Chloé Ailén.

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Mis padres y yo nos mudamos hace una semana a este pueblo tan a la deriva. Sin embargo es un lugar muy lindo.

Pero.. Como toda persona en un lugar nuevo todo es un poco raro.

No conozco a nadie y odio estar encerrada en mi cuarto, Es estresante.

-Hey, Pá!. ¿Que harás hoy?

-Tengo que ir a ver como van los arreglos del taller. Necesitamos cuanto antes comenzar a facturar.
¿Por que Loe?

-Mi papá me a dicho así desde que mi hermano de 6 años aprendió a hablar. Bueno, Me corrijo, desde que estaba aprendiendo a hablar, ya que le costaba decir mi nombre y solo decía "Loe".-

-No, Nada.. Solo quería salir a pasear un rato.
¿Y Jamir y mamá? -Jamir es mi hermano.-

-Salieron a comprar los ingredientes para la cena, hoy es lunes de comida italiana, recuerda.

-Cierto.. -Mi rostro hacia notar lo aburrida y estresada que Estaba.-

-¿Quieres venir al taller conmigo Loe?
Haber si así quitas esa cara..

-No lo se papá, No me siento cómoda en esos lugares. Aparte siempre me dejas sola y te vas a hablar de negocios.

-Lo lamento pero es mi trabajo, Venga vamos. Si dices que si te dejaré conducir  el Camaro de aquí al taller y de vuelta.

-Sabes que prefiero mi jeep, Aun que me gustaría probar la fuerza de tu consentido..

-¿Vamos? -Sonríe.-

-Mi papá tiene un Camaro Z28 del 67 modificado a lo moderno, es una vestía de gran motor. Yo le suelo decir el consentido de papá ya que siempre esta puliendo su pintura negra y sus lineas gruesas de colores grises. se me hizo imposible decirle que no.

-Vale, Esta bien..

-Bien..
Deja término de sacar unas cuentas y nos vamos.

-Esta bien pá, mientras creo que revisaré el jeep.

-No te ensucies las manos de grasa Loe, No quiero que ensucies mi auto.

-Oh, Si claro, Como usted diga señor. -Sarcasmo.-

-Lo digo enserio!. -Fruncio el ceño.- 

-Vale, Vale tranquilo. No hay necesidad de molestarse, Solo bromeaba.

-bueno..

Sali de casa mientras papá sacaba sus cuentas, Entre al garaje y encendí el jeep, Revise que todo dentro del capo estuviera bien, revisé el aceité, todo lo demás estaba normal.  -Lo apague.-

-Hey pá!, ¿donde están las llaves del Camaro? Quiero ir calentando ese motor.

-En la mesa!. -Señala con su dedo la mesita del centro de la sala de estar.-

-Vale..
-Tome las llaves.-

-En 5 minutos nos vamos.

-Esta bien.

Entre al garaje, había pensado en limpiar el Camaro pero al parecer no hacia falta. Se me olvidaba que era el consentido de papá y siempre esta limpio.

Me subí al auto y procedí a encenderlo, me encanta la forma en la que ese motor ronca, revisé el aceite solo por rutina, Es costumbre.

Saque el carro y lo estacione frente a la casa, acelere el auto para que el sonido del motor le hiciera entender a mi padre que se apurara.

-Ya voy!. -grito desde la casa.- 

Mi mirada se perdió mientras miraba hacía enfrente, Había un árbol gigante y hermoso, sus hojas, el brillo del sol golpeando a estas y sus ramas, Mas el baile y la melodía de las aves, era hermoso. 

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⏰ Última actualización: Dec 23, 2018 ⏰

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