꒰ ﹫ : 𝗧𝗥𝗢𝗨𝗕𝗟𝗘𝗠𝗔𝗞𝗘𝗥 𝗕𝗢𝗬！

E

Luego de todo ese pequeño -pero a la vez largo- tiempo en el cual moría por confesarte mis sentimientos, valió la pena esperar; ¡Soy tu novia! Quién lo diría...

Lo mejor de todo, nuestras costumbre volvieron y más fuertes que nunca. Ahora me tienes siempre agarrada de la mano, normalmente me abrazas -hasta de la cintura-, me dices cosas un poco cursis -aunque a los minutos después de decirlas, te avergüenzas-, e incluso me haz llegado a besar frente a muchas personas. No me desagrada, al contrario, lo encuentro un bonito gesto de tu parte.

También me haz hecho muchas invitaciones para salir, hasta me has invitado para estudiar juntos. Bueno, digamos que más que estudiar, nos la pasamos mirándonos, besándonos o simplemente haciéndonos caricias. ¿Quién diría que la chica solitaria del salón tendría un novio? Un novio tan jodidamente guapo.

El día que fuimos al parque no fueron ni necesarias las palabras; tu cabeza en mi regazo y yo apoyada contra un árbol. Hablábamos de las formas de las nubes mientras las señalábamos y reíamos. Todo esto parecía un sueño, tan irreal y a la vez tan hermoso.

Me miraste, sonreíste, me besaste y dijiste un tan simple y dulce "Gayunnie, te quiero mucho". Mi corazón latió muy fuerte -demasiado para mi gusto- y sonreí como una boba. Te respondí con un tímido "Yo igual" y seguimos en lo que estábamos.  

Sin duda alguna, la pasaba genial contigo. Y claro, mi mamá obviamente llegó a saber de lo nuestro, apoyándome feliz. No contemos con mi hermano en esto, que su lado molestoso-celoso puede salir a la luz.

Chico problemático, el tiempo es oro junto a tí.