa rogando un beso o una caricia. Tus ojos me gritan que te agarre y no te suelte.
