El brillo en sus ojos

Parte 1 Vuelta a clases

Ya estaba cerca del colegio, se asoma al retrovisor para ver que el viento no le había dañado el peinado.Ya estaba entrando al aparcamiento del colegio y algunos chicos afuera la saludan. Amaba el regreso a clases. Augusto, su amigo de toda la vida se acerca a ella y la ayuda a bajarse del convertible negro.Ella cierra el auto y camina del brazo de su amigo.

--Por poco y te extraño-- Le dice en juego-- Hace mucho no te veía . Extrañaba esos ojos avellanas.

--Yo igual, amor, estos... Dos días sin tu presencia han sido terribles-- Ella sonríe y le da un fuerte abrazo. Augusto era un joven alto de familia latina, con la piel morena y el cabello castaño. Pero era muy atractivo, y su posición de capitán del equipo de fútbol le daba un cuerpo marcado

Aún estaba el mismo guardia de todos los años en la puerta y no había muchas caras nuevas aparte de los entrantes de primero. Algunos la saludaron. Ya conocía a la mayoría;aunque no a todos de palabra. Incluso algunos del personal la saludaban. Era muy conocida por ellos que la vieron desde muy joven.Casi nada había cambiado, los casilleros con los stickers, las paredes blancas, y la misma distribución de salones. Siempre daba atención a todos los detalles posibles. Aunque... Habían cambiado de lugar una cartelera, pero de resto todo estaba en su sitio.

Estaba feliz de volver a iniciar ¿Como no? Era bastante popular y su reinado aún no terminaba. Le quedaban dos años mas y un puesto de presidenta del consejo estudiantil asegurado por lo que restaba de tiempo. Además de pasar un mayor tiempo con sus amigos. A unos pocos salones, sus amigos reunidos hablaban de algo hasta que uno de ellos la vio,ocasionando que los otros lo siguieran.

--La princesa ha vuelto mas hermosa que antes-- Dijo Augusto, pícaro. Los demás lanzaron unas burlas y risas.

--¿Como está   todo lo mío?-- Dijo Lilian, o lils de cariño. La joven bajita, pelirroja de ojos oscuros que usa lentes por haberse dañado la vista leyendo tanto de noche.

--Feliz ahora que te veo-- dijo en respuesta a su amiga y le da un guiño.

--¡Pero que es lo que veo! una obra delos dioses-- Dijo Rabindra con su característico acento hindú.

Los chicos se acercaron a ella alegres.Definitivamente amaba a estos chicos, y los que faltaban.

--¿Donde están Beth y Leah?--Pregunto. Ese par no pasaba desapercibido ni en una multitud-- Sentí una extraña tranquilidad en el ambiente.

--Bueno... -- Dijo Augusto rodeándola con el brazo-- Beth perdió el vuelo de África, así   que vuelve la semana que viene. Y Leah... está   con su padre, quien sabe donde.¿Porque estás mojada?

--Debemos aprovechar esta paz momentánea-- Responde sin hacerle caso a su pregunta, estaba un poco húmeda por que cayeron unas gotitas de camino al colegio. Todos soltaron una risa por la cara asqueada de Augusto y la campana comenzó a sonar. Lils da unos pequeños saltitos y la abraza por el brazo. Nunca se aburría estando con ellos.

El salón estaba en las mismas condiciones, los mismos muebles, afiches, colgantes y demás. Sus compañeros también le dieron pequeños saludos; algunos le lanzaron besos. Hasta el profesor de literatura la saludo y Augusto pensó que era con el, a lo que le el profesor le dio una cara molesta. Se sentaron adelante como de costumbre, pero había algo distinto,alguien. A dos asientos detrás de ella estaba un chico nuevo de cabello castaño oscuro y piel pálida, no llegaba a verle bien el rostro ya que tenía   dos chicos de por medio, pedir permiso implicaría recibir bromas sobre él durante el resto del mes; pero se veía   atractivo. A su lado izquierdo, con un asiento de distancia estaba otra chica linda bastante similar, seguro eran hermanos.Aunque la chica  tenía  un aspecto que se le hacía similar.