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— No ocultas nada, ¿verdad? — Anunció su llegada con una pregunta Adrián.

— ¿Qué cosa? — Respondió Axel. Mostró una mirada de confundido.

— Últimamente has estado actuando extraño —Se recostó en su pupitre como era de acostumbrarse.

— Problemas... — Suspiró algo cansado.

— Mario —Sonrió ladinamente.

— ¿Qué? — No entendía a qué iba todo esto. ¿Porque involucraría a Mario? algo aquí no encajaba y eso lo hacía sentir nervioso.

— Lo que quiero decir, es que siempre cuando estamos Montserrat, Mario, tú y yo, te acercas y de repente te alejas - Era mentira, al contrario él se alejaba en presencia suya.

— No estoy de humor para hablar — Se levantó de su asiento. Irritado de la situación, debió olvidar todo lo que había sucedido en el baño aquel día, pero su mente se lo impedía de una u otra forma.

Pues cada vez que se bañaba, tocaba las partes en la que las manos de Mario habían jugado con su cuerpo. Hasta llegar casi al punto de masturbarse con los recuerdos, ¿y qué podemos mencionar de sus sueños?, al día siguiente despertaba y en su cama había una especie de liquido blanco pegajoso. Por esa razón se levantaba más temprano, para así tener tiempo de lavar la sábana y que su madre no se diera cuenta de lo posible precoz que podría ser su hijo.

- Como quieras - Con esto dicho se retiró. Sintió la mirada penetrante de Ferchy, pero aun asi decidio que seria mejor idea ignorarlo - Todo tuyo Ferchy.

- Axel, mírame a los ojos - Mencionó Ferchy, pues Axel había cambiado rotundamente ya que casi no hablaba con ella - Ya tiene mucho tiempo que no me hablas, ni siquiera me mandas whats. Dime, ¿qué está pasando contigo?

- Nada - Ignoró la pregunta, realmente no deseaba hablar en ese momento.

- Te dije que me miraras a los ojos - No quería verla. Sabía que estaba enojada y no tenía la suficiente fuerza para verla - Cuéntame - Agarró su barbilla para que apuntará su vista hacia ella.

-Me pelee con uno de mis amigos - Deliró para hacer más efecto a su venenosa mentira, no quería en lo más mínimo de su ser que ella supiera la verdad.

- Entiendo, pero yo también soy tu amiga. TU MEJOR AMIGA - Recalcó con algo de sentimientos encontrados - Me lo hubieras dicho desde un principio. Yo también tengo amigos pero le doy más importancia a mis mejores amigos.... En especial a ti y lo sabes mejor que nadie.

-Lo siento, se me olvidó. Es que estoy tan distraído últimamente que hasta del mundo me olvido - Le regaló un abrazo - Te prometo que no volverá a suceder - Le sonrió de la forma más sincera que pudo.

- Eso espero - Dijo con un respiro acompañado de algo de resignación - Me voy ahora, le dije a Carlitos que lo vería hoy.

- Si -  Le regaló de nueva cuenta un sonrisas.. pero esta era más falsa que la anterior,  pero con algo de empeño ya que su amiga Ferchy daba su mejor esfuerzo para hacerlo sonreír y sentir mejor.

Se levantó de la silla para dirigirse a la cafetería, su estómago rugía por comer, ya que en la mañana no había desayunado. Caminó con pereza por los largos y amplios pasillos de la escuela; conforme pasaba el tiempo se le hacía eterno llegar a su destino. Una vez ya en el sitio deseado, dejo caer todo su cuerpo en la silla, había una brisa rica y fresca. Amó eso, ayudaba a relajarlo y lo alejaba de todo el mundo y  de cierta forma de sus preocupaciones. Relajó sus pestañas, solo entonces sintió una paz reconfortante.

- Una hamburguesa de pollo, por favor - Pidió de manera amable.

- Aquí tiene joven - Le entregó su pedido una mujer no mayor de 40 años.

