Stupid →Peter Parker | Marvel

D o s

–¿Alguien ha visto a Parker?–Oli animadamente se colgó de la espalda de Ned llamando la atención a sus amigos.

–Ahora que lo dices no lo he visto, ¿Deberes en mallas?–Preguntó Jessica hacia Ned.

–Hubiera avisado.–Dijo Ned y Oli bufó, ya había pasado un mes desde que había vuelto a sus clases habitualmente y sumado a eso mucha más tarea.

–Debo ir por unos libros para la tarea de química, Parker no quiso ayudarme unas que aún no entiendo.–Se quejó Oli nuevamente mientras bajaba de un salto de la espalda de ned.–¡Los veo en el almuerzo!–Gritó corriendo hacia la biblioteca.

Al llegar allí fue por el libro que necesitaba, se encontraba en unos de los estantes de arriba.–¿Es broma?–Se preguntó ella en un susurro intentando calmar su enojo. Tomó el carrito dónde colocaban los libros para luego guardarlos en su respectivo lugar para subirse en el con sumo cuidado y alcanzar el libro necesario.–¡Ja! ¿Quién es la alta ahora?–Murmuró sonriendo para saltar al suelo.

Escuchó unas voces detrás de la gran estantería. Olivia movió unos libros para poder observar quienes de encontraban allí y sintió su mano hervir junto con su corazón.

–No es muy difícil si lo practicas.–Dijo Peter muy sumergido en el libro de matemáticas que tenía en sus manos.

–Aún sigo sin entender.–Se quejó la mismísima Charis.–No debería faltar jamás.–Murmuró ella.

La semana pasada miss perfección se ausentó toda la semana, pero no sabía que la rubia iría pedirle ayuda a su Peter.

Quiso lanzarle una llamarada en el cabello rubio teñido. Pero también quiso quemarle la cabeza y las partes íntimas del arácnido.

Se alejó de allí antes que hiciera una locura e incendiara toda la biblioteca.
Caminó con el ceño fruncido hasta su casillero, se iría a su casa no tenía ganas de lidiar con el idiota de Parker.

Tomó sus cosas y cerró el casillero con fuerza haciendo un estruendo.

–Calma rompe casilleros.–Dijo Justin a unos cuantos casilleros más allá.

–No es momento Higgs.–Pidió ella, necesitaba desquitarse con alguien pero el pobre Justin no tenía nada que ver en sus celos y en la constante estupidez de Parker.

–¿Mal día?–Preguntó él y Oli soltó una risa irónica.

–Si solo supieras.

–¿Helado de fresa y charlas profundas?–Preguntó él sonriéndole.

Olivia frunció el ceño.–¿Cómo recuerdas que me gusta el helado de fresa?

–Me acuerdo que cuando llorabas el helado de fresa era lo único que podía calmarte.–Él sonrió haciendo sonrojar a Olivia.–¿Entonces? ¿Vamos rompe-casilleros?

–Está bien, solamente iré porque tú invitas los helados.–Señaló ella caminando hacia la salida.

–Entonces Parker prefirió enseñarle a Charis antes que a su novia y no había dicho nada sobre ello, ¿Verdad?–Preguntó mientras bebía su batido helado. Olivia asintió ante lo que el muchacho dijo.

–Mhm.–Afirmó ella.–No me molesta que se relacione con más personas, es más, me agrada. Pero algo en esa chica no me cierra. No siento que sea totalmente de confianza.

–Ninguna chica te cierra.–Contestó Justin mirándola con una sonrisa Olivia abrió su boca para contestar pero el muchacho volvió a hablar.–Jessica no cuenta, Oli.

Luego de su helado y que Justin la llevara a su casa, se puso a pensar.
Bueno sí, Justin tal vez tenía razón. Tal vez era imaginación suya pero aún así no le gustaba aquella muchacha y no le gustaba que Peter le mintiera.

–Ahg, estúpido Parker.–Se quejó ella dejándose caer en su cama.

La mañana siguiente fue tranquila, se encontró con un Peter muy animado.

–¡Hey Oli!–Sonrió él para luego intentar darle un beso en los labios a su novia quién simplemente corrió el rostro haciendo que den en su comisura.

–¡Hey Parker!–Saludó amistosamente ella, disimulando las ganas de aún querer colgarlo en calzoncillos del asta.

–¡Parker!–Jessica se colgó de la espalda de su amigo y este último sonrió.–¿Dónde te metiste ayer? Pensé que estaríamos juntos.

Olivia lo miró prestando atención a lo que iría a decir a continuación.

–Oh, yo tuve que ir, ya sabes un robo.–Comentó él señalando la salida.

Maldito idiota, lo quemaría y colgaría su cuerpo en el asta, estaba decidida.
La mano de Jessica tomó el brazo de su mejor amiga tirando animadamente de el para llevarla lejos de los muchachos.

–¿Qué crees que estás haciendo?–Se quejó Jessica.

–¿Eh?–Su mejor amiga señaló su mano que estaba formando una leve llama para luego desaparecer rápidamente.–El idiota de Parker estuvo con la rubia teñida. ¡Los vi! ¡Y está mintiendome!

–Respira, calma.–La sonrisa reconfortante de Jessica hizo que Olivia volviera en sí.–Ahora, ¿Cómo quieres que lo asesinemos? ¿Recuerdas las clases de defensa personal que aprendí con Mark?–Olivia dudó un poco pero luego asintió.– ¿Quieres que lo derribe y tú lo atas?

–¿Qué diablos Jessica?–Olivia tocó la frente de su amiga rápidamente.–Definitivamente tienes que dejar de juntarte conmigo.–Rió.

–Tal vez.–Sonrió su mejor amiga.

Olivia se encontraba con su cabeza recostada en las piernas de Peter mientras que este le daba caricias en el cabello con una mano y con la otra miraba su teléfono. La muchacha no pudo evitar mirar de reojo lo concentrado que se encontraba viendo su teléfono. ¿Estaría mal preguntarle? Se estaba muriendo de la curiosidad.

–¿Peter?–Preguntó Olivia volteando a ver a Peter quién bajó su mirada dejando su teléfono en su mochila.

–¿Si?–Preguntó él quitando un cabello de la cara de Olivia.

Y ahí estaba la inseguridad de Olivia fallandole nuevamente.–Te amo, lo sabes, ¿Verdad?–Oli acunó la cara de Peter entre sus manos provocando que sus labios parecieran los de un pez, un pez adorable.

Peter sonrió tomando las manos de su novia.–Claro que lo sé, cabeza de chorlito.–Parker tomó la punta de su nariz juguetonamente.–Me gusta que me lo recuerdes, pero ¿Sabes que más quiero recordar?–Preguntó Peter haciendo fruncir el ceño a Olivia.

–¿Qué? Si te estás insinuando por el muffin que te robe, lo siento, pero en mí defensa se veía apetitoso y sabes que yo no soporto...–Olivia no terminó de hablar ya que los labios de Peter se estamparon contra los de ella callandola.–Está bien me callaré.–Murmuró sonrojada a no más poder.

¿Cómo era posible que Peter Parker podía ponerla roja en un momento a otro? Teniéndolo así para ella olvidaba todas sus inseguridades y malos pensamientos sobre todo. Dios, lo amaba y lo amaba tanto que le dolía.

–Te amo Olivia Klaine y no quiero que te olvides de eso nunca.–La sonrisa de Peter contagió a Olivia provocándole más ganas de besar a su novio.