Los Vengadores tienen un problema qué se llaman bebés.
Gracias a la paciencia y dedicación de Tony y Bruce Banner encontraron la forma de a partir de un óvulo creado por tejido humano y las microcelulas consiguieron crear vida. No artificialmente pero si un ser humano sin la necesidad de una mujer de por medio. Desde que a Tony Stark se le metió en la cabeza tener hijos con su media naranja no hubo nadie que le parara hasta conseguir su objetivo.
Tan sólo mezclando ADN de dos sujetos es lo único que se necesita para conseguir crear humanos a parir de la ciencia. Algo qué él propio Edward Stark en su monto creyó imposible de lograr. Pero, gracias a las nuevas tecnologías y gracias a la ayuda externa, o sea Shuri y los materiales de Wakanda, sé hizo lo que se creía imposible.
La felicidad no cabía en el pecho de Tony, que su orgullo mezclado con la mayor adrenalina por conseguir crear el mejor inventó revolucionario de su época.
Y el primer humano en probarlo no fue un sujeto al azar cómo lo fue el capitán América, sino que el mismo se ofreció voluntario con un éxito asegurado. Mezclando su propio ADN y el de su actual pareja; Steve Rogers. Consiguiendo un desarrollo completo cómo si hubiera estado en un vientre real.
La vigilancia constante fue necesaria por si hubiera alguna complicación como en algún embarazo llevado con una mujer, pero sorprendentemente no hubo nada parecido, es más la falta de ellos dio lugar a una nueva generación de humanos a partir de óvulos artificiales.
Se difundió la noticia y la gente de clase alta con problemas de infertilidad o con parejas del mismo sexo empezaron a contactar para conseguir un hijo sin recurrir a un vientre de alquiler o inseminación.
Cabe aclarar que tuvieron un niño; el pequeño heredero de las industrias Stark, Peter Rogers Stark. Qué fue él primero de muchos.
Al dar la enhorabuena más personas de la torre querían tener hijos...
- Felicidades Stark - le comenta Pietro - es un varón precioso - Tony aún con Peter en brazos se acerca a Pietro con una sonrisa.
- Igual que yo. ¿Verdad Steve? - aún ni con un bebé se le quita lo diva, piensa Quicksilver - por supuesto que sí mi amor - termina con un beso en los labios a su pareja mientras le pasa un brazo por los hombros.
No tenía palabras para describir la sensación que siente, una familia, una pareja que lo ama y la cereza sobre el pastel que es su precioso bebé. Estando con Tony jamás pensó que le daría una oportunidad para ser parte de algo más grande. Su propia familia. Pero con los Starks nunca se sabe que puede pasar. Y no cabe duda que se siente cómo si fuera alguien nuevo, y le gusta.
- Que empalagosos sois de verdad - comenta Natasha al fondo leyendo algo en un portátil que no consigue distinguir al estar lejos de su alcance visual. Aún así Tony se gira hacia ella - calla Romanoff que rompes mi momento de brillar - la pelirroja no le toma en serio a sus palabras y continúa con lo suyo, tecleando y de vez en cuando mirando la pantalla del portátil.
- Dirás el de Peter - Steve no evita que una sonrisa se le escape. Tony siendo el es simplemente encantador a su manera. Aunque sus personalidades chocan no cambia el hecho de que eso mismo es lo que mantiene su relación con ese fuego interior que está presente cada día que pasa juntos.
- Sí el de el también - le dice al capitán América. No es capaz de aguantar sus ganas de fardar por crear a su hijo, de el y de Steve. No desperdiciaria una oportunidad como esa para dejarlo en claro.
Pietro se revuelve en sus sitio. Está nervioso por lo que va a decir. Coge aire y va hacía Stark.
- Te quería comentar algo Tony - avanza Pietro hasta el odio del moreno - el viejo y yo estábamos pensando en tener bebés propios y me preguntaba si podrías hacernos uno con esa máquina rara de bebés - durante 15 minutos se escuchaba la risa de Tony ante la proposición del peliplata el cual estaba con un sonrojo claro en el rostro.
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No son tan malos [ Thorki/Winterpanther ]
FanfictionTony ha logrado crear lo que se creía imposible, ahora tiene un problema llamado bebés. Los hijos de los Vengadores se han puesto de acuerdo para llorar sin aparentemente ninguna razón y nadie ni nada los mantiene en silencio por mucho tiempo; hasta...