Jimin:
13 de octubre de 1985:
Querido diario, hoy finalmente es mi cumpleaños número 18 y el padre Albert me ha dicho que ya es hora de que elija el camino a seguir. Me ha propuesto ingresar al seminario y comenzar mis estudios para ser sacerdote... Yo sinceramente no estoy muy convencido de querer ser sacerdote pero no quiero decepcionar al padre y las hermanas, además ya estoy muy acostumbrado a la vida en la iglesia no tendría que mudarme ni buscar trabajo, dedicaría mi vida a dios... Tal vez no sea tan mala idea, aun no lo sé, pero todavía me queda tiempo hasta diciembre cuando finalmente acabe el año escol—
No pude terminar de escribir en mi diario cuando, oí que llamaban a mi puerta. Escondí rápidamente mi diario debajo de la almohada y me apresure para preguntar quién era.-A-adelante.
-Jimin, el padre Albert dice que vayas inmediatamente a su oficina, tiene asuntos pendientes contigo. -Dijo la hermana Samantha, de todas las hermanas, ella era la que más miedo me daba. Siempre me gritaba por cualquier cosa, incluso por más que yo la tratará bien y con respeto nunca pude congeniar con ella... De hecho no puede "amigarme" con ninguna de las hermanas de la iglesia, pero bueno, yo solo podía hacer lo que ellas querían, después de todo era un simple huérfano al que le dieron un techo. Debía estar más que agradecido con ellas y el padre Albert.
-S-si hermana Samantha enseguida voy.
-No me digas hermana.
-P-pero...
-Agh ya cállate y ve con el padre inmediatamente.
-S-si.
Cerró con fuerte portazo y yo me apure en arreglarme enseguida, para salir corriendo directo a la oficina del Padre Albert. La oficina central se encontraba arriba y al fondo del edificio de la escuela, y los dormitorios no estaban muy cerca que digamos, debía apurarme en llegar sino quería otra represalia de Samantha.
Ya estaba enfrente de la oficina del Padre Albert, tomé aire profundamente siempre me daba escalofríos tener que entrar en este lugar. Toqué la puerta y esperé a que me dejarán pasar.
-Adelante.
-B-buenas tardes Padre Albert, la hermana Samantha me ha dicho que usted me estaba buscando.
-Por supuesto mi querido Jimin, ven acercate tengo algo que decirte.- Entre en la oficina y me quede al marguen de su escritorio.- Acercate más, ven aquí. - Hizo ademán a que me suba a su regazo. Cuando era más joven siempre me cargaba, nunca me gustó pero no podia decir nada.
-Y bien padre, ¿por qué me mando a llamar? - Dije haciendo la vista gorda y quedandome en mi lugar.
-Lamento mucho que justamente sea hoy en tu cumpleaños pero quería informarte que un nuevo alumno esta por ingresar... - Dijo en tono serio, levantándose de su asiento mientras se me acercaba.- Y aunque yo no quiera, no tenemos más lugares en los dormitorios por lo cual tendrás que compartir habitación con él. Simplemente ignoralo, trate de que fuera con algún otro pero tu habitación es la única vacia y además es más grande, sólo te doy lo mejor a ti. - Dijo acariciando mi cabeza- Pero bueno no hay nada que pueda hacer en este caso.
-Está bien Padre Albert, no me molestara compartir habitación con él.
-De última podrías venir a dormir conmigo, si te causa demasiadas molestias...
-Por favor, no se preocupe por mi Padre, estaré bien.
-No lo dudo Jimin, pero no confío en ese delincuente. Cualquier cosa avisame, ¿está bien? No quiero que toqué ni un solo cabello tuyo, eres demasiado lindo y no dudaría en que tal vez quiera acerte daño.
-Oh no Padre Albert, estare bien, en caso de que algo pase se lo informare... Bueno, si eso es todo lo que necesitaba yo...
-Si, solo era eso, ya puedes retirarte, hoy te toca ayudar en el comedor junto con Taehyung y Hoseok, pero puedes dejarlo y venir a mi oficina si gustas.
-Muchisimas gracias pero creó que es mejor que cumpla con mis deberes Padre.
-Siempre tan correcto querido Jimin. En fin, nos vemos a la hora de la cena, hasta luego.
-Adiós Padre Albert.
Salí corriendo de aquella oficina, no es que el Padre me diera miedo, pero a veces estar con el me provocaba escalofríos. En fin, no importa ya, debía alistarme para ir a mis clases de catequesis que comenzarían pronto, y después tenía que ir al comedor junto con Tae y Hobi. Ellos eran mis únicos amigos, lamentablemente cursaban en horarios diferentes a los mios y siempre que podíamos pasábamos tiempo juntos aunque últimamente no nos veiamos tanto como antes, además ellos los fines de semana podian salir e irse con sus familiares, en cambio, yo siempre me quedaba aquí y no me gustaba tener que estar solo en un lugar tan grande... Es por eso que estaba más que emocionado de ir a limpiar y ayudar en el comedor, al fin tendría algo de tiempo para hablar con ellos.
Por otro lado, estaba el nuevo alumno con el que compartiría habitación... Mentiria si dijera que no sentía algo de miedo al saber que iba a estar con un chico problemático pero bueno, no hay que juzgar a nadie, primero debería conocerlo y no tenia la menor idea de cuando llegaría. Pero seguramente no sería tan malo, todos somos ángeles de Dios después de todo.
Bueno mis pequeños saltamontes, este fue el primer capitulo espero que les haya gustado. Esta va a ser una larga historia y espero que esten dispuestos a terminarla... Por favor si ven algún error de ortografía, no duden en decirmelo en los comentarios!
En fin, por ahora sólo eso, no se olviden de votar si les gustó y sí no les gusta... Voten igual que un simple click hace que esta idiota escritora se ponga feliz.
Nos leemos la próxima.
Azul.
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Lost Stars ✨ Kookmin // FanFic. [EDITING]
Teen FictionJimin es un huérfano él cual dedicó su vida a la iglesia. Vive bajo el cuidado del Padre y las hermanas del lugar. No conocía el mundo exterior, estaba limitado a las grandes murrallas que cerraban aquella iglesia e instituto religioso. Siguiendo ci...