SasuNaruko: Del ODIO al AMOR

Nunca más sola

-Narra Naruko-

Dejo que me consuma el beso otorgado por sasuke, que cuando termina de besar mis labios me encuentro totalmente avergonzada y sin palabras.

Siento como sus dedos han secado mis lagrimas y me toma de la mano, haciendo que me ponga a caminar.

A sido tan calido tenerle tan cerca de mi que solo escucho murmullos cuando me suelta la mano y me pide que tome asiento entre las mesas de la cafetería, excusandose que iria a buscar algo.

Busco con la mirada a mi hermano pero no le veo, suspiro con pena, tras todo el intento que hice por mantener el buen humor y creer que todo seria especial... pero solo habian sido patrañas, habían sucedido error tras error.

Quizas no debí creer que de alguna forma el aceptaría mis sentimientos por sasuke, pero aunque se lo negara después solo estaria mintiendo descaradamente.. sasuke es la unica razon por el que mi corazon no para de latir.

Niego.

De una u otra forma de volver a verlo trataria de explicarle lo que me sucede, dejo de pensar para distraerme viendo caminar a gente a mi alrededor, miro el reloj de mi muñeca y noto que han pasado bastantes minutos desde que ambos se fueron.

Saco mi celular de mi cartera esperando llamar a ambos pero me manda directo al buzon de voz, extrañada intento hacer otra llamada pero me volteo al ver que una mesera se a acercado a mi.

-Disculpe, es usted la señorita Naruko Uzumaki- me pregunta.

Asiento.

-Si, soy yo- le respondo.

Veo que la mesera se alegra y de su bolsillo me pasa un papel cuidadosamente doblado con forma de un gato de origami.

-El joven que me entrego esto me dijo que lo revisara y que te divirtieras- me responde sonriendo.

Sin saber que responderle le doy vuelta al gatito y con cuidado empiezo a ver si hay alguna pista dentro, hasta que veo una flecha con un extraño simbolo dentro indicando hacia la derecha.

Me levanto de mi asiento y le doy las gracias, guardo mi celular y me pongo a buscar alguna indicacion con esas caracteristicas.

Empiezo a recorrer el parque, bajo las escaleras  con cuidado al descender para no tropezarme y miro hacia ambos lados.

Veo a una pareja animadamente conversando, y me sorprendo al ver que uno de ellos llevaba una bolsa de compras con aquel logotipo.

No lo pienso dos veces y me acerco a ellos.

-Disculpe, por casualidad tiene alguna informacion para mi- le pregunto con aire cansado y un poco avergonzada.

Ambos se miran y se sonrien entre ellos, sacan de la bolsa otro origami y me lo entregan.

-Tu debes ser la muchacha que aquel joven nos entrego esto, cuando nos hablo de ti y que estabas de cumpleaños no pudimos evitar participar- me hablo el varon.

-Ah gracias!- le respondo.

-No es nada, todo sea por ayudar a un joven enamorado o no cariño- hablo la mujer riendo.