Cosas que hacer antes de estar muerto

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Estaban en una plaza tranquila, el viento movía las ramas de los árboles suavemente, todo era pacífico, pero como siempre, alguien tenía que arruinar y este alguien no está muy consciente de lo que hace. Eran medianoche y no había mucha gente en la calle, una de esas personas eran Rubén y Adrián borrachos.

-Venga va Adrián, puedes caminar que ya estamos cerca de tu casa- decía Rubén cargándolo de un brazo dejándolo casi que arrastrando sus piernas en el piso.

-De verdad Rubén, me siento muy mal.-

Cuando le respondió no se pudo escuchar ya que llegó una carro patrulla y por el sonido de la sirena no se escucho.

-Mierda-Dijo en un susurro-Venga Adrián muévete-Adrián no podía más, se había desmayado y quedo en el piso.

-¡Adri, por favor Adri muévete!-Empezó a sacudirlo esperando que despertara pero fue inutil.Se empezaron a escuchar pasos acercándose-Lo siento- dijo para empezar a correr dejándolo sólo.

El policía llego con sus otros dos compañeros y les empezó a tomar el pulso, tenía el pulso muy bajo, estaba en riesgo de morir, así que llamaron a una ambulancia y en cuestión de minutos llego, se bajaron de la ambulancia y sacaron el desfibrilador para empezar a darle choques eléctricos pero no funciono.

-Este chico esta demasiado drogado-dijo para después montarlo en la camilla y llevarlo a la ambulancia.

Todo había quedado tranquilo, no quedaba nadie en la plaza, o, bueno un Rubén casi desmayado del susto sentado en el piso apoyado en un tronco de un árbol desde donde observo todo.

4 meses después

Se escuchaba sonar el teléfono pero nadie contestaba:

-Buenas, soy Irene deja tu mensaje después del tono- dijo la contestador automático.

-Buenas tardes- Dijo una voz grave- Le llamo para avisarle que usted, Irene Calvo ha pasado la prueba, la queremos en nuestro equipo. Cuando escuché este mensaje por favor devuelvanos la llamada.- Corto la llamada.

En la habitación estaba Irene durmiendo plácidamente hasta que llego alguien abriendo la puerta de golpe y despertandola sin querer.

-Perdón- Dijo un chico Moreno de pelos rizados, no tenía ropa, sólo una toalla amarrada a su torso.

Irene por el susto dio un salto en la cama pero se quedo sentada tapándose el pecho.

-Espero que no te moleste pero me he dado una ducha. Felicidades por el trabajo.¿De qué es el trabajo?- dijo mientras tomaba el bóxer y se lo ponía.

-Perdona que no te lo haya preguntado anoche pero con el ruido del bar no alcance a preguntártelo ¿cuantos años tienes?- dijo curiosa e intentando evitar la última pregunta.

-19- dijo algo nervioso.

-Mierda-murmuro-además de alcohólica, pederasta- dijo en burla pero al mismo tiempo avergonzada de sí misma.

El joven empezó a observar la habitación, su mirada se fijó en la mesa de noche, había una foto de Irene con un chico abrazados, lo extraño era la cabeza del chico, no estaba...

-Que curioso- pensó- ¿El de la foto es tu novio?- dijo señalándolo.

-No... Bueno, s-si- dijo tartamudeando, tratando de explicar mientras recogía la ropa tirada en el piso por la noche anterior-Quiero que los hombres piensen eso, que es mi novio y si estoy tan dolida como para cortarle la cabeza, creerán que sólo lo hago por despecho y no se hacen ilusiones-dijo explicando y riéndose por la cara del chico.

Narra Blanca

-¿Necesita ayuda con algo?- dijo Blanca preguntándole a una señora robusta y bajita.

-Si, necesito algo que me ayude a distraerme en el trabajo para no estresarme.

-Oh, bueno aquí tengo unos muñecos de cuerda- dijo mientras los señalaba- a mi siempre me divierten mucho así que tal vez le sirva.

Mientras Blanca hablaba con la señora el teléfono empezó a sonar.

-Disculpa, deme un segundo y la sigo atendiendo- dijo mientras se alejaba- ¿Aló? Si, soy yo... ¿En serio? No lo puedo creer, mañana estaré ahí, gracias-dijo gritando ya que no había mucha gente en la tienda-No lo creo, conseguí el trabajo de mi sueños.

Al día siguiente

Física o químicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora