4. "the demon in your heart"

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Lo único interesante que podía apreciarse en el momento era el cielo nocturno, pues además de la infinidad de estrellas presentes el tenue brillo de la luz lunar reflejada en sus pupilas de alguna manera lo hacía sentirse acogedor. Hasta ahora viendo tal escenario pudo recordar nuevamente cuánto le gustaba estar así, tranquilamente en silencio mientras miraba la luna. Hubo varias veces en las que por esto le había hecho sentirse melancólico y triste. Seguramente a su vieja familia le hubiera gustado ver lo que él estaba presenciado...

– Si Yuu-chan pasa más tiempo a fuera es probable que podría resfriarse. – El rechinido sobre el metal contra el zapato de la voz conocía fue suficiente para que Yūichirō volteara hacia atrás siendo seguido por una leve sonrisa.

– Hoy no hace tanto frío como ayer, además me siento bien como siempre

– Conociéndote diría que me estás mintiendo, hasta acá podía verte tiritar. – A pesar de que ahora solamente tenía la camisa de mangas largas desabrochada del cuello para el supuesto frío no había sentido nada de lo que Mika le decía, aún así no se quejó cuando éste mencionado se había colocado detrás de él rodeándolo con ambos brazos dejándose llevar por ello pegando su cuerpo junto con el de Mika. Después de todo era difícil que pudiesen estar así siempre que quisieran – ¿Te sientes cómodo?

– Sip, es muy agradable~ – El azabache recostó su cabeza en el pecho ajeno, además de que estando en dicha pose podría seguir apreciando el cielo estrellado también observaría complacido el como la luz nocturna iluminará el rostro del rubio sin importar si esta sea poca o mucha, con cualquiera de ambas sabía que su querido se vería igual de bien.

Debido a que los demás muchachos del escuadrón de Shinoa y un par de adultos -uno de ellos perteneciente al grupo de la pelimorada- se hallaban plácidamente dormidos sabían que no debían de ser imprudentes, pues llamarían la atención de todos ellos y debían de darles una larga explicación del porqué estaban así de juntos dándose mimos entre ellos incluyendo el cómo y cuándo comenzaron con aquello.

   Y, aunque no lo quieran admitir, hacer este tipo de cosas a escondidas les dejaba una extraña adrenalina en sí y cada vez que tenían la oportunidad de hacerlo no la dejaban pasar, justamente como lo hacían ahora.

     – ¿Yuu-chan?

     – ¿Hm?

     – Lo estás haciendo de nuevo

     – ¿Ah? ¿Que cosa?

     – Estás volviendo a pensar sobre lo que dijiste esta tarde...

     – ...¿Cómo es que lo supiste?

     – Te haz vuelto muy obvio en estas cosas.

     – Puede ser, ¡pero esto no es exactamente como lo piensas!

     – Yuu...

     – Bueno bueno, sí, sí es eso... – Mikaela simplemente se limitó a dar un suspiro pesado.

     – Humano, demonio, serafín e incluso un vampiro no me impedirá que te siga amando.

     – Sabes bien que no soy ninguno de los que has dicho.

     – ¿Y eso me debe importar ahora? Aún sigo amándote a pesar de eso

     – ¿Desde cuando se te ocurre decir algo así?~

     – Fue algo del momento, supongo~ – Cariñosamente volvió a rodearlo con ambos brazos. – En fin, una vez más lo diré; eres el único a quien quiero y querré sin importar lo que seas.

   Los ojos esmeraldas de Yuu brillaron con intensidad.

     – Tú también eres el único.

   Lo que le siguió después de esta conversación no fue muy diferente pues seguían reflejando el amor que tenían por el otro, solo que esta vez ya no decían casi nada más.

   Después de todo esto, el ojiverde solo podía pensar en una cosa mientras seguía en los brazos de su amado;

   "Definitivamente encontraré la manera de volvernos humanos sin importar lo que cueste, te lo prometo."

赤い空; mikayuu week 2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora