[CLEXA ] STARS

Convivencia

POV Clarke

Abrí los ojos algo aturdida sin recordar nada con claridad, el dolor de cabeza era algo insoportable, de pronto recordé lo que sucedió hace un momento con Leo, me invadió un escalofrió al ver a ese imbécil tocando a Lexa con sus sucias manos. Trate de incorporarme pero aún me sentía algo débil, pronto escuche a Leo decir:

- Mírame bien Lexa que esto será lo único que veras – Le decía apuntándole con el arma.

Quería hacer algo pero estaba inmovilizada por el terror que sentía en ese momento, después de eso todo sucedió tan rápido, el sonido de un disparo silencio el lugar , mi boca se abrió un poco dejado escapar un grito ahogado, sentía mis piernas flaquear. Entonces vi a Leo caer encima de Lexa.

-¿Estás bien Clarke? – Estaba en shock en ese momento que no podía responder con claridad.

-¿Clarke? – gire lentamente, Maya me miraba con preocupación.

Maya tu...- quería decir algo pero parecían que mis cuerdas vocales estaban nulas, mi vista se posó en su mano derecha donde sujetaba el arma.

En eso tome conciencia de lo que había pasado, mis ojos se llenaron de lágrimas, gire rápidamente y corrí hacia Lexa, quite a Leo de su encima, ella estaba desmayada, sus ropas habían sido bañadas en sangre, al verla así me ataque de nervios.

Lexa...Lexa... despierta por favor, no me dejes, yo te necesito – le decía mientras lloraba desconsoladamente.

Ella está bien, Clarke, solo se desmayó por la impresión- Escuchaba decir a Maya.

Si no llegaba a tiempo no solo sería Leo el muerto, Clarke será mejor que lleves a tu novia fuera de aquí yo me encargare del cuerpo. - Maya me decía esto mientras levantaba el cuerpo de Leo.

Pero, Maya si la policía viene, ¿Qué pasara contigo? – le respondía con preocupación mientras cargaba a Lexa.

No te preocupes por mí, ¿Quién buscaría a este bastardo? – me respondía sonriendo.

Lo más importante es que estas bien, prometí ayudarte, esto es lo máximo que puedo hacer por ti, lo demás solo está en tus manos.

En si no era un momento para pensar mucho o buscar alguna respuesta adecuada para decirle a Maya, pero hoy se había firmado una deuda entre ambas.

Gracias – le dije antes de salir con Lexa.

Salí de la iglesia, tome un taxi, el chofer me pregunto si quería que fuéramos al hospital, pero sabía que Lexa estaba bien así que decline su oferta afirmando que mi novia estaba bien y que solo necesitaba descansar, al llegar al departamento, la cargue delicadamente, Lexa era liviana de peso así que no tuve problemas en dirigirme hasta mi habitación donde la recosté lentamente.