Sushi Romance [Hatake Kakashi]

09- Insulto.

"Fallar significa la muerte para un shinobi"

Meiko no podía moverse, realmente estaba exhausta.

-Vamos, solo acaba con esto- la rubia lo miraba fijo-

El filo de la espada se alejó lentamente de su cuello. La rubia suspiró y maldijo mentalmente.

-¿Qué es esto?- pudo escuchar el enojo en sus voz- ¿Acaso planeas insultarme de esta manera?-

Meiko simplemente prefirió el silencio, esperaba que no se diese cuenta de su estado y simplemente la asesinara, si eso pasaba, seguro que dejaría ir a Naruto y a los demás, al menos por esta vez.

-Kakashi...- un fuerte golpe la mandó a volar, terminó en medio de algunos árboles sin poder moverse-

-No planeo matar a un viejo enemigo que se presenta ante mí en tan deplorable estado, no permitiré que me subestimes- Zabuza estaba mas que enojado, podría asegurar que estaba furioso-

Meiko rogaba porque Kakashi fuese lo suficientemente listo para hacer que los niños huyeran.

Zabuza se lanzó hacia Kakashi, el platinado elevó su banda ninja una vez más, estaba preparado para pelear.

Meiko estaba en mal estado, pero aún así le dedicó una sonrisa a Naruto para que evitara dejar su lugar e ir hasta ella.

La pelea de Kakashi y Zabuza comenzó intensa y fué rápida, ahora Meiko sabía que todos esos años de escuchar halagos hacia el Hatake no era en vano, realmente era bueno en lo que hacía. El sharingan era de gran ayuda, pero también era una pérdida de chakra inmensa, si Kakashi no acababa con esta pelea pronto, seguro terminaría como ella, a punto de desmayarse.

Cuando la pelea avanzó más, Kakashi llevaba la delantera y el compañero de Meiko protegía a los niños, la rubia finalmente decidió dejar de resistirse, cayó inconsciente.

La rubia despertó con un dolor de cabeza terrible, su cuerpo también dolía y las heridas de las peleas anteriores le dolían a mas no poder. Se irguió por completo solo para comprobar que lo único que cubría su pecho eran unas vendas algo ajustadas, tenía puesto unos pantalones de dormir que por supuesto no le pertenecían, en otro futón a su lado estaba Kakashi, dormía como un bebé.

Masajeó su cabeza y se levantó, salió de la habitación. Afuera, Sakura estaba ayudando a una mujer de mediana edad a preparar algo para el desayuno.

Meiko las observó durante unos segundos antes de que se percataran de su presencia.

-Meiko-san ha despertado- Sakura le sonrió-

La rubia le sonrió de vuelta.

-¿Dónde estamos?-

-En casa del constructor del puente- la peli rosa le indicó que tomara asiento-

-¿Quién me cambió de ropa?-

-Fuimos nosotras- Sakura se apuntó a sí misma y a la mujer que cocinaba-

-¿Qué hora es? ¿Dónde esta mi compañero?-

-Son las diez de la mañana, su compañero está afuera entrenando-

-Es demasiado tarde- susurró molesta-

-Pronto estará listo el desayuno, puede despertar a los niños y al joven de cabello plata para que coman- la mujer le sonrió-

Meiko asintió obediente, se levantó y caminó de regreso a las habitaciones. ¿Qué pasó con Zabuza? Le preguntaría mas tarde a Kakashi.