Prólogo.

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Sasuke odiaba las fiestas. Todo el mundo sabía eso y por eso es que no recibía muchas invitaciones a estas, bueno, a excepción de su estúpido mejor amigo Naruto Uzumaki.

El muy imbécil no podía recordar que Sasuke odiaba la música alta, el sonido de las risas, luces cegadoras y todo ese ambiente que desprenden los hogares a eso después de las tres am. Él lo odia, pero Naruto había insistido demasiado en que asistiera a la fiesta o de lo contrario se sentiría muuuy solo ―cosa que era una total mentira―, pero el rubio ahora estaba muy acaramelado con la señorita Hyuuga entre sus brazos.

Así que con una botella de licor barato, se dispuso a relajarse en el sofá de la casa Uzumaki. Extrañamente no habían chicas a su alrededor cómo usualmente pasaba, aunque no es que les extrañará, por él mejor así. Cada uno de los integrantes en dicha fiesta estaban muy enfrascados en sus asuntos.

Y cómo no, era año nuevo. Esa fecha dónde lo ideal es dar un comienzo para iniciar con lo mejor el año y pasar tiempo de calidad con tu pareja, amigos y familia.

Pero Sasuke no. Sus padres estaban en un largo viaje de negocios y su hermano mayor en la casa de su novio Deidara, así que le tocaba convivir con la banda de imbéciles a los cuales llamaba amigos.

Dio otro sorbo a su cerveza y se quiso hundir completamente en el sofá.

Pero de pronto una voz lo saco de sus pensamientos.

―¿Me puedo sentar? ―volteó y escaneo a su acompañante. Sakura.

Solo Sakura.

―Da igual. ―contestó sin más.

Y la chica no perdió oportunidad de sentarse al lado del azabache, aunque a una distancia considerable para la sorpresa de Sasuke.

―¿Cómo has estado, Sasuke-kun?

Él rodo los ojos hasta dejarlos en blanco, porque siempre era así, ella venía a humillarse hasta públicamente por una mínima mirada suya y eso sencillamente lo jodia.

¿Qué acaso no tenía vida o amor propio?

―Nada en específico.

―Pff... ―y una risa lo desconcerto por completo. Le dirigió una mirada de duda― pareces tenso, Sasuke-kun.

―¿Tenso?

―Incómodo, ya sabes.

―Me siento como siempre, no sé de que hablas.

Un pequeño brilló en los ojos jade de Sakura y una pequeña sonrisa zurco sus labios antes de soltar, ante la mirada inquisitiva de Sasuke:

―Otro año más, he. ―susurró― el tiempo pasa tan rápido. Aún recuerdo cuando llegaste al vecindario, Sasuke-kun... Cómo Naruto y yo peleabamos por tu atención. Eramos unos críos tontos.

Su suave risa se coló por sus oídos y por alguna razón le hizo golpear su corazón con tranquilidad.

―Siempre me seguías junto a Ino... ―se atrevió a decir.

―Oh, si. ―rio― es que todo ese tiempo estuve locamente enamorada de Sasuke-kun... pero otro año más llega.

―¿Eso que significa? ―mencionó confundido.

Ella parecio devatirse por un momento antes de dejar su cerveza a un lado y subirse sorpresivamente sobre la cadera del chico, dejando sus piernas a los costados y sosteniendo con sus delicadas manos su nuca.

Sasuke comenzó a sentirse incómodo por la cercanía que tenía con la chica y aunque tenía la fuerza la apartarla, no lo hizo, porque tuvo la sensación de qué lo que iba a decir era importante.

―Sakura... ―pero tan pronto pronunció su nombre, recibió un beso en los labios, uno rápido y sensual que le arrebató el aliento.

Él no lo podía creer, estaba sin palabras. Pero aún así sus dedos comenzaron a pasearse por la cintura de la chica, tanteando con cierto recelo sus costados. Sakura posó una sonrisa ladina en sus labios llena de soberbia que le hizo acelerar el corazón al chico frío de Konoha.

¿Se estaba burlando de él acaso? Oh dios... ¿Porqué le parecía tan jodidamente sensual su sonrisa llena de burla?

―Eso significa, Sasuke-kun... que ya no siento nada por ti. ―soltó una risita que le taladro en la cabeza junto a sus palabras.

Pero nisiquiera le permitió decir nada antes de saltar de entre sus brazos para tomar su bolso y retirarse, dejándolo con un corazón totalmente desembocado. ¡Ella se fue así simplemente, después de robarle un beso!

―¡¿Que demonios?! ―gritó, antes de pasar su mano por sus labios con el rostro teñido en un rojo carmesí.

Si, Sasuke odiaba las fiestas.

[ ♡ ♡ ♡ ]

―¿Entonces ella simplemente te beso y se fue? ―preguntó con los ojos totalmente abiertos.

―Si... ―murmuró Sasuke con vergüenza, al verse a si mismo contándole sus problemas a Suigetsu.

¿En que estaba pensando?, ¿Acaso tan desesperado estaba?

―Vaya, quién pensaría que una chica rechazaría a Sasuke... ―Murmuró Juugo.

―¡Ella no me rechazó! ―grito exaltado y luego se lamentó pues eso no era propio de él, dejar ver sus emociones... ¿Qué le estaba pasando?

―Tranquilo, Sasuke. ¡Nosotros te ayudaremos a recuperar a tu novia!

―No es mi novia, Suigetsu.

―Oh, calla. Te aseguro que dentro de tres días la volveras a tener detrás de ti, mi amigo. ¡¿Cierto, Karin, Juugo?!

―Si es por Sasuke no me queda de otra... ―dijo Karin acomodando sus lentes pero molesta a fin de cuentas.

―No me estan escuch... ―trató de hablar y evitar el montón de estupideces que su grupo de amigos podía armar en menos de un minuto.

―¡Entonces no se diga más!, ¡"Operación: conquistar un corazón", comienza!

Operación: Conquistar un corazón. |SasuSaku| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora