Atrapada en el libro.

Capítulo 8

Con pasos llenos de seguridad y a la vez incomodidad termino de llegar a mi clase. Me siento rara con este uniforme, la camisa es perfecta, pero la falda es un poco corta para mi propio mal.

Me dispongo a mirar los pocos estudiantes conversando, riendo, masticando chicle, con auriculares. Parece que aún no llegan los demás y me alegra por una parte, así no me estarán mirando todos como si fuera un experimento.

Hablando de la palabra "mirar" tardaron mucho para hacerlo. Todos están mirándome en silencio. Yo sigo caminando hasta uno de los últimos asientos, pienso sentarme, pero una pelirroja se acerca a pasos lentos, su camisa está muy ajustada haciendo que su pecho pueda ser más visible.

–ese lugar está ocupado–dice arreglando su pulsera–y creo que una persona con modales dice "buenos días" o ¿será que no tienes?

La observo achicando los ojos–¿disculpa?–¿es enserio? ¿Quien demonios se cree?

–oye, nueva–volteo a mi derecha–aquí está desocupado–una chica de tez morena, ojos negros y pelo muy largo señala un asiento detrás del suyo.

Le doy una última mirada a la chica que ya empezó a caerme mal para luego dirigirme al asiento–gracias.

–no es nada–sonríe–me llamo Denis, un gusto.

La saludo–soy Beverly, el gusto es mío.

Sonríe–no le hagas caso, solo quiere llamar la atención.

Quiere llamar la atención con alguien que sabe hacerlo aún mejor.

Tomo asiento–¿como se llama?

Denis toma asiento acomodando su largo cabello–Cristal.

–fácil de romper–sonrío.

–oye, me agradas–sonríe.

Me encojo de hombros–suele pasar–ambas reímos–¿como son las cosas aquí? ¿quien es cada quien?

Abre los ojos con sorpresa–¿enserio quieres que te diga el nombre y personalidad de cada uno de estos locos?

–¿si?–miro mi alrededor–no es mucho.

–eso crees–tira un largo suspiro–okay empiezo–los mira–ese rubio desgraciado que está allí, es Andrés.

Lo observo, está moviendo la cabeza al ritmo de no sé qué canción sonando en sus auriculares rojos–¿Andrés?–empiezo a reír–¿como el periodo?

Arruga las cejas–¿que?

Paro de reír dándome cuenta de que no sabe de lo que hablo–olvídalo, continúa.

–aquella chica callada, que si le fuera posible venir vestida de negro todo el tiempo lo hiciera, es Naomi.

Observo la chica de cabello negro y piel pálida–¿metálica?

–no estoy segura, pero es posible que lo sea–su mirada se dirige al chico castaño, quien parece estarse grabando así mismo–él es Víctor, pero todos lo llaman Grey. Hace videos en Tik Tok. Todo el tiempo está haciendo nuevos videos para sus locas seguidoras, ya tiene una corona y se necesita la puerta más enorme del mundo para cruzar su ego.

Asiento con la cabeza–¿y ves sus videos?

–claro–se detiene–quiero decir, he visto algunos por accidente.

Levanto una ceja–claro.

–no importa–se lame los labios–ese de allí es Arthur. El chico misterioso, no sabrás nada de él más que que su bello nombre–niega con la cabeza–es tan lindo.

Sonrío–¿te gusta?

Sonríe tímida–se podría decir que si, pero... es solo una simple atracción, nada más.

Lo observo. Está rayando algo sobre una hoja de papel, parece estar dibujando. Mientras lo hace muerde su labio inferior, su cabello castaño está desordenado y luce húmedo.

–¿le haz hablado?–lo sigo observando.

Suspira–no... o bueno, algo peor–lame sus labios–Una vez lo seguí discretamente. No sabía que terminaría en el baño, lo juro.

Abro los ojos en sorpresa–¿lo seguiste hasta el baño?

Baja la mirada apenada–no pretendía seguirlo hasta allí...

–oh Dios, pobre chico–pongo una mano en mi frente –¿que pasó después?

Duda por unos segundos hasta que decide hablar– vi su amiguito.

Mi labio cae en sorpresa–¿que?–no puedo evitar romper en risa.

Se sonroja–basta, no es gracioso.

Dejo de reír un poco– ¿y te vió?

–si–se cubre el rostro con ambas manos.

–oh Jesús–río de nuevo–este es un nivel de acoso muy alto. Aunque creo que nadie será mayor acosadora que Raquel.

–¿Raquel?–dice aún con las manos en el rostro.

–si, la mejor acosadora que existe–sonrío al ver que aún no mueve sus manos–oh vamos, Denis, no hay por qué avergonzarse, no eres la única.

–aún así es vergonzoso–dice en tono dolido–se puso todo rojo, por Dios.

No dejo de reír–¿como era?

–era... –quita las manos de su rostro y se cruza de brazos–no voy a decirte eso.

–tranquila, no voy a forzarte, tal vez es difícil describir–la miro incrédula.

–eres una pervertida–niega con la cabeza.

–¿pervertida yo? ¿Acaso fui yo quien vio el amiguito del misterioso Arthur?–pregunto poniendo una mano en mi pecho.

–baja la voz–dice con frustración–no quise hacer eso.

–aún así lo viste–digo encogiéndome de hombros.

Rueda los ojos–¿podrías ser más frustrante?

–descuida, no soy tan mala–sonrío–o eso creo.

Sonríe negando con la cabeza–oye Bevy, ahora háblame sobre ti, ¿de que colegio vienes?

–en primer lugar, aún no terminas de hablarme sobre los chicos de aquí, y en segundo lugar, es larga, muy larga historia.

–pues yo quiero escuchar tú historia, aunque sea en otra ocasión.

–entonces en otra ocasión será. Ahora por favor continúa, yo pregunté primero.

Suspira–está bien, pero luego me dirás.

–bien, lo haré...

Cuando sea sencillo contar algo tan irreal.

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Escritora: ¡hola! Hermosos lectores <3 les extrañé mucho :'(

Siento la tardanza, me he esforzado bastante para escribir capítulos, pero la inspiración no me da, además de la falta de tiempo. Estoy dando lo mejor para que cada capítulo valga la pena.

Espero les haya gustado <3

¡Se que debo unos saludos a esas lindas personitas que me faltaron! :p