Hokage Ryo's Path

Capitulo 5: Malas Noticias Y Una Experiencia Triste

Este año, Konoha había ganado todas la batallas. La Arena se rindió, la Niebla falló en alcanzar el País de Fuego, y sólo la Nube y la Roca pudieron luchar entre ellos. ¡Konoha emergió victoriosa en esta guerra!

Las noticias sobre la victoria llegaron a la Aldea, dejando a los aldeanos y los ninjas aliviados. ¡Se acabó la guerra! ¡Todos yacían en línea para saludar a los héroes de guerra! Y Ryo estaba en el grupo de bienvenida.

"¡Miren, regresaron!"

Los Ninjas Sensores y aquellos con Dojutsus fueron los primeros en ver las tropas en la distancia, y pronto, toda Konoha pudo verlos. Los gritos de los aldeanos se volvieron más fuertes mientras las fuerzas ninjas se aproximaban.

Ryo se deslizó entre la multitud con su ventaja física. Había tres personas en la delantera: La princesa Tsunade, el Sannin Orochimaru, y el último era el Colmillo Blanco, Sakumo Hatake.

Orochimaru, quien estaba en el País del Agua, fue capaz de bloquear todos sus ataques por dos años. Sakumo trajo a la Arena en sus rodillas después de matar a sus más grandes titiriteros. En cuanto a Jiraiya, todavía estaba con Nagato y sus amigos, enseñándoles y cuidándolos.

Los tres se dirigieron hacia el 3er Hokage: Sarutobi Hiruzen. Todos sonreían mientras recibían las alabanzas bien merecidas de los habitantes de Konoha.

"¡(Sensei) Sandaime, afortunadamente, no nos decepcionaron!"

"¡Correcto!" El 3er Hokage estaba orgulloso: Hace un momento, esos tres eran pequeños mocosos, pero ahora podían proteger a la Hoja. "¡Sensei, dejemos que los héroes vayan a casa!"

Después de terminar el programa y aplaudir, el ejército ninja se propagó, y  había casi cien camillas al final del grupo. La mayoría de esos ninjas estaban heridos severamente, y su supervivencia no estaba segura. Muchos otros habían caído en el campo de batalla.

El 3er Hokage también le dijo a los aldeanos que abriesen camino para las camillas. Esa atmósfera afectó a Ryo. Él solía ser un doctor, así que ver a personas enfermas o muriendo no lo molestaba, pero la inmensidad de la escala de las heridas era difícil para él de imaginar. Le hizo caer en cuenta que este mundo era real, y la muerte era también igual de real.

Después de que llevaran las camillas a la aldea, Sakumo y los dos Sannin se separaron a orden del Hokage. Él sabía que lo que necesitaban no era un banquete, sino una reunión con sus familias.

Ryo mantuvo sus emociones dentro de él mientras regresaba a la casa con el resto de los Yamanakas. Después de entrar a la casa, vio a su madre escuchar a Hatake Sakumo mientras derramaba lágrimas, y al lado de ellos, Yamanaka Inoichi tenía sus ojos completamente rojos.

"¡Ryo, tu tío está muerto!"

La voz de Inoichi no fue fuerte, pero impactó el alma de Ryo como si fuese el tronar de un relámpago en una noche tranquila. Desde su nacimiento, su tío estaba con él, le enseñó a caminar, habilidades, y le dio la calidez que nunca había recibido de un padre en ambas vidas. ¡Ahora estaba muerto!

Inoichi recordaba que su padre se fue cuando Ryo sólo tenía dos años, así que él debería haberse olvidado de él por ahora. Poco sabía que Ryo tenía la mente de un adulto, junto con una excelente memoria de doctor.

"Sakumo-san. ¿Quién fue?" Dijo Ryo con calma, con su cabeza abajo.

Sakumo también pensaba que él ya se había olvidado de su tío, y dijo casualmente: "El Jinchuriki del Cuatro Colas, Rochi."

"¿Fue él? ¡Lo mataré!" Dijo Ryo con una voz firme, levantando su cabeza mientras que de sus ojos fluían cientos de lágrimas.

"¡Oh! Esto... ¡Eh!"