De regreso al salón revisaba su celular para ver si tenía mensajes nuevos, sin darse cuenta logró llegar al salon. Como era su costumbre se dirigió a su lugar, aun sin despegar la vista de su celular cuando en eso se topó con su amigo.... Mario...

- Mario - Dijo en un susurro, no era capaz de voltear a ver su cara sin que los recuerdos lo asaltaran.

- Chicos, vayan a las canchas para el simulacro - Se escuchó una voz femenina desde el la plaza cívica de la escuela.

Todas las personas que estaban dentro del salón salieron, quedando a lo último Mario y Axel, no fue por mucho tiempo, al final Mario decidió de igual forma salir del salón.


* Axel

Intenté acercarme a Mario pero todo era imposible, cada vez se acumulaban personas de diferente grupos, y lo perdía de vista. En varias ocasiones intenté agarrar su mano pero había algo que me lo impedía. Una vez centrados en la cancha, con más calma me acerque a él. Las ambulancias ya habían llegado para hacer el pequeño simulacro.

- Mario - Intenté agarrar su mano una vez más, pero él la alejó. 

¿Por qué?, porque me evitas Mario... Mordí mi labio para así controlar mis sentimientos, traté de controlarme, tal vez solo eran ilusiones mías, si eso era. Reafirme para mis adentros. Mi corazón cada vez latía con menos fuerza, me dañaba el saber de que él no me quería a su lado, el sentimiento logró hacer un nudo en mi garganta. 

Luego de unos largos minutos, la directora por fin anunció que nos podíamos retirar a nuestros salones para continuar con nuestros labores.

- Axel - Escuché que alguien me gritó desde lo lejos - ¿Porqué tan serio? - al aparecer era mi compañera de clase Cori.

- No nada aquí - Fuí interrumpido como era de acostumbrarse.

- Es que te veo muy desanimado - Le dedicó una sonrisa un tanto alegre - Bueno me voy, las chicas me están esperando - Dijo animadamente como era costumbre en ella

- Ok

Cori se alejó poco a poco dejando un aura de felicidad. Dentro de poco tiempo era hora de entrar a una materia de especialidad, solo tomé mis cosas y me fui directo al taller antes de que me pusiera falta el maestro.

Agarré el electrodo y me puse a soldar, no entendía cómo es que el profe decía que soldar es fácil, era una completa mentira. Sentí un calor en mi espalda mientras que mis manos iban siendo controladas, me iban guiando poco a poco y al parecer después de todo, soldar era fácil. Giré mi cabeza y al parecer era Mario, inconscientemente le sonreí. Me agradaba este ambiente. 

Pero estaba tomando mucha presión. Cuando en eso, varias chispas cayeron en mi mano haciendo que esta se quemara un poco, así que rápidamente me fui al lavabo más cercano a mi dentro del taller. Tiempo después el maestro se acerca mi un poco preocupado, me dijo que me fuera a orientación y me revisaran la mano, para evitar que el "accidente" fuera más grave.

Sentí como si Mario lo hubiera hecho a propósito, ¿por qué me estás atacando de es manera? es que acaso... ¿no  me quieres?

 Sentí un dolor fuerte en mi corazón de tan solo pensar que fuera cierto mis suposiciones, sin darle más rienda suelta a mis pensamientos salí del taller y fui directo a orientación.

  Al parecer solo fue una quemadura de primer grado, me pusieron una crema para poder calmar el dolor. De salida, caminé a mi salón, sin dejar de pensar.. 

No puede ser...  Mario está con Adrián, mi respiración se descontroló la posición en la que estaban no era para nada normal, entonces lo que sucedió en el baño... ¿Fue un juego?. Intenté mostrarme lo más tranquilo posible pero era imposible, todo estaba claro ahora. Mario no me ama, solo me utilizó como uno de sus juguetes; de eso no había duda. Tan solo quería llegar a mi casa, necesito un respiro de toda esta mierda.

😍....................

hi guys! ahora sí se calmó la cosa y entró el drama. por qué no?. espero y les haya gustado el capitulo.





✨ What he thinks about me? [BEGIN] ✨(+18) /Marixel \ ™  EDITADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora