6to grado de primaria.
Una profesora llena de estereotipos.
Había dos "clases" en mi aula.
Los hermosos, delgados y lindos.
Los ignorados, gordos, feos, "imperfectos".
La profesora le daba preferencia a los lindos, y yo, yo le importaba una mierda.
Me encontraba con una amiga, muy delgada ella, y yo... Esperando la adolescencia.
De nuevo él y sus comentarios, últimamente me hacía sentir mal.
"Tu amiga es el bate, y tú el barril", "tú la gorda".
Me sentí mal, muy mal, ella le dijo de cosas, insultos.
"Ignoralo", la palabra que más salía de mi boca.
Ella era linda, y me dejó de hablar, se fue con los favoritos de la profesora, me dejó sola... Sola con mi grasa.
Acabo la primaria, jamás volvería a ese lugar, horrible lugar.
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"¿Iniciaras la secundaria siendo una vaca?"
No. No. No.
Empecé a hacer ejercicio, comer menos.
Bajé 2 kilos en 2 meses, poco, muy poco.
Primer año fue normal, inicie una vida sana, ejercicio y comida saludable, claro, de vez en cuando me daba algún gusto culposo, y era ahí, donde el ejercicio me consumía, todo de mi, mi sudor, mis lágrimas y mis suspiros.
Y sin darme cuenta, estaba por iniciar el peor tormento de mi joven vida.
