{Detrás De Los Arbustos}» [태국]

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♡❝ hoy... encontré una bola de pelos❞

El pelinegro mantenía su ceño levemente fruncido, estaba llegando tarde a su primer día de clases, al parecer no había descansado completamente en sus vacaciones, y había dormido muy tarde a noche por su "pequeña reunión" que resultó ser una "pequeña fiesta" con películas y pizza que había creado su mejor amigo.

Ahora estaba caminando a paso rápido hasta el colegio, rogando que todavía no haya sonado aquella empalagosa campana, su ego era tan persistente que no permitiría que nada lo detuviera, no quería un negativo en su historial por llegar tarde.

ㅡ¡Hyung! ¡Tae Tae! ㅡEl pelinegro escuchó aquella cantarina voz proveniente de la persona quién menos quería hablar en este momento, sintió un pequeño tick en su ojo izquierdo al darse vuelta para encontrarse con la coqueta pero para el mayor ya molesta sonrisa del chico, el pelinegro vió ante sus ojos aquel negativo en su historial.

ㅡ¿S-si...? ¿Kevin Moon?~ ㅡReplicó irritado cerrando levemente sus ojos, por que sabía que aquel menor le reprocharía alguna cosa o le pediría algo con aquella insoportable sonrisa.

ㅡ¿Quiéres que te ayude en algo TaeTae hyung?~ ¿Quiéres por si acaso la contraseña del Wifi? ¿Necesitas algo? ㅡEl pelinegro aún con los ojos levemente cerrados arrugó más su ceño, este niño tramaba algo.

ㅡAgradezco infinitamente el querer ayudarme, p-pero llego tarde a clases, si me permites...ㅡExplicó rápidamente el mayor intentando seguir su camino, pero el menor lo interrumpeㅡ ¿Qué pasa?

ㅡOk, lo acepto, no buscaba ayudarte ㅡEl mayor abrió lentamente sus ojos por la confesiónㅡ Pero quiero ayudar a tú sabes quién pero... no sé cómo, estos días me ha estado diciendo que se siente mal sentimentalmente por alguien, y creo que tú tienes algo que ver en estoㅡ El menor bajó lentamente sus ojitos al suelo con algo de remordimiento en ellos.

El pelinegro abrió levemente sus ojos, no sabía sobre el pequeño interes del gafas por el peligris y tan sólo por aquella pequeña sospecha cierta alegría inundaba dentro de él.

El mayor conocía perfectamente al peligris y sabía acerca de sus problemas sentimentales, ¿porqué?, por que este chico, era uno de ellos.

ㅡCréeme, no tengo nada que ver con esto ㅡmintióㅡ y si me permites... necesito ir a clases. ㅡAlejó levemente al chico del camino para salir casi corriendo del lugar, posiblemente si corría llegaría unos dos minuto-

ㅡ¡Ay! ¡Ah, ah! Ay... ㅡEl pelinegro con modorra cayó desprevenido al suelo, después de sentir algo entre sus pies y perder el equilibrio por una roca o algo asíㅡ ¿Pero qué fué eso? ㅡSe cuestionó el pelinegro aún en el suelo dirigiéndo su vista al conejito que se retorció de dolor

Taehyung sintió una presión en su pecho no sólo por el susto, sino por lastimar a un tierno conejito con el pelaje marrón, lo observó un segundo más y logró percatarse de aquellos profundos orbes café y aquella patita levemente alzada por el golpe, este al parecer sintió miedo y intentó saltar para huír pero cojeaba. Sin ninguna intención de asustarlo, el chico se acercó levemente a este dejando su mochila en el suelo y lo cargó, sintiéndo como aquel pelaje rodeaba sus dedos por la infinidad de estos, creándo una cálida sensación en su barriga y sintiéndo cómo la sangre llegaba a sus mejillas, de no ser por el tíntineo de la campana, no se hubiera percatado de lo que venía haciendo desde un principio, y así fué, la campana sonó y una mueca en sus labios apareció, no quería dejar al conejito así cómo así.

Aún con el tierno conejito en sus delgadas manos y largos dedos buscó un buen lugar en dónde dejarlo, así que buscó rápidamente un buen lugar, y así su vista se dirigió hasta un pequeño jardín de flores y decidió dejarlo ahí.