Capítulo 2

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 - No, no te preocupes, estoy bien- le regalé una media sonrisa -es sólo que estaba pensando en que regalarle a mi padre en su cumpleaños, ya casi es y no sé que darle- le dije esperando a que me creyera - Oh _____ que tonta eres, ya me habías asustado, mira si quieres yo te puedo ayudar a escoger el regalo, soy muy buena para eso, nos vemos el sábado en el centro comercial, ya no te preocupes.- -Claro ahí nos vemos- < genial ______> pensé. Mire otra vez a Kenia y el chico nuevo, estaban platicando animadamente cuando por fin llegó la maestra, Tami se fue a sentar hasta el frente. -Buen día alumnos, tomen sus asientos por favor, lamento llegar tarde pero estaba arreglando unos permisos para que ustedes puedan realizar un proyecto que valdrá el 50% de su calificación final- se escucharon quejidos por parte de la mayoría de mis "compañeros" -shh silencio- indicó la maestra- el proyecto será por equipos de 3 que yo elegiré, cada uno de los equipos tendrá que ayudar en una de las fundaciones benéficas por un mes, que  también yo les otorgaré cuando ya estén hechos los equipos, además de escribir un reportaje acerca de esa fundación, lo que hacen y lo que ustedes hicieron para ayudar, quién la fundó, a quienes ayudan, etc. y para verificar que si cumplieron, la persona que esté a cargo tiene que firmarles esta hoja por equipo que les pasaré para que puedan obtener una calificación aprobatoria. Ahora haré los equipos...-                            

 -Tamara, Miguel y Alicia serán el primer equipo- <¡ay no!, bueno solo espero que no me toque con...> -_____, Kenia y Margo serán el segundo equipo- Kenia y Margo sonrieron sínicamente mientras me veían, de todas las personas que hay aquí me tuvo que tocar con ellas, sé que terminaré haciendo el trabajo sola, por una parte estaba bien porque así no tendría que estar aguantando sus ordenes pero por la otra, simplemente no era justo que yo hiciera sola todo el trabajo.- Ustedes ayudarán en el hospital "Santa Mónica" de la ciudad, el lunes les dirán ahí en que pueden ayudar, es un hospital infantil pero además es un centro de rehabilitación para niños con alguna incapacidad.- la maestra siguió haciendo los equipos - Muy bien fenómeno esto es lo que haremos- comenzó Margo- Tú te presentaras el lunes en ese asqueroso hospital lleno de gérmenes y dirás que tenemos alergia a los hospitales, por eso no podemos ir- dijo Kenia - así que tú sola vas a hacer ese tonto proyecto, incluyendo el reporte y dirás que nosotras también ayudamos- continuó Margo - ¿ entendido?- dijeron las dos al unísono, prefería mil veces hacerlo sola que pasar todas las tardes por un mes completo con esas dos malcriadas. -Está bien- dije, sonó la campana y me fui a mi siguiente clase, todo pasó aburrido, era la clase de historia el maestro claramente ya tenía más de 70 años y sólo nos contaba parte su vida, mientras nos dormía a todos no podía evitar voltear a ver a ese chico, era muy extraño se notaba que era la clase de chicos que ocultan un horrible pasado, tal vez no debería juzgarlo sin antes conocerlo pero para mí que oculta algo.          

Y así pasaron las demás clases sin nada de nuevo, hasta que por fin escuche el sonido que tanto había esperado, la campana, ya era la hora de la salida así que guardé mis cosas en la mochila y salí lo más rápido que pude, no quería ser mala con Tami al no esperarla pero estoy segura que no le importaría, tenía muchos amigos, era incluso más popular que Margo y Kenia, sólo que ella era la más linda chica de toda la escuela, a todos les caía bien, claro a todos menos a esas dos que la odiaban casi tanto como a mí, la diferencia es que Tami no se dejaba pisotear como yo, la admiraba mucho me siento afortunada de que sea mi amiga. Salí del edificio y me encaminé a mi casa, cuando llegue busque mis llaves en mi mochila y abri la puerta, deje la mochila en el sofá y me dirigí a la cocina, lave los trastes sucios que había dejado en la mañana y subí a mi habitación,  por suerte hoy ya era viernes, me recosté en mi cama y decidí tomar una pequeña siesta después de todo no tenía nada más que hacer hoy. Me levante a las 7 pm tenía mucha hambre no comí y seguramente mamá no llegaría temprano para cenar, así que baje a ver que había de comer, revise el refrigerador y  la alacena pero no había nada. Me puse un suéter y salí de la casa para ir al súper mercado, tome una leche, galletas, y todo lo que se necesita para preparar hot cakes, me dirigí a la caja y me forme, cuando toco mi turno para pagar vi por el cristal que daba a la calle a 3 sujetos que parecían estar borrachos, terminé de pagar y cuando estaba por llegar a la puerta de salida, por suerte noté que los tipos ya no estaban, sentí un gran alivio y me dispuse a seguir mi camino. Ya había oscurecido, lo admito siempre he temido a la oscuridad y más cuando estoy en la calle y no hay nadie por ahí, caminé a mi casa con las bolsas de la comida pero escuché unos pasos atrás de mí, no me dio mucha confianza así que acelere más el paso pero quien sea que estuviera atrás de mi también lo hizo, me invadió el miedo y terminé corriendo, no había ninguna persona que me pudiera auxiliar, en eso sentí una mano sujetándome y otra tapando mi boca mientras me llevaba a un callejón, comenzé a patalear para que me soltara pero no lo hacía, me sujetó con más fuerza y yo ya no sabía qué hacer, mis lágrimas estaban a punto de salir, tenía mucho miedo, logré ver su rostro y me lleve una gran sorpresa, no lo podía creer, ¿en serio era....

Ángel Cruel ( Alan Navarro y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora